VALÈNCIA. El almacenamiento se ha convertido en el gran reto del sector de las renovables para conseguir un sistema energético más eficiente y cumplir con los objetivos de descarbonización. Por ello, son varias las tecnologías y empresas que están explorando nuevas soluciones para retener la energía que generan y evitar el colapso de la red ante la alta demanda en el mercado. Una de las empresas que va por este camino es Esparity Solar, que diversifica y ya estudia sus primeros proyectos de almacenamiento, aunque no es el único desafío que quiere afrontar este 2024. También, el hidrógeno y la generación de energía para centros de procesamiento de datos son otros negocios que están en su radar.
Fundada en 2017 por un grupo de inversores y expertos en el sector energético, la compañía está especializada en la promoción y desarrollo de parques fotovoltaicos. En España, su base de operaciones está en València, y su portfolio alcanza los 580MW de potencia con 9 plantas solares en diferentes puntos de la geografía del país y una inversión que alcanza los 320 millones. De ellos, están en una fase más madura 170 MW, que suponen una inversión de 120 millones de euros. El más avanzado en la Comunitat Valenciana está en Xàtiva y su construcción se prevé que comience a finales de 2024. No obstante, la compañía cuenta a día de hoy con un pipeline de 2,6 GW con una inversión prevista de 1.750 millones.
No obstante, ahora busca ampliar su negocio y el almacenamiento es una nueva línea a explorar en base a los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030. Y lo hará con baterías stand alone, una modalidad de almacenamiento por el cual la batería se nutre y absorbe energía de la red en momentos de máxima generación solar y a precio muy barato y la descarga para su venta cuando hay más demanda y precios más altos para reducir el pico.
La infraestructura de estos proyectos es similar a la de un contenedor de mercancía y debe ubicarse cerca de una subestación para conectarse a la red. Además, a diferencia de un parque fotovoltaico, no precisa de una gran superficie para su construcción. "Un parque solar de 5 MW ocuparía 100.000 metros cuadrados frente a los 1.500 metros cuadrados de una planta de almacenamiento stand alone", explica Ildefonso Mozas, business development manager en Esparity Solar.
En estos momentos, la compañía negocia con propietarios de terrenos, tanto en la Comunitat Valenciana como en otras regiones, y está analizando el trámite administrativo necesario para iniciar proyectos, ya que todavía no existe una regulación concreta para este tipo de desarrollos. De hecho, en la nueva Ley de Renovables que prepara la Generalitat Valenciana se quiere regular precisamente el almacenamiento para facilitar a los promotores la inversión en este tipo de iniciativas.
"El almacenamiento es el siguiente paso a la fotovoltaica y del sector en general porque a las renovables les falta flexibilidad. Tienen muchas bondades, pero también el inconveniente de que por la noche no hay sol y, por tanto, el almacenamiento es la clave", subraya Mozas. De hecho, van a incorporar baterías a su plantas para aprovechar al máximo la energía solar.
Paralelamente, también quiere posicionarnos en el lado de la demanda, aprovechando la energía que producirán sus parques fotovoltaicos, para lo que ya están trabajando en la posibilidad de alimentar a centros de procesamiento de datos con energía renovable. "Nuestra idea es situar un centro de estas características cerca de una de nuestras plantas, próximas a grandes ciudades, para aprovechar la energía que se genera", explica Hugo Sibony, project manager de Esparity Solar.
Para ello, ya se han asociados a la Asociación de Data Centers en España (Spain DC) y pactando acuerdos con empresas vinculadas a este tipo de negocio. "Tenemos varios contactos abiertos para nosotros desarrollar la planta y que ellos ayuden desarrollar el centro de datos", puntualiza. La idea, a priori, sería aprovechar los terrenos ya adquiridos o alquilados por la empresa para desarrollar fotovoltica con el fin de ubicar ahí estos centros de procesamiento de datos, restando superficie a su parque.
"Estamos estudiando terrenos existentes en ubicaciones cercanas a ciudades porque vemos que en esos puntos es más viable hacerlo. Nosotros aportaríamos los terrenos y la producción de la planta renovable y ellos su conocimiento sobre data centers y la ingeniería", puntualiza Sibony. Sobre la explotación y gestión del desarrollo, el project manager de Esparity Solar comenta que se determinaría con la empresa con la que formen la alianza. "Podríamos vender la infraestructura u operarla conjuntamente, pero eso lo veremos. No descartamos ninguna opción", comenta.
Asimismo, Esparity Solar no se cierra a un acuerdo de exclusividad con un partner y su voluntad es iniciar este mismo año un proyecto de estas características en Madrid y Extremadura. "Queremos firmar una asociación este 2024 y, de hecho, ya estamos hablando con varios ayuntamientos para tener también su visto bueno", señala.
Otro hito que quieren conseguir es ir más allá de la fotovoltaica y dar el paso al hidrógeno verde. Para ello, la compañía ya se ha integrado también en la Asociación Española de Hidrógeno Verde(AeH2). "Al final, es hacer una planta fotovoltaica y en lugar de volcar la energía a la red se hace a un electrolizador, una máquina que transforma la electricidad en hidrógeno. Pero, para eso, hay que estar cerca de una fuente de agua para acometer ese proceso y en ello estamos trabajando con varias empresas que conocen esta tecnología", apunta Mozas.
Con todo, Esparity Solar busca ampliar sus líneas de acción, aprovechando su conocimiento y experiencia en el mercado de las renovables, pero anticipándose a las necesidades del mercado. De hecho, tanto el almacenamiento como el uso de hidrógeno verde son todavía grandes desafíos que tiene el sector y que están llevando a muchas compañías a buscar soluciones para acelerar la transición hacia una economía más verde.