VALÈNCIA (EP). El Palau de les Arts de València acoge este jueves y viernes el II Encuentro Internacional Renowagro, un foro para el análisis de los recursos renovables para la sostenibilidad del sector agroalimentario que incluye debates sobre los retos y oportunidades que ofrece la gestión sostenible de los suelos para la agricultura del siglo XXI y para la sociedad en general.
La inauguración ha contado con la participación del ministro Luis Planas, en su primer acto tras revalidar la cartera de Agricultura, Pesca y Alimentación, y con los consellers José Luis Aguirre (Agricultura, Ganadería y Pesca) y José Antonio Rovira (Educación, Universidades y Empleo).
En su intervención, Planas ha defendido que "aumentar el contenido en carbono del suelo es un reto y una oportunidad" y ha abogado por prácticas agrarias beneficiosas para el medio ambiente y que mejoren la rentabilidad de los agricultores. También ha llamado a la unidad de administraciones, comunidad científica y la agroalimentación y ha destacado la potencia de este sector en España como cuarto país exportador de alimentos de la Unión Europea y séptimo del mundo.
Para consolidar esta posición de liderazgo, ha apuntado a la necesidad de lograr explotaciones más sostenibles desde el punto de vista ambiental, económico y social: "Si la sostenibilidad no es rentable, no será sostenible".
El ministro ha resaltado además que su departamento trabaja para facilitar a los agricultores una buena gestión de los suelos, que mejore los rendimientos y los servicios que prestan en la protección del medio ambiente.
Por su parte, el conseller de Agricultura ha defendido el derecho a desarrollar la capacidad de producir alimentos saludables de calidad y de abastecer las necesidades sin depender de manera creciente de las importaciones. Para ello ha reclamado coherencia en las políticas de la UE: "Es irrenunciable, es una obligación y un deber público preservar las capacidades de producir alimentos en la Comunitat Valenciana, en España y en la Unión Europea".
También ha mostrado su preocupación por el precio de productos importados de terceros países -"la barrera precio está expulsando de la dieta de muchos consumidores europeos los alimentos producidos en la Unión Europea"- y por "las asimetrías respecto a permitir el uso de determinados plaguicidas en el cultivo de productos que se importan a la UE".
Y el conseller Rovira ha señalado que "vivimos un momento crucial donde la necesidad de abordar los desafíos del cambio climático, la seguridad alimentaria y la gestión sostenible de los recursos naturales es más apremiante que nunca". "La colaboración entre universidades, empresas y administraciones es clave para impulsar la transición hacia una bioeconomía circular robusta y eficaz", ha reivindicado.