VALÈNCIA. La compañía valenciana Depuración de Aguas del Mediterráneo (DAM) ha entrado en concurso de acreedores. Así lo recoge en Registro Mercantil, tal y como avanzaba este martes El Economista, donde el concurso fecha el pasado mes de septiembre. El sindicato CCOO ya denunció el pasado mayo el impago de nóminas y atrasos a las personas trabajadoras de depuradoras y potabilizadoras. Una situación que afectaba a ochenta personas.
Según apunta, el Juzgado Mercantil Número 3 de Valencia aprobó el concurso a finales de septiembre, después de que la empresa solicitase el preconcurso hace unos meses para negociar con sus acreedores. Según señala este medio, la compañía ha despedido a buena parte de la plantilla y tiene deudas que superan los 45 millones.
Fue en 2021 cuando Sociedad Agricultores de la Vega (SAV) rompía las asociaciones mercantiles con la compañía en las uniones temporales de empresas (UTE) constituidas para la explotación de múltiples plantas de depuración de la Comunitat Valenciana, pero también de Murcia y otras comunidades del norte de España, lo que ha derivado en la difícil posición de la compañía.
La histórica empresa valenciana, dedicada a la gestión de residuos y el tratamiento de aguas, tomó la decisión en 2021 de iniciar la disolución de las UTE constituidas en la última década junto con DAM, una de las grandes del sector, para el tratamiento de las aguas residuales en una treintena de puntos.