VALENCIA. La operación Taula se ha destapado como la mayor trama de corrupción de la historia de la Comunitat. Hasta tal punto es así, que el propio Partido Popular se ha visto salpicado por la porquería de los investigados. Amaños de contratos, mordidas, blanqueo, trabajadores zombies, equipos de fútbol financiados con dinero público, prevaricación, cohecho, tráfico de influencias, asociación ilícita y un rosario de delitos más conforman esta mastodóntica causa judicial.
Y una de las preguntas más importantes, y como no, de las que mayor dificultad entrañan en su respuesta para los investigadores es saber a ciencia cierta qué sabía el Partido Popular de la presunta financiación irregular y, sobre todo, quiénes eran las personas que lo sabían y a qué escalón del partido pertenecen.
Los agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) son claros en su exposición de los hechos, no dejan lugar a las dudas cuando afirman en su informe que: «el Partido Popular no sólo tenía constancia de las irregularidades en la contratación pública, sino que presuntamente incluso obtendrían beneficio de ello».
Por el momento, Marcos Benavent y el expresidente de la Diputación de Valencia se perfilan como las principales piezas dentro de este ajedrez, ellos son el rey y la reina del juego. Pero los miembros de la UCO van en busca de las torres y los alfiles, pues los peones ya han caído. Dichos peones son las empresas que pagaban las presuntas mordidas a la trama corrupta. Entre los peones hay uno que destaca, la empresa Cleop.
Para la UCO la empresa Cleop es, sin duda, una de las que presuntamente más dinero ‘donó’ al PP de Alfonso Rus. Los agentes se basan en las grabaciones del exgerente de Imelsa, Marcos Benavent, quien en varias ocasiones habla de ella y de cómo financia al Partido Popular.
Benavent: “Es una empresa que está en el partido financiándonos”
En una de esas grabaciones, se escucha como él y la exconcejal de Cultura de Ayuntamiento de Valencia discuten sobre a qué empresa hay que adjudicarle la obra de las Torres de Quart. En un momento determinado, Benavent le espeta a Alcón “es una empresa que está en el partido financiándonos”.
En otro audio se puede escuchar a los mismos interlocutores hablando otra vez de Cleop. En este caso, lo que dicen sobre la empresa constructora es que “ayuda mucho al partido”. Es más, es una mordida abonada supuestamente por esta empresa la que protagoniza una de las grabaciones más jugosas del sumario: “Yo te he dejado ahí 10.000. He dejado 5.000 para el partido […] y yo me he quedado 5.000”.
La relación de Marcos Benavent y Alfonso Rus con Cleop viene desde que ambos formaban parte del Ayuntamiento de Xàtiva, el primero como concejal y el segundo como alcalde. Según un informe de la UCO, esta constructora fue la encargada de construir un centro geriátrico en dicha ciudad y es desde ahí según afirman fuentes de toda solvencia que comenzó la relación de la trama corrupta con dicha empresa.
Era una de las favoritas de Marcos Benavent, trabajó con ella en Xàtiva y continuó su presunta relación de contratos a dedo y mordidas durante años. De hecho, y según ha podido saber Valencia Plaza, supuestamente hay varios contratos de esta empresa con la trama corrupta que están siendo investigados con lupa por la UCO. Dichos contratos están dentro de la pieza principal, y por eso todavía no han salido a la luz.