Montiel ya tiene oposición interna en Podemos

VALENCIA. Desde meses atrás, tal y como publicó este diario, se ha ido informando de la brecha abierta en el grupo parlamentario de Ciudadanos, donde existe una separación más o menos clara entre dos bloques. No es el único caso en el que se comienzan a producir diferencias de criterio entre miembros del mismo partido: la otra fuerza emergente, Podemos, también ha comenzado a separarse a raíz de las últimas decisiones adoptadas por el secretario general autonómico y síndic parlamentario, Antonio Montiel.

Así, de un tiempo a esta parte, ha comenzado a articularse un grupo con fuerte predicamento entre las bases que se muestra favorable a redefinir el proyecto político en un Vistalegre valenciano -en referencia a la primera gran asamblea estatal de Podemos- a celebrar a corto o medio plazo. Es decir, en lenguaje de otros partidos, un congreso en que se configure una nueva etapa de la formación morada en la Comunitat con, según las fuentes consultadas, unas líneas maestras políticas "claras", una "revisión" a las formas de participación y democracia interna y, cómo no, un debate sobre los liderazgos.

Una propuesta que ya fue lanzada sobre la mesa en la última reunión del Consejo Ciudadano Valenciano celebrada en julio, precisamente en el encuentro en el que Montiel aprovechó para anunciar cambios en la dirección podemita. Todo ello tras la polémica abierta por la destitución -transmitida por error antes de tiempo- de la entonces secretaria de Organización, Sandra Mínguez, una de las caras visibles del partido desde su fundación. Hasta el momento, tal y como ocurrió en ese encuentro, Montiel y su entorno han preferido enfriar esas propuestas sobre una Asamblea Ciudadana Valenciana.

No obstante, la rueda ya ha comenzado a girar y detenerla será una ardua tarea. El próximo 3 de septiembre se ha convocado un encuentro por la militancia en Torrent en una línea similar a la expuesta por los favorables al llamado Vistalegre valenciano, si bien los dirigentes con visibilidad que apoyan esta vía aseguran no ser los artífices de esta iniciativa aunque compartan el espíritu de "reunirse y debatir".

En este sentido, dentro del propio grupo parlamentario autonómico se distinguen varios diputados favorables a acometer el citado Vistalegre valenciano. Así, la propia Sandra Mínguez, César Jiménez, Antonio Estañ, Cristina Cabedo y Daniel Geffner respaldan esta posibilidad, cinco parlamentarios de los 12 que tiene el grupo. A ellos hay que sumarles otros jóvenes referentes del partido, como el actual senador Ferran Martínez.

Bien es cierto que la situación actual es complicada. Todavía no se ha resuelto el acuerdo de investidura en Madrid y, aunque Mariano Rajoy cada vez parece más cerca de lograr los votos necesarios, no es ni mucho menos descartable que todavía queden muchas partidas que jugar en el Congreso hasta que se cierre un pacto definitivo que disponga de la mayoría requerida. Con este escenario, habrá que esperar a la resolución de la gran cuestión nacional para ver si Podemos acomete una Asamblea Ciudadana Estatal (por estatutos podría esperar hasta otoño de 2017), algo que frenaría un proceso netamente valenciano. 

Ahora bien, fuentes del citado sector consultadas por este diario apuntan a que si una vez resuelto el debate en España la dirección estatal de Podemos no fija la asamblea en el calendario, desde la Comunitat Valenciana podría plantearse la búsqueda de iniciar el proceso autonómico "si se respira el ambiente idóneo". Llegan curvas para Montiel y su equipo de confianza.