VALÈNCIA. (VP) El presidente de la gestora del PP en València ciudad, Luis Santamaria, ha emprendido este sábado una campaña contra el alcalde de la capital del Túria, Joan Ribó, bajo el lema "No hay derecho, Ribó" (#NohayderechoRibó). Según Santamaría, "el alcalde ha abandonado a Valencia y la ha sumido en la degradación" y "los problemas de “suciedad o incremento de la inseguridad ciudadana son intolerables".
Es uno de los movimientos que, según avanzaba este mismo diario, el presidente de la gestora del PP de València va a ejecutar en los próximos meses, después de tres años recuperando el músculo de la formación. Así, ante la falta de un líder elegido por la dirección nacional de Pablo Casado y la dirección regional de Isabel Bonig, Santamaria coge carrerilla y parece decidido a ocupar un espacio en el ámbito municipal protegido por el propio cargo que ostenta. Unos movimientos que sus rivales y detractores miran de reojo, dado que podrían suponer un factor clave en la elección final del cabeza de lista en 2019.
La iniciativa pretende desvelar los principales puntos de conflictividad de València que se han detectado durante este mandato. Santamaría ha empezado en Ciutat Vella a desvelar distintos puntos del programa. Precisamente en dicho distrito, el popular ha resaltado que "hay cada vez más problemas vinculados el tráfico de drogas y el ayuntamiento mira hacia otro lado dejando desamparados a los vecinos”. También ha manifestado su preocupación por “el aumento de la prostitución o el número creciente de personas en riesgo de pobreza que ha derivado en la presencia continua de personas sin techo y otros casos de marginalidad que ocupan los parques y jardines de diferentes zonas de este distrito”.
Por otro lado, el presidente de la gestora ha denunciado "la ocupación ilegal de viviendas" ante la "falta de actuación" del consistorio. En ese sentido, se ha comprometido a que "todos estos espacios ciudadanos estén limpios de jeringuillas, drogas y peleas y se conviertan en centros de reunión, de ocio y seguros". La degradación de Ciutat Vella, ha dicho, es también "muy elevada" en materia de limpieza e higiene. “
Santamaría ha manifestado la promesa del Partido Popular para "recuperar la convivencia, la limpieza, la seguridad, la fluidez del tráfico rodado que ahora mismo es un caos" y la mejora de los servicios sociales "a las personas que están en riesgo de marginalidad, el 30% de las familias: unas 211.000 personas de las que Ribó se ha olvidado por completo".
Luis Santamaría ha garantizado que el PP “aumentará la presencia de policías de proximidad porque hacen falta 190 policías para llegar a la ratio por habitante que se encontró Ribó cuando llegó al Ayuntamiento". Y por último, ha defendido que el centro que se está construyendo en Guillem de Castro 38 “sirva para atender algunas de las demandas vecinales justificadas porque en el barrio no hay hogar del jubilado, ni escoletas, ni atención geriátrica, pediátrica o instalaciones deportivas”.
