Podem València se hace mayor y lanza sus primeras juventudes

VALÈNCIA. Podemos saltó a la fama en 2014, hace tan solo cuatro años. Se podría decir que se trata de una formación política joven, especialmente si se habla de Podemos a nivel local. Si bien la edad media de sus representantes es menor a la de otros partidos políticos, lo cierto es que adolece de una falta de organizaciones juveniles. Es una tarea en la que se ha estado trabajando durante los últimos años en distintas plazas de España, pero que presenta una gran atomización. En València, hasta el momento, no se había conocido ninguna. Pero la formación que ahora lidera Jaime Paulino se ha puesto manos a la obra para crear en el sí de Podem València un área que aglutine a las juventudes.

Aunque no se trata de una organización con entidad propia -no se tiene previsto aún ningún nombre especial-, sí que pretende ser el germen de una agrupación como las que tienen otros partidos. El Partido Popular cuenta con las Nuevas Generaciones; el PSPV tiene a Joves Socialistes; y Compromís cuenta con Joves PV, del Bloc, y con Joves amb Iniciativa, de Iniciativa.

Ahora bien, según fuentes de los morados, la intención no es convertir esta nueva plataforma en una "cantera de políticos" ni en un "espacio de reclusión de los jóvenes", sino que se quieren construir muchos vasos comunicantes entre el partido y las juventudes.

Tras revalidar Jaime Paulino su cargo de secretario general del partido en València ciudad la pasada primavera, se conformó el nuevo consejo ciudadano municipal. En él, se pretendió poner en marcha el proyecto de las juventudes postergado durante los últimos años y se creó esta área de Juventud, a cargo de Ignacio Lezica.

A partir de entonces se han llevado a cabo tres reuniones de la plataforma y se realizan actividades como encuentros y debates políticos con sede en La Morada, el espacio de Podemos en València. Aún así, cabe resaltar que todavía cuenta con una veintena de jóvenes inscritos.

A nivel estatal, el partido de Pablo Iglesias está acometiendo  en los últimos meses una profunda reestructuración de las organizaciones juveniles que han surgido en torno a la formación para homogeneizarlas -en el nombre, por ejemplo- y coordinarlas. Está por ver cómo se consolida el proyecto en València y qué encaje tiene en el proceso estatal.