VALÈNCIA (VP/EP). El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado este jueves que ha pedido una entrevista urgente con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tras la presentación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2017 y ha advertido que las cuentas crean una "profunda desafección" en la Comunitat ante el Gobierno, un proceso "muy negativo". Además, la Generalitat impulsará "todas las medidas posibles", con el mayor consenso, para mejorar las cuentas.
Así se ha pronunciado Puig tras reunirse con la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, y con el secretario autonómico de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, Josep Vicent Boira, para analizar los presupuestos.
La Generalitat, que no descarta "ningún tipo de acción democrática" para defender una mayor inversión estatal en la Comunitat aunque no intentará "inventar ningún tipo de conflicto artificial", calcula en 600 millones de euros las inversiones para la Comunitat que deberían introducirse en los presupuestos vía enmiendas para que la región se situara en la media nacional.
Les Corts han aprobado una declaración institucional con la firma de todos los grupos, incluido el PP, contra la "marginación" de los Presupuestos, mientras el PPCV ha anunciado que los enmendará.
Esta situación es "absolutamente insoportable para la economía y los ciudadanos valencianos" y tiene como consecuencia una renta per cápita un 11% inferior a la media y "salarios por debajo de la media", algo que la Comunitat "no se merece" y "no se corresponde con el esfuerzo de los trabajadores valencianos".
Por ello, ha anunciado que hablará con todos los grupos parlamentarios y pedirá a todos los diputados valencianos que "cumplan con lo que les exige el pueblo valenciano" y trabajen para que la Comunitat "tenga el tratamiento que merece por parte del Gobierno".
"Pediré a los diputados coherencia con lo que se dice, ¿a quién le puede parecer normal que a su comunidad se la maltrate? No es lamento o victimismo, el problema valenciano existe" tanto en la financiación como en la deuda histórica, que también abarca a las infraestructuras, ha proseguido.
A su juicio, las cuentas presentadas justifican "un no con más fuerza que nunca" y él, como presidente, exigirá "lo mismo al PSOE que al PP, Compromís, Ciudadanos o Podemos, que sean coherentes con las necesidades del pueblo valenciano".
Según ha remarcado, "esto no puede continuar así, los diputados tienen que defender el interés de la gente" aunque el Consell no va a entrometerse en la decisión de qué infraestructuras concretas deberían introducirse mediante enmiendas, sino que "cada uno actuará en función de sus criterios".
Ha destacado, no obstante, dos cuestiones concretas como el Corredor Mediterráneo, que "no es un capricho, no es alguien que quiera llevar a su pueblo el AVE" y la ausencia de financiación para el transporte metropolitano de València, que ha calificado como "un insulto a la inteligencia".
La consellera Salvador, por su parte, ha remarcado que los PGE de 2017 suponen "una involución, un retroceso" a "los peores años de la crisis, en 2013 y 2014" ya que mientras la Comunitat recibió para infraestructuras 521,9 millones en 2013 y 539,6 en 2014, este año se prevén 509 millones.
También ha realizado una comparativa de los presupuestos de Fomento de los Gobiernos de Rajoy (2012-17), que destinan una inversión media del 7,6% a la Comunitat, con 627 millones de euros al año, y los de la época de José Luis Rodríguez Zapatero (2005-11), con una media de inversión del 8,2% y 1.292 millones anuales, "el doble", ha detallado.
En el marco de la agenda valenciana de infraestructuras prioritarias, se ha preguntado "cuál es la prioridad" del Gobierno en materia ferroviaria cuando los PGE recogen una partida de 189 millones de euros para el Corredor Mediterráneo en la Comunitat Valenciana (58,6 millones para el tramo Castellón-Vandellós, 55 para Valencia-La Encina y 77 para Monforte del Cid-Murcia) cuando debería contar con una partida de 614 millones.
Ante las justificaciones por las limitaciones presupuestarias, ha puesto como ejemplo que para el Corredor Norte/Noroeste se consignan 728 y para el corredor entre Madrid y la frontera portuguesa 189 millones y si se suman las cantidades del eje central que pasando por Madrid se dirigen al noreste y al noroeste la cifra es de 1.364 millones. Asimismo, la línea Sagunto-Teruel-Zaragoza recibe 8 millones, "nueve veces menos que lo destinado a la conexión Chamartín-Atocha".
Sobre el servicio de Cercanías, Salvador ha señalado que serían necesarios más de 3.000 millones para adecuar y ampliar la red pero se han presupuestado 300.000 euros para estudios en Alicante, 100.000 para València y 9 millones para actuaciones diversas.
También ha cuestionado que no exista una partida para el transporte metropolitano de València pese a haber creado la Autoridad Metropolitana del Transporte mientras Madrid recibe 126 millones y Barcelona 108. Ha lamentado, además, que no haya dinero para finalizar la T2 de Metrovalencia mientras sí hay partidas para Sevilla o Málaga.
En el área de carreteras, ha explicado, la inversión cae un 12% este año y existe una "constante repetición de las actuaciones año tras año, presupuesto tras presupuesto, sin que nunca se lleguen a licitar o ejecutar". En estos PGE aparecen obras que llevan "años en ejecución", más de 10 en el caso de la A-3 en la Font de la Figuera y otras anualidades son para actuaciones que se licitaron en 2016 pero que no han comenzado, como la N-232 en el Port de Querol o la N-332 en la variante de Benissa.
La magistrada apunta a irregularidades administrativas y al desequilibrio en la distribución del dinero, pero no aprecia ilícito penal