VALENCIA. El pasado viernes, el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, aseguraba que había obtenido el sí de algunos de sus homólogos en otras autonomías, entre ellos, Ximo Puig, al "cónclave" de comunidades que el regionalista desea liderar contra la política y exigencias del Ministerio de Hacienda. No obstante, en una rueda de prensa ofrecida este lunes por el president de la Generalitat tras la reunión mantenida con el secretario autonómico de la Agencia Valenciana de Turismo, Francesc Colomer, aseguró que esta era una cuestión que él ya había planteado hacía tiempo.
Ya en abril Puig reivindicó que se celebrase una conferencia de presidentes para fijar con el Gobierno en funciones la senda de ajuste que había que negociar con Europa, es decir, cómo abordar las exigencias de la UE respecto al déficit. Durante ese mes, fue una de las ideas sobre las que ahondó el presidente valenciano. Trató de formar un frente con otras autonomías como la de Andalucía o Cataluña para aumentar la presión sobre el Gobierno central tras conocerse que el ministerio de Hacienda había convocado una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) después de la "tormenta" que generaron las cartas enviadas a 12 comunidades autónomas para realizar ajustes al conocerse las respectivas desviaciones de déficit .
Y precisamente sobre esto gira la iniciativa que Revilla anunció en una entrevista en RNE. Ahora es el presidente cántabro quien quiere encabezar un "cónclave" de presidentes autonómicos para caminar contra las exigencias del Ministerio que dirige en funciones Cristóbal Montoro. En esta ocasión, Revilla se quejó del reparto del déficit entre el Estado y las comunidades autónomas y criticó que Hacienda se dirigiera por carta a su comunidad para advertirle de los "incumplimientos" en relación al objetivo de déficit y también sobre la marcha de los ingresos y gastos de la comunidad en relación a lo previsto.
Respecto a esta iniciativa con la que el president de la Generalitat se muestra favorable y que ya en su día trató de encabezar, aseguró que sería "necesario que hubiera una relación multilateral entre las comunidades autónomas" ya que sería "positivo para tratar algunas cuestiones que nos afectan a todos" de manera que se pudieran sumar "experiencias y desarrollar más políticas comunes".
Como también planteó ya en abril, Puig manifestó que España "tiene que ir hacia un proceso federal en el que haya por una parte una delimitación de competencias y se conceptúe como corresponde, la pluralidad de España". En su momento, el president de la Generalitat puso sobre la mesa que el actual Estado autonómico estaba "agotado" y era "urgente" su reformulación para garantizar la igualdad entre los ciudadanos y la singularidad territorial.
El jefe del Consell también señaló este lunes que para él "cualquier iniciativa" como la propuesta "va a contar siempre con la Comunitat Valenciana".
Es especialmente llamativo que una iniciativa como esta la encabece una comunidad autónoma como la de Cantabria, que tiene un déficit de -1,38 y es una de las mejor paradas con el actual sistema de financiación, mientras en la Comunidad Valenciana la diferencia entre los ingresos y los gastos alcanza el -2,51% del PIB al ser una de las regiones más perjudicadas por el sistema.
Así, la Comunitat es la tercera en la lista con el déficit más abultado, concretamente de 2.548 millones de euros, sólo por debajo de Cataluña (5.532) y Madrid (2.774), mientras Cantabria ocupa un lugar holgado en la lista, el segundo puesto de las comunidades con menor déficit (168 millones) sólo por debajo de La Rioja.
Según Puig, la Comunitat Valenciana ha gastado siempre por debajo de la media de las comunidades autónomas y, sin embargo, tiene uno de los déficit "más abultado", lo que demuestra que las desviaciones vienen "por la vía del ingreso y, no, del gasto", aseguraba en la defensa de su propuesta de conferencia de presidentes.