Puig y Bonig coquetean con la financiación como telón de fondo

VALENCIA. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y la líder regional del PPCV, Isabel Bonig, dieron este lunes un paso común por el entendimiento. La cuestión que unió a socialistas y populares no es nueva: la reforma del sistema de financiación, pero sí se observaron ciertos matices en una situación que resultó diferente a su primer encuentro sobre este asunto meses atrás.

La jornada comenzó con una rueda de prensa de Bonig en la sede del partido tras haberse reunido con los parlamentarios valencianos en el Congreso y Senado. Después de la cita, la presidenta regional aseguró haber solicitado a Puig un encuentro en el Palau para abordar distintos asuntos al margen de la financiación. De esta manera, la líder popular dejaba claro que no tenía intención de que sus compañeros acudieran al acto convocado por Puig como meros figurantes a un encuentro que calificó de "estrategia" del jefe del Consell para "tratar de ganar visibilidad" frente a la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, referente de Compromís y socia de gobierno.

Puig recogió el guante. El jefe del Consell no puso objeción a recibir a la líder de la oposición en el Palau por la tarde, deseoso de contar este martes con un 'pleno' de todos los partidos en su cita convocada para reivindicar la reforma del sistema de financiación. 

Así, el encuentro entre ambos líderes se produjo a las cinco y media de la tarde en el Palau, una reunión que se prolongó durante más de una hora y que obligó a ciertos retrasos en la agenda del presidente, quien tuvo que hacer esperar nada más y nada menos que al exministro Miguel Ángel Moratinos.

A la salida de la reunión, Bonig se mostró "satisfecha" por una cita que calificó de "muy cordial" y confirmó que este martes una delegación de diputados y senadores del PPCV acudirían a la jornada sobre la financiación organizada por Puig. La líder popular aseguró haber tendido además la mano al jefe del Consell para llegar a acuerdos en materias como infraestructuras, agua y empleo. En esto último, destacó que el presidente había mostrado interés en alcanzar en el futuro algún tipo de pacto global.

Bonig aprovechó también para reiterar su oferta al líder socialista sobre una gran coalición PP-PSOE para que, según sus palabras, no se sienta "maniatado" por su actual acuerdo con Compromís y Podemos.

En cuanto al Consell, compareció brevemente el jefe de Gabinete, Arcadi España, para coincidir en la "cordialidad" del encuentro y celebrar la posibilidad de llegar a acuerdos por los valencianos "más allá del partidismo". En esta línea, valoró que se hubiera producido una reunión de estas características con la líder de la oposición.

Un encuentro que, implicó para ambos dirigentes un win-win. Para Puig, porque consigue aunar a todas las fuerzas políticas este martes para reivindicar una financiación justa para la Comunitat Valenciana y, además, desliza que también puede llegar a acuerdos con el PP. Una circunstancia que, a medio plazo, no deja de ser interesante en una legislatura que se augura convulsa y complicada por la propia peculiaridad del acuerdo que sustenta al Consell.

Para el PPCV, también fue positivo: dio a Bonig visibilidad y la oportunidad de empezar a cambiar la tendencia de aislamiento de su formación, con la que nadie ha querido llegar a acuerdos en los últimos tiempos. Además, permitió a la presidenta popular volver a tender la mano para ofrecerse como alternativa a Compromís.