Alfonso Zamorano. Foto: EVA MÁÑEZVALÈNCIA. Grupo Aza Valencia redujo de forma significativa su beneficio un 80% hasta los 3,38 millones de euros en 2019, primer ejercicio tras la venta de las empresas de transporte Alfonso Zamorano y Martí Serra a la compañía DHL Parcel Iberia. Y es que este negocio de transportes era uno de los más importantes del grupo empresarial presidido por el empresario Alfonso Zamorano. La operación dio a la compañía unos ingresos de 20,1 millones de euros en 2018, entre plusvalías y dividendos.
No obstante, el grupo consiguió el pasado año, a cierre de agosto de 2019, una facturación de 23,6 millones, una cifra superior a los 14,3 millones conseguidos en el ejercicio precedente, según consta en sus cuentas anuales, con fecha de agosto, depositadas en el Registro Mercantil.
Tras la venta de su división de transportes, la firma AZA Valencia Inmuebles es la que que supone el mayor peso por cifra de negocio para el conjunto de la compañía con unos ingresos de 9 millones, el doble que en 2018, ingresó 4,5 millones de euros y unos beneficios extraordinarios de 366.717 euros debido a la venta de dos locales comerciales en la Galería Juan de Austria.
La principal inversión de este ejercicio fue la adquisición de un solar en Sagunto de 25.378 metros cuadrados, cuya finalidad es la construcción de una nave logística que será arrendada a Aza Logistics. Al cierre del ejercicio la sociedad ya cuenta con licencia de construcción del Ayuntamiento de Sagunto, y con varias ofertas para financiar los costes de este proyecto. La previsión es que el proyecto esté finalizado y comience a producir ingresos en el primer semestre de 2021. Por otro lado, también adquirió varios inmuebles de menor entidad con el fin de rentabilizarlos a través de su alquiler.
Otra de las firmas es Parking AZA que alcanzó unas ventas de 3,2 millones de euros en este pasado ejercicio de ocho meses y unos beneficios antes de impuestos de 180.664,75 euros. Unos buenos números que la compañía achacan al "efecto Primark, que abrió sus puertas a mediados de junio de 2018, y las aperturas de los comercios y locales de restauración cercanos". "Y todo ello a pesar del efecto negativo provocado por el cambio de sentido de la Calle Cirilo Amorós, y los cambios en la Calle Ruzafa que actualmente ya sólo cuenta con un carril para coches, y se ha dificultado el acceso a la misma desde la Gran Vía Germanías", puntualizan.
Por su parte, en Náutica AZA las ventas en este ejercicio se han situado en 3,8 millones de euros. La empresa sigue apostando fuertemente por marcas como Jeanneau, Fairline, Wellcraft, SeaRay, Zodiac, y Yamaha principalmente. La compañía asegura en su informe de gestión que "el fuerte incremento de ventas ha llevado a la sociedad a tener que renegociar los términos dela financiación que le ofrece Jeanneau a través de SGB Finance, ampliando los límites de deuda viva".
Su rama logística (AZA Logistics) logró una cifra de negocios de 6,2 millones de euros y un beneficio antes de impuestos de 175.153 euros. En estos resultados ha tenido un impacto significativo (-225.450 euros) las pérdidas de la sociedad Palibex Valencia, de la cual poseía el 100% de las participaciones sociales al cierre del ejercicio, por lo que el resultado sin contar el deterioro registrado habría sido de 400.603 euros.
No obstante, para el próximo ejercicio se prevé mejoras en cifra de negocios y resultados como consecuencia del contrato firmado con la empresa de productos químicos SPB para gestionar su operativa logística desde una nueva nave ubicada en Cheste.
Por otro lado, en diciembre de 2018 Grupo Aza adquiría el 5% de la compañía Palibex Logística, sociedad franquiciadora de la marca PBX - Palibex que es explotada actualmente por la compañía en las provincias de Valencia y Castellón. Para el próximo ejercicio, AZA se ha hecho con la concesión de una franquicia para la provincia de Madrid. De este modo el Grupo reforzará su posición en el sector del transporte, en un nicho de mercado en crecimiento, y con una marca de primer orden en el ámbito nacional.
