SANTIAGO DE COMPOSTELA, (EP). El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, considera que el presidente del Gobierno en funciones y líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, "no tiene autoridad" y "ha perdido una oportunidad de oro" para "enmendar absolutamente" lo que ha hecho en los últimos años por no pedirle a la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá que renuncie a su escaño.
En concreto, el líder de la formación naranja se ha pronunciado de este modo en Santiago de Compostela después de que Rajoy asegurara este viernes que Rita Barberá "ya no es militante del Partido Popular" y recalcara que él, como presidente del PP, no tiene "ninguna autoridad" para pedirle que renuncie a su escaño en el Senado.
En un acto celebrado en la compostelana Praza de Praterías, el líder de la formación naranja ha explicado que si su partido no quiere entrar en el Gobierno es por casos como los de Rita Barberá. "Yo no quiero defender a Rita Barberá como están haciendo el señor Rajoy y la señora Cospedal", ha remarcado ante los aplausos de los militantes y simpatizantes, cuatro días después de que se conociera la decisión del Tribunal Supremo de abrir causa contra Barberá por un presunto delito de blanqueo de capitales en el PP del Ayuntamiento de Valencia, en el marco de la Operación Taula derivada del 'caso Imelsa'.
En este sentido, ha indicado que, tras conocerse la causa penal abierta a Rita Barberá, Rajoy tenía dos opciones: "O salir a dar la cara y decirle a Barberá que devuelva el escaño, que es de los votantes de su partido y de los votantes de las Cortes valencianas; o callarse y decir que no tiene autoridad, que es lo que ha hecho".
A este respecto, Rivera ha asegurado estar "muy de acuerdo" con el líder del Partido Popular. "No tiene autoridad, la ha perdido toda haciendo lo que ha hecho", ha denunciado, justo después de lamentar que la exalcaldesa de Valencia se vaya a "quedar con el escaño y con el suelto de todos los españoles".
Y es que, a juicio del presidente de Ciudadanos, Rajoy podía demostrar que su partido había entendido que había perdido la mayoría absoluta, que había negociado un pacto anticorrupción y que había comprendido que sus votantes "se avergüenzan" de que Barberá "se quede con el escaño de todos los españoles".
En cambio, ha lamentado que haya "amparado la corrupción", "mirado hacia otro lado" y "desaparecido del mapa durante tres días". "Es lo que ha hecho", ha apostillado al respecto.