Pocas veces en su vida ha dejado de llevar a su hija al colegio. Pocas veces ha dejado de acompañar a sus hijas al médico. Pocas veces se ha perdido horas de parque. Pocas veces no ha podido compartir con su mujer determinados momentos. Pocas veces ha dejado de estar con su familia cuando quería estar. Pocas veces se ha arrepentido de la decisión que tomó en su día: apostar por el teletrabajo