València prepara el concurso de las concesiones deportivas: valorará el "arraigo" y la cogestión 

VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València empieza a poner orden en las instalaciones deportivas gestionadas por clubes mediante convenios suscritos desde la Fundación Deportiva Municipal. Buena parte de ellos han ido caducando pero el cambio en la normativa impedía al consistorio suscribir nuevos convenios y le obliga a sacar a concurso la gestión de estos recintos. Un proceso que el organismo que preside el edil Javier Mateo ya ha iniciado.

Ahora mismo, unas cuarenta instalaciones deportivas de la ciudad de València llevan, al menos desde 2018, con las concesiones de gestión indirecta indebidamente prorrogadas. Se trata, en este caso, de cuatro polideportivos municipales y otros tantos campos de especialidades deportivas como fútbol, rugby y demás.

Este jueves, el gerente de la entidad, Borja Santamaría, se reunió con los representantes de los distintos clubes y entidades que actualmente gestionan las diversas instalaciones para trasladarles la hoja de ruta, según la cual se creará un equipo con cinco representantes de los clubes y dos técnicos para "perfilar las bases" que regirán las convocatorias de los concursos públicos, que pretenden alumbrarse "antes de que acabe el año".

Lo que está claro es que las concesiones demaniales a adjudicar tendrán una vigencia de cuatro años prorrogables. Y sólo falta saber qué requisitos se fijarán en las bases para resultar adjudicatario y cuáles serán los criterios que valorará la Fundación Deportiva Municipal para escoger a los futuros gestores de las instalaciones deportivas.

Según explicaron fuentes internas de la Fundación, la intención es que el proceso valore positivamente el "arraigo" de los clubes. Un criterio que, sin saber todavía cómo se plasmará en el papel, busca mantener el ligazón de los actuales gestores con las instalaciones en los diferentes barrios de la ciudad. Y aunque podría ser un factor excluyente para con otros gestores que puedan aspirar a la adjudicación de las concesiones, en el organismo público señalan que se intentará que no sea un criterio "disruptivo" en el proceso.

Los adjudicatarios tendrán que abonar un canon fijo a la Fundación. Una condición que se fijará en las bases pero cuya cuantía todavía no está especificada. No obstante, según explican en el organismo, se establecerá que las inversiones que realicen los gestores se descontarán del pago de dicho canon. "De esta manera, incentivamos que las instalaciones se vayan renovando progresivamente", aseguran las mencionadas fuentes, quienes indican que se está siguiendo el modelo de otras ciudades como Málaga o Zaragoza.

La auditoría pidió agilizar el proceso

Hay que recordar que la auditoría de la Fundación Deportiva Municipal pidió agilizar el proceso en su informe de 2020. "Es importante que se finalice la definición del nuevo modelo de gestión, dado que muchos de los convenios que se firmaron en su momento están finalizados y/o sin prórrogas autorizadas. Esta definición deberá analizar, asimismo, si es el convenio el instrumento jurídico adecuado para regular la relación existente con clubes y entidades sociales de índole deportiva sin ánimo de lucro", señaló, para indicar la necesidad de poner fin a la indefinición de las prórrogas y aprobar de una vez por todas el nuevo modelo de gestión de las canchas y campos. 

En este sentido animaba, por un lado, a acelerar los trámites para poder normalizar la situación cuanto antes y, por el otro, a determinar si el modelo que se estaba siguiendo hasta ahora el adecuado o si, por el contrario, se debería alumbrar un nuevo procedimiento en las relaciones con los pequeños clubs y asociaciones. Así pues, el proceso de transformación de los convenios en concesiones ya se ha iniciado.