VALÈNCIA. El 2007 ha acabado por convertirse en el año central de las sospechas sobre cómo se financiaron las campañas electorales de los dos principales partidos en la Comunitat Valenciana: PSPV y PP. Las investigaciones judiciales de Azud –la más reciente– y Taula –cuya instrucción ya está finalizada– han contenido piezas separadas sobre un presunto 'dopaje' de estas formaciones. Los indicios se extendieron hace unos años al Bloc (partido mayoritario dentro de Compromís) en otra causa judicial, que finalmente no pudo seguir adelante por esta vía debido a que el posible delito electoral se encontraba prescrito.
En Azud, los investigadores apuntan a que los socialistas sufragaron en B gastos de tres campañas diferentes: la de las municipales de València de 2007 con Carmen Alborch como cabeza de lista; la de las autonómicas de ese mismo año con Joan Ignasi Pla como candidato; y la de las generales de 2008 a las que se presentó la por entonces vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, como 'número 1' por la circunscripción de Valencia.