Entrevista

Comarca y empresa

UN AÑO DESPUÉS DE LA DANA

Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar: "Después de la Dana esperábamos más de las administraciones"

365 días después de la barrancada que asoló este municipio de la 'zona cero', su alcalde hace balance de la situación en que se encuentra Alfafar y reflexiona sobre la politización de la reconstrucción

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar.
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VALÈNCIA. Alfafar avanza a paso lento tras la Dana que hace un año golpeó con fuerza a esta población de la llamada ‘zona cero’. Todo el término municipal se vio afectado: el casco antiguo, la zona comercial y la huerta y marjal que conectan con l’Albufera. Pero el golpe más duro lo sufrió un barrio: Orba, también conocido como Parque Alcosa.

El alcalde de Alfafar, Juan Ramón Adsuara, apareció entonces en antena denunciando el abandono que sufrían tanto él como sus vecinos tras la barrancada que dejó al municipio “en un escenario de guerra”, y donde, cuatro días después de la catástrofe, “aún había personas muertas dentro de las casas”.

Un año después de aquella trágica noche, Adsuara abre las puertas del Ayuntamiento de Alfafar a Valencia Plaza para hablar del estado actual del municipio y reflexionar sobre la 'falta de empatía' por parte de las instituciones. Además habla de la politización de la reconstrucción y asegura que no asistió al Funeral de Estado de este 29 de octubre porque así lo han preferido también los familiares de la víctimas de Alfafar.

-¿En qué estado se encuentra Alfafar un año después de la Dana?

-En términos cuantitativos, llevamos ejecutado alrededor del 30% de lo que será toda la reconstrucción. De los 97 millones presupuestados para ello, tenemos aproximadamente un 30% ya en marcha. Si hablamos desde el punto de vista cualitativo, es decir, de la calidad de vida de las personas, seguimos todavía muy afectados. En estos días, al cumplirse el primer año, volvemos a recordar todo lo que sufrimos y se hace más duro, pero seguimos trabajando, buscando medidas, ayudas y apoyos para todos los que fuimos víctimas.

-¿Y qué le queda a Alfafar por delante? ¿Cuántos años podríamos decir que durará la reconstrucción?

-Como estamos en un proceso de contratación —un proceso que los ayuntamientos utilizamos en situaciones normales, no en una reconstrucción o en una emergencia— estimamos que a finales de 2028 o principios de 2029 podremos rematar todo el trabajo. Siempre que no haya ningún problema con los procesos de contratación, podría alargarse unos tres años.

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar. -

-En la administración local todo esto se complica bastante. Por ejemplo, Paqui Bartual, presidenta de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, pedía eliminar la regla de gasto y otras restricciones para facilitar la contratación de personal y agilizar los trámites.

-Exactamente. Pedimos que se elimine la regla de gasto y que se nos permita utilizar los superávits municipales en la mejora del día a día de la reconstrucción. También pedimos que se reactive el estado de emergencia para poder trabajar con más flexibilidad. Esto es lo que están reclamando el presidente de la Diputación –Vicent Mompó– la presidenta de la FVMP –Paqui Bartual– y los 103 ayuntamientos afectados. Estamos saliendo de una emergencia, pero con leyes ordinarias, con leyes pensadas para el día a día. Y con esas leyes no se puede reconstruir una catástrofe. Si seguimos así, los plazos se dilatarán tres, cuatro o cinco años más.

-Entonces, cuando usted habla de volver a la situación de emergencia, ¿se refiere a poder hacer contrataciones de emergencia?

-Si seguimos en una situación de catástrofe, ¿por qué no podemos contratar por emergencia? No tiene sentido que, después de todo lo que hemos pasado, nos obliguen a usar los mismos procedimientos que en una situación normal: la regla de gasto, las limitaciones para aumentar personal, los procesos de licitación pública… Todo eso nos mete en un laberinto desesperante. Los vecinos lo perciben y lo sienten como un maltrato. Por ejemplo, un parque afectado puede tardar tres años en reabrir mientras se cumplen todos los trámites. Si tenemos veinte parques en esa situación, estaremos años sin parques.

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar. -

-Usted los primeros días tras la riada decía sentirse abandonado. Esto ya no es una situación que haya podido vivir usted como alcalde, sino que también lo han sufrido muchos ciudadanos. ¿Se ha sentido poco respaldado por las administraciones?

-Esperábamos más de las administraciones. Creíamos que por lo menos en este primer año íbamos a tener más medios, con más herramientas, con más personal, con más dotaciones de cualquier empresa que hiciera los trabajos por ejemplo de recogida de residuos, de enseres de la vía pública, de tratamiento de coches, al final los hemos hecho nosotros, la administración local, con nuestros medios. Esperábamos más, sí.

-¿No han estado las instituciones la Generalitat o el Gobierno a la altura?

-No soy quién para juzgarlo, pero la verdad es que el esfuerzo creo que lo están haciendo los ayuntamientos.

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar. -

-¿Cómo valora usted la gestión de la Generalitat Valenciana del 29 de octubre?

-Lo tiene que valorar el Poder Judicial. Si algo no ha ido bien, lo valorará el Poder Judicial.

-¿Y la del Gobierno de España?

-En este caso el Poder Judicial no creo que lo valore, pero ha sido una gestión muy lenta. Lenta a la hora de desplegar la UME, a la hora de gestionar los fondos europeos que ha recibido, que son los que nos van a hacer salir hacia adelante, invertir en esta reconstrucción. Por lo tanto, no es que el Estado haya puesto ayudas, no. Las ayudas son fondos europeos. Entonces, lo que veo por parte del Gobierno de España es que va lento. 

-Vamos a desgranar un poco el 29 de octubre. ¿Usted recibió como alcalde algún tipo de comunicación o algún aviso? 

-Las cartas del 112 de las alertas rojas. A las seis de la tarde ya perdimos la comunicación, y no se hablaba en ningún momento de riada. Nosotros sí que tomamos las decisiones por la mañana, a las 12 de la mañana, porque contábamos con la alerta roja desde las 10 de la mañana de nuestra estación meteorológica.

-¿Avisó usted a alguien cuando empezó a pasar todo? 

-No, nosotros llevábamos desde las 5 de la tarde desplegando las brigadas porque hacía muchísimo aire, habíamos tenido caída de árboles y no avisamos porque nosotros lo vivimos como un ciudadano más. Estábamos en la calle, teníamos policías regulando tráfico, cortando calles por la caída de ramas y árboles. Y en ese momento, en plena labor, descubrimos que venía el agua, pero lo descubrimos por redes sociales. No nos dio tiempo a avisar a nadie.

-¿Usted como alcalde cuándo se da cuenta de la magnitud de lo que está sucediendo?

-Me doy cuenta esa misma tarde, cuando el agua empezó a llegar a Alfafar desde Massanassa y Paiporta. Entonces me doy cuenta de la magnitud cuando veo que está subiendo en las casas, cuando ya no podemos estar en la calle y tenemos que huir para no ahogarnos. Realmente no soy consciente, actúo. Y cuando verdaderamente soy consciente es el día siguiente. Cuando puedo llegar al ayuntamiento de madrugada y sale el sol y veo que aquí ha habido una guerra. 

-¿Cómo fue aquel día?

-Como si hubieran bombardeado Alfafar. Esto era un escenario de guerra, como si hubieran bombardeado Alfafar. Esta experiencia la he compartido con otros países donde han sufrido inundaciones como las nuestras pero no con la vorágine que bajó el agua o con la vorágine que nos arrastró todo a nosotros. 

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar. -

-¿Qué deberíamos aprender de todo lo que hemos vivido?

-La prevención. Trabajar más la resiliencia y la prevención anticipada. 

-¿Cómo se está portando el pueblo con usted? 

-Bien. Podríamos hablar de algunos haters de redes sociales, pero la población, bien. Eso se ve en el reconocimiento del día a día o los ánimos del día a día. Entiendo perfectamente lo que pudo pasar los primeros días y el sentimiento de la gente. En nuestro caso, los ánimos de tus vecinos es lo que te da fuerzas para continuar y para trabajar por la mejora de la población.

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar. -

-La situación del president de la Generalitat, Carlos Mazón, no es la misma. Él no ha descartado presentarse a la reelección. ¿Cree usted que, después de todo, es la mejor alternativa para los valencianos?

-Él ha supeditado su continuidad a cómo avance la reconstrucción. Es él y el partido quienes deben valorar si consideran conveniente o no que continúe.

-¿Cree que ha faltado coordinación entre administraciones?

-Faltó coordinación en el momento en que entró la política. Cuando entró la ideología y se metió en las tareas de reconstrucción, se perdió la coordinación, simplemente. 

-Pero esa coordinación existió al principio y se demostró que era eficiente.

-Podría haberla ahora también. De hecho, todos los alcaldes, las cien alcaldías afectadas, suplicamos esa coordinación para nuestro día a día.

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar. -

-Conversando con otros alcaldes afectados de diferentes colores, coinciden en que la reconstrucción también ha sido de alguna manera ‘politizada’. 

-Todas las alcaldías lo han pasado mal, especialmente las de la zona cero. Y lo han pasado mal porque, desde la Dana, no pertenecemos a ningún partido político: pertenecemos al partido de la reconstrucción. Por eso no me parece bien que se hagan oposiciones o críticas políticas en este contexto. Entiendo perfectamente a todos los alcaldes y alcaldesas, porque estoy viviendo lo mismo que ellos. Después de pasar por esto, sería incapaz de estar en la oposición y hacer política de una catástrofe. Empatizo con todos mis compañeros, sean del partido que sean, porque todos estamos sufriendo lo mismo. Con el alcalde de Sedaví, José Cabanes, por ejemplo, cada uno hemos contado con nuestros medios o ayudas, pero también nos hemos llamado, nos hemos apoyado y nos hemos animado mutuamente. Por supuesto que sí.

-En el caso que me comenta, Alfafar y Sedaví son municipios de colores diferentes pero el casco urbano es prácticamente uno.

-Es que nos unen las calles, las avenidas, las herramientas, los materiales, los vehículos que sirven para limpiar la vía pública, las señales que podemos compartir, las policías que podemos mancomunar… Y, sobre todo, familias entrecruzadas entre nuestras poblaciones. ¿Qué sentido tendría llevarnos mal, y más aún después de una catástrofe? Ninguno. Tenemos que sumar sinergias para salir adelante. Y, a nivel personal, yo puedo entender lo que pasa por la cabeza de otro alcalde, porque él sabe lo que pasa por la mía. Una llamada, un abrazo, un gesto de apoyo… eso vale muchísimo. Al final, lo que hemos aprendido de todo esto es que una palmadita de ánimo tiene un valor enorme. Y también hemos aprendido a relativizar las cosas.

-Ni Mazón ni Sánchez han visitado su municipio. ¿Echa en falta alguna visita institucional?

-Hemos tenido la de los voluntarios, y esa es la buena.

-¿Qué necesita hoy Alfafar para continuar con la reconstrucción?

-Que nos quiten el papeleo. Que no nos sometan a esa tortura.

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar. -

-Ya han presentado también su plan de emergencias, ¿en qué consiste?

-Tenemos aprobado el protocolo de actuación ante alertas, y ahora estamos en la fase 2, que es donde volvemos a toparnos con el papeleo para trabajar el plan de resiliencia. Por un lado, los asuntos sociales, y por otro, las medidas de prevención: pantallas informativas para la población, señales acústicas, el sistema ES-Alert… Eso es lo que falta para completar el plan. Pero la actuación la tenemos clara: la ciudadanía, el equipo de gobierno, la corporación, la policía y los compañeros de la mancomunidad, que son fundamentales.

-Volvamos un momento al plano personal. Muchos alcaldes dicen que ha sido lo peor que han vivido en su cargo. ¿Lo siente así?

-Sí, desgraciadamente creo que ha sido lo peor que he vivido, tanto en política como fuera de ella. Ha sido lo peor, pero también un gran reto. Ha puesto a prueba a la persona, a tu capacidad. Los primeros meses fueron muy intensos, con la emergencia, intentando estar a la altura, durmiendo poco… Y luego llega ese momento en que sientes que, por mucho que trabajes, no avanzas. Ahí nos vinimos abajo, pero después nos levantamos con la fuerza de decir: los papeles no nos pueden parar.

-Después de todo esto, ¿le gustaría volver a presentarse a las elecciones y seguir la reconstrucción como alcalde?

-Por supuesto. Creo que se lo debo a la ciudadanía: poder terminar la reconstrucción. Me ha tocado gestionar la catástrofe y quiero dejar Alfafar mejor que antes de la barrancada. Además, creo que tengo la fuerza para hacerlo.

-Es pronto, pero coincidimos entonces en que volverá a presentarse y a ser alcalde.

-Si el partido lo considera oportuno y valora que el trabajo en Alfafar ha sido bueno, yo estoy dispuesto a seguir y mejorar día a día.

  • Juan Ramón Adsuara, alcalde de Alfafar. -

-Pensemos en el 29 de octubre del año pasado y el 29 de septiembre de este año, cuando hubo una alerta roja también. ¿Qué ha cambiado desde entonces, en cuanto a coordinación, prevención y gestión institucional?

-Ha cambiado nuestra mentalidad a la hora de gestionar una alerta roja. Ya no banalizamos las alertas. Las empresas han asumido su responsabilidad de cerrar cuando es necesario; todos nos hemos coordinado y respetado las recomendaciones de las autoridades de emergencia, evitando la movilidad. Así los efectivos pueden centrarse en lo importante: gestionar posibles alertas o inundaciones, no en controlar desplazamientos innecesarios.

-Sobre la suspensión de clases. Es una cuestión especialmente complicada porque en ocasiones la decisión es difícil de tomar, porque puede que no llueva pero aún así se pide evitar desplazamientos. ¿Cómo cree que debe abordarse?

-Creo que este tipo de fenómenos meteorológicos se van a repetir. Lo hemos visto en Murcia, Tarragona o Cullera. Las danas ya no son como las gotas frías de antes: han venido para quedarse. Nuestro protocolo es un documento vivo: mientras haya alerta naranja, se cerrarán los colegios para evitar la movilidad entre poblaciones. Aquí tenemos pasos soterrados bajo autovías o vías de tren, y eso genera riesgo. Pero en el futuro, cuando las infraestructuras estén reparadas, lo lógico será mantener las clases con alerta naranja y solo suspenderlas si la alerta pasa a roja. Esos son los criterios claros.

-Por tanto, depende también de la casuística de cada municipio, ¿no?

-Efectivamente. Para eso hay dos comisarios nombrados por la Mancomunidad de l’Horta Sud, que afecta a casi 400.000 personas. Ellos son quienes pueden tomar esas decisiones, y nosotros acordamos seguir sus indicaciones, como hemos hecho estos últimos días. Si algún municipio se precipita al tomar decisiones, es responsabilidad suya. Desde la mancomunidad intentamos coordinar las decisiones para evitar confundir a la ciudadanía.

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