VALÈNCIA. Este mes de junio, la causa judicial de la Dana ha destacado por la declaración de numerosos trabajadores del departamento de Emergencias y del servicio del 112 de la Generalitat Valenciana. Unas comparecencias que han permitido desentrañar cómo se sucedió la fatídica jornada del 29 de octubre en el seno del centro de emergencias de l'Eliana, donde se encuentra la 'centralita' del teléfono de emergencias pero también donde se reunía el Cecopi, presidido por la exconsellera Salomé Pradas, y donde, apenas a unos mentros, se encontraba una sala de mando técnica.
Varios de los presentes en aquella sala han pasado ya por el juzgado de Instrucción 3 de Catarroja, que sigue la investigación de este caso, entre ellos el jefe de la Unidad de Análisis y Seguimiento del Riesgo, que vivió desde allí los peores momentos de la catástrofe. Este viernes se ha conocido la transcripción de su declaración donde puso de manifiesto, por ejemplo, que la Generalitat Valenciana sí movilizó un agente medioambiental para vigilar el cauce del río Magro aquella tarde. No así para el barranco del Poyo, adonde se habían desplazado los bomberos provinciales, más tarde retirados sin avisar.
"Se activó un agente medioambiental para que fuera a ver el rio Magro, donde confluye con el Júcar, para ver cómo estaba la situación realmente en esos momentos", explicó el jefe de la Unidad de Análisis. Se trata de uno de los agentes que la Conselleria de Medio Ambiente puso a disposición de Emergencias para el control de cauces aquel día. El cuerpo de agentes medioambientales es una de las diferentes agencias encargadas de la vigilancia de barrancos.
El técnico aseguró ante la jueza de la Dana que se envió al agente a aquella zona porque "el rio Jucar tambien tenia una crecida porque había llovido en esa zona". Él fúe el que contactó con la central de prevención de incendios forestales (CEPIF), vinculada a Medio Ambiente, y les preguntó "si tenían algún agente medioambiental". Este "hizo dos pasadas": una en la confluencia entre ambos ríos y "volvio a pasar media hora más tarde", cuando "vio que el caudal se había incrementado pero que iba dentro de los límites del cauce".
Así, explicó que "los agentes medioambientales se pueden movilizar porque forman parte de la estructura del plan especial de inundaciones" y que, como "corren un riesgo en su trabajo", "en un momento dado se pueden retirar cuando pueden estar en riesgo". En este caso, el agente les dio "información puntual" sobre las 14.30h del mediodía, pero "no se pusieron agentes medioambientales de la conselleria de Medio Ambiente a vigilar los barrancos, fue un caso puntual".
Los agentes medioambientales en el Plan de Inundaciones
Cabe recordar que el director general de Medio Natural, Luis Gomis, admitió que a mediodía del día de la Dana puso a disposición de Emergencias los 200 agentes medioambientales para la colaboración en el Plan frente al riesgo de Inundaciones, puesto que estos profesionales autonómicos "tienen encomendada, junto a otros organismos, el seguimiento de caudales en ríos, barrancos, sistemas de regulación y zonas inundables". Emergencias no contestó, o al menos no consta.
Sin embargo, más tarde matizó ese primer informe para señalar como principal responsable a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) al apuntar que las confederaciones hidrográficas tienen "un papel preponderante" al aparecer primero en el listado, y "finalmente seguido por una pluralidad de entidades que también pueden colaborar, entre las que se encuentran los agentes medioambientales", que son "uno más de los apoyos auxiliares" entre los que están, por ejemplo, la Guardia Civil.
En ese sentido, en su segundo informe, el alto cargo explicó que el ofrecimiento se lanzó "a pesar de ser simplemente la sexta alternativa subsidiaria que ofrece el Plan de Inundaciones para el seguimiento del estado de los barrancos", que ´-insiste- "no compete a la Generalitat, si no a la Confederación Hidrográfica en primer lugar y a los municipios en segundo". Algo que más tarde negaría otro técnico de Emergencias, los agentes medioambientales, igual que los bomberos forestales, "se pueden movilizar para que hagan seguimiento" pero no existe un orden de prelación entre los diferentes cuerpos: "No hay números", aclaró al respecto.
Movilización de bomberos
El cuerpo que sí se activó a mediodía para vigilar el barranco del Poyo fue el de los bomberos del Consorcio Provincial. Sin embargo, el entonces jefe del Consorcio, José Miguel Basset, retiraría a los bomberos sobre las 14h de la tarde porque el nivel de agua había bajado y era hora de comer, según declaró en la comisión de investigación de la Diputación de Valencia. Lo hizo, sin embargo, sin registrarlo en el sistema de comunicación interno de emergencias, la plataforma Coordom, según la testifical de un empleado de Emergencias.
El jefe de la Unidad de Análisis declaró, en este sentido, que era conocedor de que hubo una petición a los bomberos forestales "pero fueron retirados", confirmando así el relato que ya se conocía. Con todo, dijo no recordar "a qué hora" se produjo la retirada y que lo sabe "porque alguien dijo que se habia dado orden de que se retiraran".
