VALÈNCIA (EP). La alcaldesa de València, María José Catalá (PP), ha señalado este miércoles, preguntada por la eliminación del nombre de Ernest Lluch en el nuevo complejo sanitario de Campanar, que como primera edil no participa ni interviene en el nombre de los centros hospitalarios de la ciudad. A su vez, ha manifestado que "lo importante es que haya un hospital de 500 camas" y que los vecinos de la capital valenciana tengan un nuevo centro sanitario de este tipo.

Catalá se ha pronunciado de este modo durante la presentación del futuro carril ciclo-peatonal Tramo Europa de la ciudad, preguntada por la decisión de la Generalitat de eliminar el nombre del exministro socialista de Sanidad Ernest Lluch, asesinado por ETA, del nuevo complejo sanitario del barrio de Campanar de València que se situará en el espacio del antiguo hospital La Fe.

"Para mí, como alcaldesa, lo importante es un futuro hospital en la antigua Fe que se va a construir con un presupuesto de más de 500 millones de euros aproximadamente y con 500 camas", ha señalado la primera edil.

Catalá ha añadido que "en este momento, ese hospital no existe" y ha considerado que "es muy necesario" teniendo en cuenta que el más próximo, "el Arnau de Vilanova, requiere una ampliación y una mejora en todas sus especialidades".

La responsable municipal ha aseverado que "el plan sanitario que ha diseñado la Generalitat es especialmente interesante" para la ciudad de València". "Ganar un hospital de nuevo en lo que era la antigua Fe, de 500 camas, en un complejo sanitario que tendrá "además "centro de especialidades y centro de salud, me parece para esta ciudad un paso de gigante", ha manifestado.

María José Catalá ha dicho que valora "muchísimo el compromiso de la Generalitat de construir un nuevo hospital de esas dimensiones, de esas características, en una zona de la ciudad que desde el momento en el que se cerró la antigua Fe perdió un recurso sanitario" en la zona en la que esta estaba ubicada aunque se ganó "en otra".

"Para mí, como alcaldesa de València, lo importante es que haya un hospital de 500 camas. Para mí, lo importante es que mis vecinos tengan un nuevo hospital. Eso es fundamental", ha insistido la alcaldesa, que ha precisado que ni ella ni el consistorio participan o intervienen "en el nombre de los centros hospitalarios ni de salud, ni de especialidades".

Preguntada por la moción que el PSPV-PSOE ha anunciado que presentará en el pleno del Ayuntamiento de València para instar a la Generalitat a mantener el nombre de Ernest Lluch para en la antigua Fe, ha respondido que "el PSOE puede presentar las mociones que considere" porque "está en libertad absoluta para hacerlo".

No obstante, Catalá ha indicado, en alusión a los socialistas, que es "difícil" explicar "la contradicción" que se da al "pactar a nivel nacional con los herederos de ETA y que aquí se reivindique este tipo de cuestiones".

Con todo, la primera edil ha descartado "entrar en debates que no forman parte" del Ayuntamiento de València "como el nombre que se le va a dar a una infraestructura sanitaria" y ha reiterado que para ella "lo prioritario es que las obras empiecen pronto, que el hospital esté terminado y que los vecinos tengan un nuevo centro hospitalario".

"Doble vara de medir"

Al respecto, la delegada de Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé (PSPV), ha replicado a la alcaldesa que pese a que diga que "no le importan mucho los nombres" eso "depende de qué nombres sean y para qué cosas sean". Así, le ha recordado que tardó "apenas unas semanas" en rebautizar con el nombre de la exalcaldesa de València Rita Barberá al puente de las Flores.

En ese sentido, la también secretaria general del PSPV-PSOE en esta ciudad y candidata socialista a la Alcaldía ha arremetido contra "la doble vara de medir" del PP y que "ahora también afecta a las víctimas de ETA, pues depende de qué color tengan, las cuentan como víctimas o no las cuentan como víctimas".

"Esto no hace ningún favor a nuestra democracia, a nuestra memoria democrática, ni a una sociedad como la sociedad valenciana, que siempre ha reconocido a todas las víctimas de la misma manera, independientemente de quién estuviera en el Gobierno", ha lamentado.

Así, Bernabé ha advertido de que "borrar de un plumazo a una persona que fue asesinada por la banda terrorista ETA, y además hacerlo por pura ideología no solamente es nefasto para la sociedad, sino que lo es también para la democracia".

En esta línea, ha cuestionado si el gobierno del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón (PP), que ha anunciado que quiere enseñar en los colegios la historia de ETA, "también va a borrar de los libros de texto a Ernest Lluch simplemente por llevar las siglas de haber sido ministro de un gobierno del partido socialista".

"Tienen que empezar a reflexionar sobre su calidad democrática, porque sin duda alguna está perjudicando seriamente la calidad democrática de nuestro país este PP que está echado al monte", ha apostillado.