VALÈNCIA (EP). La Associació Veïnal de Patraix, en València, ha pedido al Ayuntamiento de la ciudad y a la empresa Vithas, responsable de la Clínica del Consuelo ubicada en este barrio, que estudien "el traslado de toda la actividad molesta" de este centro sanitario "a un espacio donde sea compatible" con el entorno.
La entidad vecinal ha realizado esta solicitud tras conocer una resolución del Síndic de Greuges de la Comunitat Valenciana, emitida en febrero, en la que emplaza al consistorio a adoptar las medidas necesarias para que dicha actividad sea compatible con los derechos de los vecinos del entorno a la salud, al descanso, a un medio ambiente adecuado y a una vivienda digna.
Asimismo, la petición se formula tras encuentros mantenidos con responsables municipales para abordar esta cuestión, teniendo en cuenta que "ahora que se está cursando una nueva licencia para un hospital en València de la misma empresa" que gestiona la Clínica del Consuelo y que "todos los partidos políticos" de la corporación local se manifestaron a favor de su traslado".
La entidad vecinal considera, en un comunicado, que así "se conseguiría liberar el lugar actual" donde se desarrolla la actividad de este hospital, que "mayoritariamente es residencial", y atendiendo así a la "necesidad de los vecinos" y al "compromiso" adquirido con ellos para que "se acabe la pesadilla de vivir dentro de un hospital".
La asociación ha expuesto que "durante muchos años, los vecinos del entorno" de este centro sanitario "han visto como una clínica sanatorial pasaba poco a poco a convertirse en un hospital general dentro de su patio" de viviendas, un lugar "donde comparten obras y adaptaciones para dar cobertura a una instalación molesta como es un hospital" que tiene "cartera de servicios 365 días durante 24 horas diarias".
En esta línea, resalta que los residentes de la viviendas próximas ven desde sus casas "personas ingresadas en la ventana de enfrente" o perciben "el olor de una instalación hospitalaria" y precisa que así lo sufren los vecinos "de las calles Marqués de Campo, Jesús, Callosa d'Ensarriá durante más de veinte años".
La asociación reclama también que se tenga en cuenta a los usuarios de este centro, dado que "su recepción o salida se hace en la vía pública, sin preservar su intimidad". "Un espacio mayoritariamente residencial comparte sus aceras con ambulancias, con entrada y salida de camillas en medio de la calzada sin ningún tipo de intimidad en una actividad frenética", expone.
"Los vecinos decimos ¡Basta Ya!, basta de una actividad molesta e insalubre sin una licencia clara, con una incompatibilidad funcional y contra el PGOU --Plan General de Ordenación Urbana--" y "donde la vida de los vecinos y vecinas se comparte con el sufrimiento y la muerte en sus mesas del comedor, en sus patios y aceras", señala el colectivo vecinal.
Así, sostiene que las ampliaciones hechas en este centro "se han ido realizando en una zona de uso dominante residencial no apta para compatibilizar con una dotación sanitaria de tanta envergadura".
"La infraestructura, los ruidos, los residuos, los humos, los olores que genera y los accesos viarios que la clínica necesita para funcionar actualmente en condiciones adecuadas para los pacientes no difieren sustancialmente de aquellos otros establecimientos sanitarios que son considerados como sistemas generales" en el PGOU, "donde el uso residencial no es compatible".
En representación de la asociación de vecinos, Toni Pla, ha insistido, en declaraciones a Europa Press, en la conveniencia de trasladar todas las actividades del Consuelo "molestas" y propias de un hospital a otro espacio fuera del entorno urbano en el que se encuentra como el terreno del Bulevar Sur en el que se anuncia la construcción de un hospital de Vithas.
Pla ha reiterado que las actividades que se desarrollan ahora en Patraix no son las propias de un servicio de Atención Primaria o de Especialidades sino de un hospital.
Los vecinos aseguran que la suya es una "reivindicación histórica", "lógica y de derecho", a la que "durante años las administraciones han dado la espalda" y solicitan una reunión con el alcalde, Joan Ribó, "para exponerle", con las "nuevas recomendaciones del Síndic de Greuges", la "necesidad de actuar de modo rápido y contundente " en favor del traslado.
Del mismo piden a la compañía que gestiona el centro sanitario que "plantee una redefinición de sus intereses particulares" y "replantee un estudio de viabilidad de traslado de las actividades sanitarias generales no compatibles con el PGOU a otro centro cumpliendo así las recomendaciones del Síndic de Greuges" y la acordado por "los partidos políticos que en su momento apoyaron mayoritariamente" el cambio de ubicación.