VALÈNCIA. (EFE). El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha asegurado este jueves, al ser preguntado por la deuda valenciana, que no pide al Gobierno central que la condone sino que se compense la parte de esa deuda que ha estado propiciada por "décadas de infrafinanciación".
Puig ha hecho estas declaraciones en el pleno de Les Corts al ser preguntado por el portavoz de Compromís, Fran Ferri, sobre qué opina el Consell que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, "haya descartado la necesaria compensación de la deuda histórica valenciana ante los cargos autonómicos del PP".
Al respecto, el president ha considerado que "no es razonable que el ministro de Hacienda decida algo que atañe a toda España en una reunión con miembros de su partido", pues eso, a su juicio, "evidencia una profunda contaminación de las instituciones".
"Es una mala dinámica, reduce la credibilidad de las instituciones", ha apuntado Puig, quien ha añadido que "Montoro, horas después, dijo lo contrario".
"Exigimos que se haga justicia con los valencianos. No queremos que se asimile la Comunitat Valenciana a los incumplidores, porque aunque es cierto que hubo quien malgastó los recursos públicos, eso ya sabemos que lo tenemos que pagar nosotros; pero hay otra parte de la deuda que tiene origen en la infrafinanciación", ha agregado.
Puig ha señalado que el Congreso ha votado recientemente "lo que aquí se pidió por unanimidad, pero ha habido dos partidos, PP y Ciudadanos, que se han abstenido. No hay más preguntas, es lo que hay".
A su juicio, "el problema es que alguien quiere plantear estas cuestiones desde el enfrentamiento entre comunidades, en un momento en el que España vive un debate territorial que, en algunos casos, es extremadamente conflictivo, aunque no en el nuestro, que acudimos a las instituciones buscando respuestas".
"Queremos un nuevo modelo de financiación en el marco de la Constitución, que ahora no se cumple", ha añadido el president, quien ha insistido en que quieren "utilizar las instituciones para resolver problemas, pero sin insultos a la inteligencia como hizo recientemente el presidente de Galicia", Alberto Núñez Feijóo.
"Con su financiación nosotros tendríamos 19.000 millones de deuda y ellos 45.000. Lecciones, pocas", ha concluido el jefe del Ejecutivo valenciano.
Al respecto, el portavoz de Compromis, Fran Ferri, ha lamentado que su homóloga del PP, Isabel Bonig, "sonriese y estuviese contenta" tras asistir a la reunión de su partido en la que, según ha asegurado, Montoro dijo a los "barones" populares que descartaba la quita a las comunidades autónomas.
En este mismo sentido, ha exhibido una nota de prensa del PP en la que ponía "en negrita" que "no habrá quita de la deuda a las comunidades autónomas".
"Esto tiene un nombre: traición a los intereses de los valencianos. Es muy triste porque en octubre de 2015 todos los grupos firmamos una declaración institucional que pedía que se nos compensase por la deuda adquirida", ha añadido.
"Y no es la primera vez, esto es de 'déjà vu' constante -según Ferri-. Albert Rivera dice que no quiere compensar esa deuda, a pesar de que Ciudadanos lo firmó en Les Corts, y cada vez es más complicado diferenciar al PP de Ciudadanos. Hay quien habla ya, en la calle, de 'Populados'. Parece que ambos partidos haya iniciado una carrera a ver quién perjudica más nuestros intereses".
La presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig, ha defendido la propuesta que los 'populares' llevan este jueves al Congreso para primero renovar el modelo de financiación autonómica en España y después "ver los mecanismos para ver cómo se compensa la infrafinanciación", como en el caso de la deuda histórica de la Comunitat. Por contra, ha lamentado que, en este proceso, "Puig ha perdido una oportunidad porque ha roto el consenso político".
Así lo ha expresado en los pasillos de las Corts tras la sesión de control al 'president', quien ha defendido que el Consell "seguirá luchando" por la condonación de la deuda. Bonig cree que Puig "desperdició una oportunidad de oro" cuando le brindó el apoyo del PPCV para cambiar el modelo de financiación.
Bonig ha relacionado esta postura con la enmienda que el grupo popular en el Congresopresenta este jueves, que llama a "dar un impulso definitivo" a la renovación del reparto de fondos, bajo los principios de "solidaridad, equidad, transparencia y garantía de acceso", entre otros. Los 'populares' quieren que en este sistema se integren los recursos que el Gobierno transfiere a las comunidades autónomas.
La líder del PPCV ha respaldado esta propuesta para que la condonación de la deuda "no sea un obstáculo para la reforma del modelo de financiación" y se aborde en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), arbitrando los mecanismos con el Ministerio de Hacienda. A su juicio, "se tendrá que negociar meter en el nuevo modelo las injusticias del anterior".
Mientras tanto, ha lamentado que "da la sensación de que la condonación de la deuda es para dilatar el cambio del modelo", algo en lo que ha subrayado que coincide con la presidenta de la Junta de Andalucía, la socialista Susana Díaz.
Bonig ha reiterado así que Puig "debería haber formado un frente común con las comunidades peor financiadas y otro de no confrontación con las mejor financiadas". "No vamos a permitir que la deuda consiga enfrentar a la Comunitat con el resto cuando había un consenso político, social y empresarial para cambiar el modelo de financiación", ha enfatizado, para advertir de que "nos quedamos solos".
Mientras "Rajoy está viniendo a la Comunitat anunciando inversiones", se ha preguntado "qué narices" hacen PSOE y Compromís y qué decían cuando "Zapatero aprobó el modelo que tenía como objetivo beneficiar a los independentistas catalanes". Y ha añadido: "¿Qué está haciendo Pedro Sánchez?".
Para la líder de los 'populares' valencianos, esta cuestión parece un "totum revolutum" en el que "en medio está Compromís, que le interesa que no haya un cambio de modelo porque se le acabarían todas las excusas". "Aparte de llorar, que empiecen a gestionar algo", ha reivindicado.
Por otro lado, la 'popular' ha explicado que el PP se ha abstenido este jueves en la cámara baja a una moción de Compromís también en materia de financiación "dándole caña" al PP, por lo que ha instado a la coalición a que se aclare en qué modelo quiere.
El síndic de la coalición, Fran Ferri, ha negado después esta afirmación y ha denunciado que "Bonig ha vuelto a mentir", pues la propuesta de Compromís, según él, "en ningún momento se mete con el PP, solo hace un relato de los hechos". Ha reiterado que tras la deuda están los valencianos y que, si se aplicara la condonación, la Generalitat dispondría de 2.600 millones más.
El portavoz socialista en Les Corts, Manolo Mata, ha acusado este jueves al PP y a Ciudadanos de haberse "excluido" del acuerdo adoptado hoy en el Congreso sobre la financiación autonómica, y que, según ha asegurado, es simular a uno que aprobó por unanimidad el Parlamento valenciano.
En los pasillos de Les Corts, Mata ha agradecido a "los diputados socialistas de Galicia, Andalucía, Extremadura y el resto de comunidades" su apoyo a la moción, y ha afirmado que el PPCV les hace "daño al querer poner sobre el tejado del PSPV" la reforma del modelo de financiación.
"Si Rajoy es quien gobierna, que ya hay dudas sobre ello, debería presentar el nuevo modelo, y el resto de fuerzas analizarlo y llegar a un acuerdo, pero lleva cuatro años dilatándolo y un año vulnerando su compromiso que expresó en el Consejo de Política Fiscal y Financiera", ha criticado.
Un sistema "que necesita 16.000 millones más cada año no puede continuar con un Gobierno que no ejerce y que dispone de fondos de los que carecen las comunidades es un drama", ha aseverado.
Según Mata, el modelo de financiación es "clave" para la Comunitat, aunque "otra cosa es cuándo se aplique", y por eso esta tierra debería contar con instrumentos financieros que sirvan "de contrapeso al déficit de 1.300 millones anuales" que acumulan los valencianos.
"Eso lo sabe el Gobierno, como sabe que la deuda es impagable", ha apuntado Mata, para quien "es evidente que la mutualización de la deuda es un paso hacia la condonación".
La magistrada apunta a irregularidades administrativas y al desequilibrio en la distribución del dinero, pero no aprecia ilícito penal