VALÈNCIA. Los operarios de la planta de motores de Ford Almussafes ya trabajan con la nueva versión del Maverick. Se trata de las primeras líneas de prueba de cara a la rampa de lanzamiento del modelo, del que se espera una producción a pleno rendimiento para el mes de abril de 2018.
Tal carga de trabajo -según estiman fuentes de la sección sindical de UGT-PV en la multinacional- debería poner fin al Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en el que se haya inmerso el departamento tras sufrir una importante pérdida de actividad en el presente 2017. El expediente afecta actualmente -de forma rotatoria- a un tercio de los alrededor de 380 empleados de la planta.
Además, la organización confía en que su fabricación permita recuperar el segundo turno de fabricación en la planta, que fue suprimido este ejercicio. Las cifras auguran pasar -de forma progresiva- de la actual producción diaria de alrededor de 840 motores a alrededor de 1.500.
La inversión total a la que ascenderá la adecuación de la factoría a la producción del nuevo motor de Ford será finalmente de 112 millones de dólares, cerca de los 100 millones de euros al cambio.
La cantidad supera con creces las primeras estimaciones, que preveían un desembolso de 40 millones en dicha inversión.
Las primeras actuaciones se realizaron durante el paro de la pasada Navidad, y se espera que concluyan la totalidad de las mismas en el descanso que tendrá lugar en Pascua de 2018.
El destino del nuevo motor Maverick 2.0 será principalmente la planta de la firma del óvalo en la provincia canadiense de Ontario, donde la multinacional ensambla el modelo Ford Edge.
En paralelo, se espera que la recuperación de la actividad en la planta de motores estimule también la actividad en la planta de mecanizados, donde la producción se ha reducido a un total de 540.000 piezas anuales en el presente ejercicio, lo que ha supuesto la pérdida del turno de fin de semana. El objetivo es lograr un ritmo de 700.000. Para el próximo 2018 la enseña daría por bueno un dato de alrededor de las 620.000 unidades.
Del mismo modo, pero a una escala muy superior, la planta de vehículos de Ford Almussafes aguarda expectante la adjudicación del nuevo modelo del Ford Kuga, el coche líder de ventas de la factoría que ya supone alrededor del 50% de su producción.
La factoría valenciana, que en la actualidad ya fabrica el modelo, parte como favorita para producir también la nueva versión, cuyo lanzamiento al mercado llegaría aproximadamente en el año 2020. La dirección de la compañía visitó recientemente las instalaciones de la compañía para analizar las variables. Se augura una decisión inminente.