CASTELLÓ. Si hay algo que será verdaderamente complicado de hacer este año, eso son los resúmenes de lo más destacado del 2020. Y es que el coronavirus ha dividido todos nuestros recuerdos en dos: lo que pasó antes del estado de alarma y lo que pasó desde, y después, del estado de alarma. A partir de aquí, cuesta recordar con exactitud qué momentos memorables de los que vivimos pertenece al último año, o no. Para facilitarnos la tarea, aunque sea musicalmente, Spotify vuelve con su 'Wrapped' o resumen de lo más escuchado del año. Un viaje temporal que recuerda, sin falta, qué escuchábamos en nuestros momentos de debilidad o en los de mayor subidón. Esos que hubo especialmente en enero y febrero, claro. Pero sin detenernos en los gustos personales que tiene cada uno, hay otra información que arroja Spotify y que es muy significativa de los tiempos que corren. Por un lado, el número de artistas nuevos que has conocido a lo largo del año. Una información que fácilmente puede rondar entre los 200 o 700 nombres. Y por otro, la cantidad de géneros que has reproducido, muchos de estos por primera vez en tu vida. Un dato que, a no ser que seas muy religioso de un solo estilo, también es fácil que salte por los aires y sean centenares y centenares.
¿Tanta música cabe en Internet? De hecho, muchísima más de la que hay solamente en Spotify. No es esta la única plataforma que existe para reproducir música en la red, aunque sí es una de las más famosas y con más cabida de oyentes. Pero también existen otras vías como iTunes, Amazon Music o YouTube. Los músicos son conocedores de sus posibilidades y por eso están cada vez más decididos a aprovechar sus herramientas en un momento en el que hacer directos ha dejado de ser su principal fuente de ingresos.
"Me lancé a crear un nuevo sello discográfico durante el confinamiento. Será plenamente digital. Es el momento de lanzar música en internet. La gente no sale mucho y no hay apenas conciertos. Así que es la única manera que queda para que escuchen tus canciones", explica a este diario José 'Dimoni'. El productor y dj de Vila-real, conocido artísticamente como Eixco, decidió crear en julio una nueva discografía que editará todas sus referencias en digital. Fue su propia experiencia la que le llevó a hacerlo. "Al depender de un sello, decidí montar uno. Al igual que yo, muchos amigos gastan infinidad de tiempo en mandar sus demos a otras discográficas. Con Desficio quiero facilitar la vida a los músicos de aquí", asevera 'Dimoni', quien tampoco cierra la puerta a propuestas llegadas desde otros puntos de dentro o fuera del país.
De hecho, el proyecto también está dispuesto a abrazar todo tipo de estilos, siguiendo la idiosincrasia de internet. Además de uno de sus fuertes, la electrónica, desde el sello de Vila-real quieren tender la mano a géneros más populares como el rock o el pop. "Encerrarse en un solo estilo me parece una lástima. Todos los artistas necesitan una salida y aunque sea un tipo de música que no te guste, no significa que no puedan ser buenos para otras personas", manifiesta el dj, que lanzó en agosto su disco Black. Pero no es el único, además del suyo, también se editó el nuevo trabajo de Astropáramo, Punto nemo, y están en medio de la remasterización de la discografía antigua de Carlos Vargas, legendario bajista de Castellón.
Igualmente, antes de que acabe el año presentarán a otros artistas, como Guillem Sale y su álbum tecnho, Puto Uil. "Tenemos un mail donde nos pueden enviar demos. En principio solo pedimos unos mínimos estándares de calidad de sonido. Es importante que no tenga sonidos bajos y suene mal. Pero estamos abiertos a música experimental de todo tipo. Ya sea dolçaina como rock. Solo hace falta que suene bien y sea contundente", detalla José 'Dimoni'.
Con todo, no trabaja el productor solo. Para hacer llegar su música lo más lejos posible, actúa a cuatro manos con una distribuidora alemana que se encarga específicamente de las plataformas online. "Puede ser que en China Spotify no sea la primera plataforma de escucha, por eso hay que estar al día para intentar abarcar el mayor rango posible de países", añade el promotor del sello que asegura que, a partir de estas premisas, la música de Castellón puede encajar perfectamente con tal expansión de público. "La canción que menos te lo esperas puede hacer boom. Es lo bueno de Spotify que te reproduce canciones relacionadas con tu estilo. Igual son de un país lejano y de un artista que no conocías, pero te gusta y te quedas. En nuestro caso, colgamos canciones hasta en TikTok porque puede ser que a una persona le de por bailarla y con esos 15 segundos se haga viral".
Aun así, es evidente que el streaming no puede suplir la falta de ingresos de los músicos. Una precariedad que ha acentuado la crisis sanitaria y que no encuentra ni de lejos su salida con el mercado de internet. "Hay que tener muchos seguidores para que sea rentable. Una escucha en Spotify te genera 0,001 céntimos y hasta que nos consolidemos costará menear más las canciones. Nos queda mucha carrera para ganarnos el público", reconoce el profesional que, aun así, vuelve a remarcar el indudable papel de la red para darse a conocer. "Tenemos escuchas y ventas en unos 10 países, entre ellos Estados Unidos y Reino Unido. Aunque no se gane mucho dinero, lo importante es que la música llega y es más fácil convertirse en una referencia", asegura. Y continúa: "Por eso es importante que la gente que conoce a un cantante o a un amigo dj, y no puede asistir a un concierto suyo, le ayude dándole un like o una escucha. Una vez tienes un boom, el resto viene solo. En el mercado físico lo tenemos muy crudo. A la gente cada vez le interesa menos y se espera que en nada los coches funcionen solamente con USB o Internet. A no ser que te guste mucho tener un disco, va a ser cada vez menos común".
El auge de las plataformas digitales propicia también una caída en el consumo del audiovisual pirateado, pero la sobresaturación del mercado podría producir un repunte de los accesos a copias ilegales.