VALÈNCIA. Los Fondos Europeos, unidos a los Presupuestos Generales del Estado, nutren programas claves ya existentes y nuevos por lanzar, irradiando la economía de recursos económicos para su impulso, recuperación y transformación.
La Financiación Pública ofrece un impulso estratégico para desarrollar actividades clave dentro de las empresas como la I+D, la innovación, la digitalización, la internacionalización, la economía circular, la protección medioambiental y el cambio climático.
Son muchas las Pymes que pueden utilizar los programas de ayudas concedidas por las instituciones públicas para potenciar su crecimiento. "Este tipo de ayudas son especialmente útiles para los momentos en los que las empresas deben hacer esfuerzos económicos especialmente importantes para su actividad"
Por tanto, es recomendable que las empresas aprovechen este tipo de ayudas, se muestren muy activas tanto para buscarlas como para solicitarlas.
Uno de los ámbitos en los que hay más ofertas de programas a nivel nacional son las Líneas CDTI de I+D, Innovación y Expansión, que están abiertas todo el año facilitando la presentación de las solicitudes de las empresas lo que permite hacer coincidir las necesidades de las empresas con su financiación en el momento justo en que esta surja.
También existen otras ayudas por concurrencia competitiva, con ventanas abiertas durante un espacio de tiempo, como Reindus, Pymes Industriales o Fomento de la competitividad Industrial que representan una oportunidad muy interesante dado las subvenciones y/o préstamos blandos que otorgan. Para la internacionalización destaca el programa ICEXNext.
Otras ayudas habituales son las enfocadas a mejorar la eficiencia energética y el respeto al medio ambiente por parte de las compañías. Las condiciones que se ofrecen en este tipo de programas son muy ventajosas. A grosso modo pueden venir con un tramo no reembolsable de entre un 30% a un 45% y/o préstamo blando con tasas de interés entre 0,0% y el 3,75% dependiendo de cada programa convocante.
Muchos programas de ayudas están limitados a empresas con un determinado tamaño o que trabajan en un sector de actividad económica en concreto. El desarrollo tecnológico, la reindustrialización y la agricultura son algunas de las actividades más favorecidas por este tipo de apoyos. Por tanto, para seleccionar la ayuda que se va a solicitar hay que fijarse en dos aspectos: que las características de la empresa encajen en el perfil establecido en la convocatoria del programa publico de ayudas y que la actividad a la que se va a destinar el dinero recibido coincida con los objetivos establecidos en el programa convocante.
En la mayoría de las ayudas públicas se debe “justificar las inversiones” teniendo que aportar documentación oficial como facturas o nóminas y cualquier otro tipo de documentación contable; modelos de registro del gasto/inversión que se haya hecho por parte de la empresa. Por ello es recomendable ajustar el presupuesto del proyecto a valores reales justificables más adelante. Es un error sobre estimar el valor de un proyecto o minizarlo.
Uno de los riesgos a la hora de presentarse a una subvención es el momento en el que la administración pública entrega la ayuda, el dinero. Si es una subvención, el dinero se entrega a posteriori, una vez se hayan justificado las inversiones en la mayoría de los programas. Esto significa que el solicitante debe tener la capacidad económica para afrontar los gastos con los que se había comprometido en la solicitud. En este aspecto, si la sociedad no tiene los suficientes recursos propios, la banca juega un papel fundamental para cofinanciar este tipo de proyectos. Las resoluciones de concesión de los organismos públicos suelen ser un instrumento útil a la hora de negociar la cofinanciación por parte de la banca.
En el caso de los préstamos y productos mixtos, muchos de los programas entregan el dinero -o un porcentaje alto del mismo- a la firma del contrato o en la fase de concesión, lo que favorece la puesta en marcha del proyecto y su posterior ejecución, pues dota a la empresa de liquidez. Este modelo de financiación pública va a más hoy en día frente al modelo de solo subvención.
“En el caso de los préstamos y productos mixtos, el dinero se entrega a la firma del contrato, lo que favorece la puesta en marcha del proyecto y su posterior ejecución. Este modelo de financiación pública va a más hoy en día frente al modelo de solo subvención”
Dependiendo del tipo de programa, las solicitudes suelen tener un cierto grado de complejidad que hace necesario un lenguaje profesional/técnico para incrementar la probabilidad de éxito. Lo importante para completar estas solicitudes es explicar muy bien el objetivo general y técnico del proyecto y detallar a qué se va a destinar la inversión y los beneficios que se esperan conseguir, por ejemplo, a través de la generación de nuevos puestos de trabajo, un incremento de la productividad de la empresa, un incremento de la capacidad productiva, una nueva línea de producto, etc, etc.
Es por ello que muchas empresas optan por contratar una consultora especializada para asegurarse de no cometer ningún error a la hora de cumplir los trámites y aportar la documentación requerida. Estas consultoras cuentan con profesionales que permiten ubicar y diferenciar rápidamente las ayudas (Europeas, Nacionales y Regionales) y mejorar la probabilidad de éxito a la hora de conseguir una ayuda.
“Las solicitudes de estas ayudas tienen un cierto grado de complejidad, por ello son muchas las empresas que optan por contratar los servicios de una consultora especializada y aumentar así la probabilidad de éxito”.
Victor Hugo Osorio Cabrera
Responsable de Financiación Pública
Insomnia Consulting SL