La postura no es compartida por FAPA-Valencia, que lo califica de "línea roja" y apuesta por hacerlo de manera "voluntaria"
VALENCIA. La Confederación Valenciana de AMPAs (Covapa), que está integrada por las federaciones provinciales FAPA Gabriel Miró de Alicante, FAPA Humanista Manuel Tarancón de Castellón y FAPA 9 d’octubre de Valencia, se muestra crítica con la “precipitación” de la orden oficial sobre #XarxaLlibres y propone medidas que podrían contribuir a la gestión de los bancos de libros. Una de ellas es la de contratar a padres para que colaboren en la gestión de los mismos durante la fase que arranca ahora.
Los centros escolares ya había manifestado su malestar por la sobrecarga de trabajo que conlleva la segunda etapa de #XarxaLlibres, durante la que se recogen los libros de este curso para organizar el banco del próximo. Atendiendo a los plazos estipulados desde la Conselleria de Educación, todo el material debe estar recopilado antes del 5 de julio. Sin embargo, tanto el profesorado como los administrativos de los colegios están desbordados con los cierres de actas y procesos de admisión, lo que ha llevado a recurrir a los padres para realizar tales funciones. La duda es, ¿en calidad de qué?
“A dos personas por centro, estamos hablando de crear 2.800 puestos, aunque sean temporalES"
Covapa propone que se les contrata como empleados, una petición que ya realizó en la Comisión Sectorial de Proyecto Legislativo, donde no recibió el apoyo del resto de grupos. “A dos personas por centro, estamos hablando de crear 2.800 puestos, aunque sean de carácter temporal para los meses que dure la gestión”, argumenta Lorenzo Tendero, secretario general de la federación. Propone que se financie con la partida destinada a #XarxaLlibres, en tanto que supondría un beneficio doble para familias y personal del centro, pero lo cierto es que no ha contado con respaldo.
De hecho, la Confederación Gonzalo Anaya se opone tajantemente a esta medida. “Nosotros pedimos a nuestras Ampas que colaboren, pero no queremos que se profesionalice, sino que sea algo voluntario”, responde Màrius Fullana, presidente de FAPA-Valencia y líder de la Gonzalo Anaya, quien califica la medida de "línea roja que no estamos dispuestos a cruzar". Asegura que han demandado a la Generalitat reforzar el personal administrativo para llevar a cabo este servicio, “y nos han dicho que lo estaban estudiando, pero ahora no se puede”. "Es momento de remar entre todos”, añade.
El Consell Jurídic Consultiu (CJC), organismo asesor de la Generalitat, ya advirtió de que era “incuestionable” atender las quejas del profesorado y negociar la situación en Mesa Sectorial. FAPA-Valencia les pide colaboración a ellos también: “Se trata de un sobreesfuerzo, desde luego, pero las cosas han venido como han venido”. Fullana les recuerda que es algo “temporal” e incide en que, además, “están obligados”.
No es el único punto de discordia. Covapa considera que la configuración actual del programa puede desencadenar el efecto contrario al pretendido: la diferenciación de las familias. “Los que tienen dinero, han podido comprar libros, hacer la factura y presentarla. Pero ¿qué pasa con todas esas personas que compran en mercadillos o recurren a personas que se los prestan y, por tanto, no puede entregarlos al banco?”, detalla. Recuerda que para optar a la segunda fase del programa, consistente en recibir los libros del próximo curso, se debe devolver al menos el 85% del lote. Además, incide en el problema que ha habido con la renta.
Los plazos también han sido motivo de desencuentro. Si bien los libros deben estar entregados antes del 5 de julio, los centros establecen como fecha límite de depósito el 17 de junio para Primaria (a excepción de los alumnos suspensos) y el 22 de junio para Secundaria. “Desde que publican la normativa solo se deja un margen de dos semanas. Es normal que el otro día se colapsara la web…”, critica Tendero. Solicita cierta flexibilidad: “Tal y como se han dado las cosas, cualquier familia debería poder entregar hasta el 5 de julio”. Además, manifiesta “un gran miedo” por no saber cuándo se llevará a cabo la entrega de material para el siguiente curso. “Pensamos que puede llegar octubre y que no estén listos”, afirma.
“El concepto de #XarxaLlibres es maravilloso. Nosotros somos totalmente partidarios de la escuela pública, gratuita y no diferenciadora. Creemos que no solo los libros deberían ser gratuitos, sino todo tipo de actividades… Pero esta vez se han precipitado al publicar la orden”, expone, y concluye: “Lo agradecemos, pero hubiéramos preferido que este año se hubiera trabajado bien la norma, con modelos como el Castilla La Mancha o Andalucía, y que hubiera empezado de cero, comprando todos los libros para los futuros cursos”.