Artistas falleros consensuan una serie de medidas para potenciar la maltrecha Ciutat Fallera
VALENCIA. El plan de revitalización y mejora de Ciutat Fallera sigue en marcha y, tras dos encuentros entre los representantes del Gremio de Artistas Falleros y el grupo Ciudadanos, ya han dado luz verde a un decálogo que ha llegado a manos del propio alcalde de Valencia, Joan Ribó. Son diez medidas concretas las que plantean para poner freno a su delicada situación e iniciar la construcción de una ciudad de la artesanía.
Entre las necesidades planteadas, el deseo de que la Ley de Mecenazgo de la Comunitat Valenciana potencie la actividad de los artistas y que el espacio pase a ser un centro de desarrollo cultural y arte urbano relacionado con la Universitat de València y la Facultad de Bellas Artes de la Universitat Politècnica de València.
Mejorar los accesos, en concreto los de la ronda norte; aumentar la señalética que indique la ubicación de Ciutat Fallera y homogenizar las fachadas para dar una imagen corporativa son otras de las peticiones, un plan de revitalización mediante el cual, en última instancia, quieren convertirse en un clúster de talento y artesanía local. El ‘Sillicon Valley’ de las Fallas.
“Es un ejemplo de participación ciudadana al que esperamos se sumen todos los grupos políticos y adopten el compromiso de implicarse en la creación de la Ciudad de la Artesanía Valenciana”, explicó Fernando Giner, portavoz municipal de C’s. De igual forma, recordó que, a propuesta de su grupo, Ciutat Fallera recibió en octubre la Medalla de Oro de la Ciudad, “un acontecimiento que le debe servir de impulso para iniciar su proceso de revitalización” pues “en 2016 se prevé que la UNESCO declare las fallas Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, lo que hará que la CAF sea visita obligada para los turistas y si no hacemos algo al respecto, se encontrarán con un polígono de naves industriales que ha perdido su esencia de ser la cuna de la artesanía y el oficio de artista fallero”.
Originalmente concebida como casa del artista fallero, apenas la mitad de naves las ocupan hoy en día estos artesanos. El resto son alquiladas a negocios que poco o nada tienen que ver con la fiesta josefina. Este problema va unido al envejecimiento de sus habitantes que, a falta de relevo generacional, calculan que la Ciutat Fallera como tal dejará de existir en una década.
El decálogo, además, también plantea instar a la Consellería de Educación a que potencie las prácticas remuneradas en el Ciclo de Artista Fallero que se imparte en el IES Benicalap, así como mejorar la comunicación con el resto de la urbe significando las líneas 28 y 12 de la EMT, creando una parada del BUS TURISTIC e informando a las compañías de cruceros y operadores turísticos.
El objetivo de este 'business plan' es aprovechar el impulso de haber recibido la Medalla de Oro de la Ciudad, el pasado octubre, para celebrar sus 50 años. Además, el año próximo coincide con el 125 Aniversario de la Batalla de Flores y con la posible catalogación por parte de la UNESCO de las Fallas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.