VALENCIA. Cada vez son más las personas que quieren apuntarse a la moda sostenible, es el famoso movimiento llamado slow. Los diseñadores que identifican a esta marca son personas concienciadas con la moda que tratan de parar el abuso contra mujeres y niños. El detonante para impulsar este movimiento fue el 24 de abril de 2013, cuando se derrumbó un edificio de Bangladesh en el que se encontraban fabricas textiles de Mango, El Corte Inglés o Primark. El suceso acabó con la vida de 1.127 personas. A partir de esto, se creó el hashtag #whomademy cloth, que significa quién hace mi ropa, y se comenzó a extender el movimiento slow. Sin embargo, todavía no es suficiente y hay gente que sigue preguntándose cuáles son esas marcas sostenibles:
- The Circular Project Shop: es la primera marca sostenible que se creó en Madrid y está ubicada en la calle Ventura Rodríguez. El nombre de la tienda tiene el significado de la necesidad de una economía circular y su objetivo es que las materias primas utilizadas en las prendas sirvan después como alimento. La creadora es Paloma G.López, que tras catorce años trabajando en una multinacional decidió convertirse en una diseñadora de ropa que colaborase con la naturaleza. "La naturaleza ha perdido su capacidad de recuperación. Estamos en números rojos" asegura Paloma. Su tienda es la primera que cumple los tres requisitos: es tienda física, de moda y respeta el Medio Ambiente. ‘’Para que la marca sea sostenible tiene que cumplir un factor tanto ecológico como social. Por una parte, el tejido ha de ser orgánico, es decir, cultivado sin pesticidas ni herbicidas. Así se necesitará menos agua, menos luz. Por ejemplo, para realizar un pantalón vaquero se necesitan 20.000 litros de agua. Tendríamos que reducir al mínimo ese gasto", cuenta la diseñadora. Además, trabajan con talleres que están a punto de cerrar sus puertas y con la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida. Paloma crítica que algo que se fabrica en Pakistán no puede venderse en Madrid por diez euros. Es inhumano. Además, afirma que las prendas slow no son más caras sino que son de mayor calidad y aguantan mejor el paso del tiempo.
- Move to Slow: es una plataforma que conforma cincuenta marcas y en la que tan sólo utilizan materiales ecológicos. Sus creadoras son Mónica Melero y Rosa Bernier, que tienen la finalidad de acabar con la explotación de los niños en los países subdesarrollados. “La transparencia en esta cadena de valor nos hace poder ver realmente qué hay detrás de cualquiera de las prendas que llevamos puestas, una cuestión que la mayoría de las veces no nos cuestionamos”, cuenta Mónica. Si queremos cuidar el Medio Ambiente lo primero que debemos hacer es preguntarnos qué es lo que llevamos, de dónde viene y cómo afecta. Hay un problema para las marcas sostenibles en España y es que solo existe una empresa que trabaja con el algodón orgánico y está en Cataluña, de modo que el material suele ser bastante más caro. Una de las cosas que hacen los diseñadores sostenibles es acudir a los stocks de las grandes empresas y utilizar los materiales ya existentes que no se van a utilizar, es decir, si ya han creado algo que es malo para el Medio Ambiente, no se puede tirar, al menos hay que darle algún uso. Por otro lado, hablan sobre el comercio textil en otros lugares y aseguran que “producir fuera o en otros países no significa que todo este mal hecho, sino que las grandes empresas generalmente lo hacen mal, pero hay muchas marcas como Oxfam Intermon que tienen una marca de comercio justo en donde realmente pagan un salario honesto para incentivar también su industria local”. Si queréis ver todas las marcas con las que trabaja Move to Slow, aquí tenéis la web.
- Slow Artist: tienda de ropa sostenible situada en Castellón y creada por Tania Tárrega y Esther Segura. Se conocieron en el sector de las energías renovables y se volvieron a encontrar para el trabajo final del máster de sostenibilidad que Esther estaba realizando. Tania le ayudó a ella y surgió la idea de la marca. Lo más llamativo de Slow Artist es que los diseños son atemporales y trabajan con tejidos orgánicos y reciclados. Su lema es ‘Global Vision & Local Flavour’ y han ganado el premio a Mejor iniciativa empresarial en moda sostenible y Mejor proyecto en acción social y RSC. Sus prendas están caracterizadas por toques étnicos y tribales convirtiendo su colección en ropa exclusiva que además, transmite los valores de la marca. No solo cuentan con puntos de venta en España, también tienen tiendas en Munich y Londres, además de la shop online.
- Ecoalf: la marca sostenible de las celebrities. Ecoalf comenzó porque el fundador, Javier Goyeneche, observaba como estábamos consumiendo recursos naturales cinco veces más de lo que deberíamos y por ello utilizan los materiales más inusuales. "Esta vez la basura es la buena noticia. Nosotros utilizamos redes de pesca hasta botellas pet o restos de café", cuenta la marca. Además, aseguran que con tres trazas de café y setenta botellas de Politereftalato de etileno crean una chaqueta y con 253 gr de redes de pesca pueden obtener un metro de tejido. Imaginad lo que se puede llegar a conseguir con residuos. "Reciclando no seguíamos consumiendo recursos naturales y esto nos hizo enfocarnos en el desarrollo de nuevos materiales a partir de materiales de deshecho", asegura Carol Blázquez, directora creativa de Ecoalf. Su prenda por excelencia son las plumas Aspen debido a su apariencia unisex y es una tendencia entre los amantes del running. Esta marca está dando pasos agigantados ya que ha conseguido el setenta por ciento de reciclaje tanto en camisetas como en zapatos. También cuentan con la confianza de grandes marcas como Apple y están vendiendo fundas de portátil recicladas en Canadá y EEUU y próximamente lo harán en Asia y Australia. El objetivo a corto plazo de Ecoalf es personalizar su ropa y que la gente reconozca de inmediato a que marca pertenece una determinada prenda.
El primer desfile de moda sostenible en Madrid
El pasado mes de diciembre se celebró Let It Slow!, el primer desfile de moda sostenible en la calle Martín de los Heros. El encuentro fue idea de Paloma García, la diseñadora de la primera tienda de moda sostenible, The Circular Project Shop, que celebraba los 365 días haciendo un tipo de moda diferente y sana. Paloma consiguió reunir a más de cincuenta personas que sueñan con conseguir un futuro mejor para el planeta y los seres humanos. Había actores, modelos, artistas, músicos… Fue una oda a la libertad y al compromiso social. Participaron emprendedores como: Water Puppet, El Sinvivir, Diseño para el Desarrollo, Idunnbags, Mora Efron, Juana Barranco, Titamina, Patricia Guillén, Modubat,Sense Nu, Corktale, InkaPeru, dLana, Binta, Karland, Slow Artist, Urs My Bike, Zurda, Art &Seams y Lifegist. El músico que ponía la guinda al evento sostenible era Antonio Chávez. La diseñadora aseguró que cada persona había dejado un ‘trocito de su corazón’ en el desfile.