VALÈNCIA (EP). El sector cultural ha recuperado los niveles de empleo de los años prepándemicos, si bien aún no consigue recuperar las cifras de asistencia de esa época, lastrado por las restricciones sanitarias de aforo, según recoge la Encuesta de Hábitos y Prácticas Culturales en España 2021-2022 elaborada por el Ministerio de Cultura.
Este informe explica que los signos de recuperación también se reflejan en la última explotación de la Encuesta de Población Activa en el ámbito cultural. Así, los resultados indican que el empleo cultural anual -del tercer trimestre de 2021, al segundo trimestre de 2022- se sitúa en 705.400 personas, un 3,5% del empleo total en España en el mismo periodo.
Esta cifra supone la vuelta a los niveles prepandemia, con un ligero descenso del 0,7% respecto a la media de empleo cultural en 2019 y también supone un incremento del 2,1% respecto a 2021, y del 5,6% en comparación con la media de 2020.
Concretamente, se trata del empleo que se desarrolla en empresas dedicadas a actividades culturales, tales como edición, bibliotecas, archivos, museos, cinematográficas, vídeo, radio y televisión, o las artísticas y de espectáculos en vivo, entre otras.
Junto a ello, se contempla el empleo que se corresponde a ocupaciones con una dimensión cultural, escritores, artistas, archivistas o bibliotecarios.
La investigación por muestreo ha sido realizada por la División de Estadística y Estudios de la Secretaría General Técnica, dirigida a una muestra de 16.000 personas, de 15 años de edad en adelante, que ha sido seleccionada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Los indicadores de esta edición, cuyo periodo de referencia comprende desde marzo de 2021 a febrero de 2022, vienen aún afectados por la crisis de la COVID-19, confirmando así el fuerte impacto de la pandemia sobre el sector cultural.
Así, se observan todavía niveles de práctica cultural inferiores a los registrados en la edición anterior de la Encuesta, la correspondiente al periodo 2018-2019, que arrojó máximos de participación cultural en todas las categorías.
A causa de las restricciones de movilidad y aforo por las medidas sanitarias, el estudio confirma que el descenso afectó con mayor intensidad a los espectáculos en directo de artes escénicas o musicales, cuya tasa anual se situó en el 19,9%, frente al 46,8% registrado en la edición anterior.
Las tasas anuales de asistencia a monumentos o yacimientos se situaron en el 28,2% (desde el 50,8%), comportamiento análogo a la asistencia a museos, exposiciones o galerías de arte, con una tasa de asistencia del 25,5% (46,7% en su edición anterior).
Más lectura digital, menos pirateo
Asimismo, crecen la lectura en formato digital y las suscripciones a plataformas Destaca en la Encuesta de Hábitos y Prácticas Culturales en España 2021- 2022 el favorable comportamiento de la lectura, con una tasa de lectores anuales en el periodo estudiado del 61,7%, tasa cercana al 65,8% estimado entre 2018 y 2019. También sube 4 puntos en la lectura en formato digital, con una tasa anual del 24,4%.
Además, se registran descensos de menor intensidad en la asistencia presencial o virtual a bibliotecas: el índice fue del 18,4% en el periodo 2021-2022, frente al 26,8% en el periodo 2018-2019. El estudio observa notables aumentos en las suscripciones a las plataformas digitales de productos culturales, mientras que las descargas ilegales evidencian un descenso generalizado.
Música, películas y series en el confinamiento
De forma excepcional, la encuesta ha incluido un módulo dedicado a conocer los elementos esenciales de la práctica cultural en el periodo de confinamiento nacional (del 15 de marzo al 31 de mayo de 2020).
Las actividades más frecuentes fueron ver películas, series o escuchar música, actividades que realizaron en este periodo el 90,8% de los investigados (el 81,3% y el 86,4%, respectivamente).
Más de la mitad de los investigados leyeron al menos un libro en este periodo, el 56,1% (el 25,6% por motivos vinculados a la profesión o estudios, y el 49,8% por ocio o tiempo libre).
Casi el 20% de la población investigada, el 17,9%, jugó a videojuegos en este periodo.