Empieza la carrera por la renovación de la UPV tras la caída del candidato reformista

VALÈNCIA. Comienza la cuenta atrás en la segunda vuelta de campaña para las elecciones a rector de la Universitat Politècnica de València (UPV), en las que José Manuel Barat y Pepe Capilla se disputarán el cargo. En la primera vuelta los dos candidatos hicieron gala de su veteranía en la gestión de la universidad, pues fueron vicerrectores en la última legislatura. Ahora, con los segundos comicios a la vuelta de la esquina, llevan por bandera la “renovación” y el “cambio”, unos valores esgrimidos por Ángel Ortiz, que quedó fuera por menos del cinco por cien de los votos.   

Así, la recta final de esta última vuelta electoral se convierte en una carrera de fondo por la transformación que se verá reflejada en el debate de este miércoles, en el que ambas candidaturas se centrarán en la captación del voto del 30,9% del electorado que apoyó a Ortiz. Con este propósito en mente, Capilla modifica su lema y añade que “es el momento del cambio”, puesto que considera que su candidatura “no es en absoluto continuista” y “responde a una necesidad que se manifestó en la primera vuelta, que es la renovación total de todos los responsables de la actual gerencia”.

En este sentido, explica a Valencia Plaza que su equipo “es completamente nuevo, mientras que el de Barat incorpora cinco vicerrectores del pasado”. Por su parte, este último hace hincapié en que su candidatura es “garantía de un cambio sensato” y, bajo un argumento similar al de su rival, afirma que si este ganase los comicios “sería como volver al pasado”, pues “el principal elemento renovador tiene que ser el rector y él ya lleva doce años en el cargo, yo llevo cuatro”, recalca.

Por tanto, en esta segunda vuelta que se celebrará el 18 de mayo, la experiencia en la administración pasa a un segundo plano y entra en juego la capacidad de materializar nuevas propuestas, entre las que hay “ideas de algún otro candidato”. En concreto, Capilla encuentra “gran coincidencia con el programa de Ortiz”, por lo que su equipo incorporará reformas que considera “interesantes” y las presentará a lo largo de la campaña. Del mismo modo, Barat afirma que “coinciden en muchos aspectos”, por lo que trabajan “para convencer a su electorado”.  

Con todo, el catedrático eliminado determina que sus proyectos “no son compatibles” con el modelo que plantean los otros dos aspirantes y no se postula en favor de ninguno, pese a que asegura que los equipos de ambos se aproximaron el miércoles pasado a miembros de su grupo a través de las redes sociales, para ofrecerles la incorporación a su campaña y, aunque ninguno de los nueve integrantes aceptó, Ortiz indica que respetaría su decisión en caso de que lo hicieran. 

Apoyos entre la comunidad universitaria

En este punto, la línea de los programas electorales continúa en la misma dirección, ya que los candidatos se centran en reforzar los pilares de sus propuestas, sustentados en gran medida por el alumnado. Se trata del electorado más numeroso -con más de 26.700 integrantes- cuyo voto es el menos predecible, por lo que Capilla destaca la importancia de “dirigir el mensaje al estudiantado con más claridad”. 

A su vez, este colectivo es una de las principales apuestas de Barat, por lo que da un paso más y propone a Mareva Alemany, subdirectora de innovación educativa de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería industrial (ETSI), como nueva aspirante a vicerrectora de Innovación y Calidad, un nuevo departamento que “demuestra la voluntad de ambición de mejorar la metodología docente y sistemas de evaluación”, explica el catedrático a este diario.

En cuanto al profesorado asociado, es un sector que por el momento se muestra en favor de Capilla -así lo manifiesta en el semáforo de evaluación, similar al del alumnado-, dado que este incluye en su programa propuestas concretas sobre el pago de trienios y el reconocimiento curricular de quinquenios y sexenios a todo el personal docente e investigador (PDI), mientras que Barat las plantea como medidas parciales.  

Así, aunque ambos apuestan por la dignificación de esta figura, Barat plantea su limitación a situaciones “estrictamente académicas”, mientras que Capilla cuenta con un mayor número de compromisos con este grupo. Con todo, quedan reuniones pendientes con vistas a estas elecciones, en las que los candidatos podrán aceptar nuevos planteamientos. 

Respecto al personal de administración y servicios (PAS), su voto puede resultar decisivo en esta segunda vuelta, teniendo en cuenta que fue el colectivo que más soporte brindó a Ortiz con un total de 482 votos, tan solo dos menos que a Barat, mientras que en este caso fue Capilla el que menos apoyo recibió, con 394 votos.