Museo de la Universidad de Alicante

'Inestablos' aúna arte y ciencia a través del cerebro humano

19/11/2016 - 

ALICANTE, (EFE). El artista Lidó Rico ha desarrollado la exposición "Inestablos", una muestra de escultura que aúna ciencia y arte con el objetivo de representar el complejo mundo de las adicciones y para la que ha utilizado moldes creados a partir de cerebros humanos reales.

La exposición, que se puede ver en el Museo de la Universidad de Alicante, se enmarca dentro de su proyecto "Genoarquitecturas", en el que el artista viene colaborando desde hace más de tres años con el neurofisiólogo Kuei Y. Tseng, de la Rosalind Franklin University de Chicago, y el neurobiólogo José Luis Ferrán, de la Universidad de Murcia.

A través de 20 obras escultóricas de gran formato, acompañadas por muestras auditivas del sonido de un cerebro, Rico intenta transmitir una nueva mirada sobre la inconsciencia de las adicciones menos reconocidas socialmente, como pueden ser a las nuevas tecnologías, a los fanatismos, al poder, al sexo o a la violencia en su forma más amplia.

Este artista conceptual lleva casi treinta años elaborando un discurso artístico basado en su propio cuerpo ya que, tal y como él mismo ha explicado en una entrevista concedida a Efe, su ilusión es trabajar la realidad y alejarse de lo establecido.

Cuando su cuerpo se quedó "pequeño" para seguir utilizándolo como molde para sus esculturas, surgió la posibilidad de trabajar con cerebros humanos cedidos por la Universidad de Murcia. Su motivación en este trabajo la ha explicado así: "todo lo blando es finito y se acaba; pero es en el cerebro, a pesar de ser blando, donde se hospedan los conceptos y las ideas, que son, a su vez, la fuerza del hombre".

De hecho, el análisis de los comportamientos humanos da opción a expresar en una obra multitud de sentimientos o estratos, como por ejemplo el político, según ha detallado. Si bien ha reconocido que trabajar con cerebros humanos es "un tema muy delicado", además de la dificultad por obtener los permisos necesarios, ha querido destacar que ninguna muestra se ha deteriorado ni dañado.

Sinergias

Sobre la relación del arte con la ciencia, Rico ha defendido que para que el primero avance "debe de establecer sinergias con otras disciplinas", ya que "no se puede vivir de espaldas a la realidad". "Nos empeñamos en que todo está desconectado, pero no; al final, todo busca lo mismo, al hombre y el ejercicio de mejora de su vida", ha añadido.

A pesar de la complejidad de su trabajo, Rico ha rechazado la idea de que su obra tenga un carácter exclusivo para con la gente de a pie, una crítica habitual a los trabajos artísticos. De hecho, se ha mostrado muy crítico con la gestión del arte en España y ha opinado que "se aloja en guetos, en la mentira, en un hotel de la endogamia".

"El arte contemporáneo español se ha encargado de alejar a la gente normal, estableciendo una especie de supremacía mental; tiene un problema de soberbia que odio y que hace mucho daño a los artistas", ha agregado. También ha defendido que el arte "no debe ser invasivo", sino plantear "un primer encuentro con una realidad diferente" donde cada espectador pueda ser capaz de complementarlo.b"Es algo así como el concepto de una obra abierta, pero es que, ninguna obra puede ser cerrada", ha proseguido.

Durante la inauguración celebrada ayer, Rico realizó, junto al músico Piccadilly (Tomás Martínez), una performance denominada "Brain Session" que forma parte de un proyecto audiovisual basado en sonidos neuronales de los distintos estados emocionales que se producen en el cerebro, recopilados por el citado neurofisiólogo Y. Tseng.

Junto a la exposición se ha programado en la UA el ciclo de conferencias "Arte, comunicación y cerebro humano", organizado por el profesor Enric Mira, y que se desarrollará entre el 28 y el 30 de noviembre.