VALÈNCIA. Mariana Pineda tuvo una vida breve y una muerte injusta, pero se convirtió en un mito y en un símbolo de la libertad. Sus creencias políticas la llevaron a ayudar y acoger en su humilde hogar a distintos miembros del partido liberal perseguidos durante los tiempos del absolutismo de Fernando VII y su ejecución, que pretendía ser un escarmiento y un aviso a la causa liberal, convirtió a Mariana en víctima y mártir. Silenciada durante los gobiernos absolutistas, ensalzada bajo gobiernos liberales y progresistas, la figura de Mariana Pineda se convirtió en una inagotable fuente de inspiración para poetas y dramaturgos, entre ellos, Federico García Lorca, que escribió una obra de teatro en la que recreó su vida.
La Mariana Pineda de Lorca, es una mujer profundamente enamorada, a la que ese mismo amor arrastra como un torrente por encima de los ideales políticos que defiende. No importan las razones que impulsan a Mariana Pineda a revelarse contra un sistema injusto, lo que importa, en definitiva, y por eso su nombre ha pasado a nuestra historia como un verdadero símbolo de resistencia frente a la injusticia, son sus acciones. Mariana Pineda, como tantos otros personajes históricos o ficticios, se mueve por amor, un amor tan intenso y tan puro, que ni siquiera intenta ofrecer resistencia, y que le dota del valor, la valentía y la dignidad para defender unos ideales hasta la muerte. Lorca, a través de esta mujer, nos hace ver que tan sólo existen dos tipos de personas en el mundo, aquellas dispuestas a seguir sus certezas hasta el final y aquellas que, a la hora de la verdad, cuando todo comienza a complicarse, prefieren esconderse.
Versionada y dirigida por Javier Hernández-Simón, cuenta en el reparto con actores de la talla de Laia Marull, Alex Gadea y Fernando Huesca. La función será el viernes 22 de noviembre a las 20.30 horas.