VALÈNCIA (EP). La escritora Sara Desirée Ruiz firma su primera ficción, Lo que dejan las madres (Planeta), donde muestra una trama en la que las "mujeres fuertes" son protagonistas. "Las mujeres sobrevivimos gracias a la sororidad, gracias a vernos y a escucharnos, a veces desde la complicidad del silencio", ha explicado la autora en una entrevista con Europa Press. El 'thriller' también pasa por la historia de las personas menores de edad que viven en centros de protección a la infancia y a la adolescencia en riesgo de exclusión, y para eso Ruiz ha tenido que abordar temas como "soledad" o el "abandono".
"Cuando eres adolescente necesitas mucho acompañamiento, una estructura. Cuando estás creciendo y desarrollándote necesitas una familia, un entorno que pueda darte apoyo, que pueda brindarte oportunidades, que pueda cubrir tus necesidades a todos los niveles y eso no pasa muchas veces con estas infancias, estas adolescencias que viven en estos centros. Hay mucha soledad, hay mucha injusticia, muchas carencias y son personas muchas veces muy luchadoras a las que la vida les ha dado unas cartas no muy agradables", añade.
Por eso, Ruiz es no está "para nada de acuerdo" con llamar "generación de cristal" a los jóvenes actuales, y ha celebrado que son "la primera generación" en la que se habla de "emociones y salud mental", algo que merece la denominación de "generación de diamante". "Son más conscientes de las relaciones y de la responsabilidad afectiva, de la diversidad. Al final no nos olvidemos que quienes estamos educando y acompañando somos personas adultas que hemos crecido en otras generaciones y que tenemos otras creencias, pero se habla mucho de 'la generación de cristal' y no estoy para nada de acuerdo (...). Opinar sobre cómo están las condiciones de trabajo, si tú no quieres trabajar 8.000 horas y llegar a tu casa hecha polvo y así día tras día, es importante", ha explicado.
Después de haber abordado en sus libros temas sobre adolescentes, relaciones familiares y crecimiento personal, Ruiz, que además es educadora social, se ha estrenado en una novela que ha escrito "con conocimiento de causa". "El sistema de protección a la infancia y a la adolescencia es algo que conozco muy bien de primera mano. Me permitió entrar en la historia rápidamente con conocimiento de causa. Mi parte de educadora me ha permitido hacer una historia que tuviera que ver con mi trabajo y con esas realidades que no vemos. Quien se acerque a la novela se va a encontrar con un fuerte componente de crítica social", ha concluido.