VALÈNCIA. El Teatro Escalante está cada vez más cerca de tener sede, tras años deambulando por distintos espacios de la ciudad. Fue a principios de mes cuando la Diputación de València se reunió con las principales asociaciones del sector de las artes escénicas para plantearles las tres opciones que baraja, tras años de indefinición. Entre ellas, de hecho, está la de volver al teatro que tuvieron que abandonar por los problemas en el inmueble, situado en la calle Landerer. Y esta parece que empieza a dibujarse como la favorita. “Los ciudadanos no podemos permitirnos el lujo de perder el referente que supone el edificio del Centro Teatral Escalante que, a lo largo de 30 años, ha conseguido convertirse en un referente estatal del teatro infantil y juvenil”.
Así lo expresan en un comunicado desde el Sindicat d'Actors i Actrius Professionals Valencians (AAPV), que abogan por un regreso a la sede original –sobre la que habría que acometer obras- tanto por su sentido simbólico como por la conexión que supone estar cerca a numerosos espacios culturales, entre ellos el Teatre Talía. “No nos podemos permitir perder un teatro histórico, patrimonio de todos y todas los valencianos y por muchas razones pensamos que, definitivamente, el proyecto Escalante debe volver donde fue parido, la calle Landerer”, defienden desde la asociación, quienes aplauden que tras años sin solución se empiece a dibujar un futuro estable para el teatro. "Nos alegra muchísimo que después de seis años asimilando que era imposible la recuperación de la sede histórica del Escalante, encontremos ahora como una de las tres opciones".
Aunque los actores y actrices se decantan por esta opción, no es la única que está sobre la mesa y sobre la que se debatirá próximamente en una nueva reunión entre la administración provincial y las asociaciones. Otra posible alternativa es la recuperación del espacio escénico del IVAF, propiedad de la Diputació, que cuenta con una buena accesibilidad para vehículos pesados y parada de metro cercana, además de un amplio espacio ajardinado. La tercera posible sede sería un edificio de nueva construcción en el solar que la Diputació tiene en propiedad en la calle Tomàs i Martí, cerca del Palau de Congressos.
A pesar de que todavía no se ha tomado una decisión final, con la concreción de las posibles sedes se empieza a dar respuesta tras años de incógnita. En este tiempo, de hecho, no han sido pocas las propuestas que se han planteado, aunque ninguna de ellas ha llegado a estar en el listado final. Entre ellas, ubicarse en La Marina, planteado por la Diputación en la pasada legislatura, o una de las naves de Ribes, propiedad del Ayuntamiento de València. El proyecto, cuya apertura se ha retrasado dos años con respecto al calendario previsto, no solo era una idea, sino que el propio alcalde, Joan Ribó, desveló hace apenas unos meses que se había planteado “traer de alguna forma” el Escalante a la nave, un proyecto que, sin embargo, admitía que estaba “un poco congelado por el tema del coronavirus”. Finalmente, ninguna de estas dos opciones ha salido adelante.