presentado por la generalitat

Luz verde al plan del arte rupestre valenciano

2/12/2019 - 

VALÈNCIA (EP). El nuevo plan de gestión del arte rupestre de la Comunitat Valenciana arranca para potenciar y proteger el esplendor y el entorno de los 610 yacimientos de las tres provincias, junto a otros objetivos como "repensar" la oferta turística o aumentar las visitas de estudiantes.

Entre las medidas previstas se plantea estudiar cada abrigo rupestre por separado y su delimitación en función del entrono, en lugar de "cierres que parecían gallineros", la creación de caminos para "evitar destrozos urbanísticos" y una cartelería uniforme que no sea un "batiburrillo". Y, sobre todo, conservar los yacimientos en buen estado ante la aparición de grafitis, las perdigonadas de cazadores o los robos.

"El arte rupestre tiene sentido solo donde está, nunca en los museos", ha ilustrado el catedrático de Prehistoria de la Universidad de Alicante (UA) Mauro Hernández, uno de los coordinadores de la publicación. La presentación del plan, en el Monasterio de San Miguel de los Reyes de València, ha contado con el director de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, Román-Fernández Baca, profesores, investigadores y alcaldes de localidades con arte rupestre.

El plan, publicado este lunes por la Generalitat y a desarrollar en el futuro, marca líneas de actuación y condiciones y actualiza los yacimientos: de los 302 identificados en 1998, cuando se declaró al arte rupestre del arco mediterráneo como Patrimonio de la Humanidad, a los 610 actuales. Parte de un diagnóstico pormenorizado hasta un programa de acción territorial como una estrategia global, ante la dispersión de los enclaves rupestres a lo largo de la Comunitat.

Para una mejor conservación, establece los protocolos de actuación con acciones directas, como limpieza o restauración, y preventivas, referidas a cierres y vallados, acondicionamiento de accesos y normas de actuación ante emergencias por efectos naturales e incendios forestales. Los cerramientos no serán uniformes y se adaptarán a cada lugar, al hilo del reciente modelo de La Sarga de Alcoi (Alicante).

También plantea la difusión y puesta en valor de los yacimientos con itinerarios, musealización de entornos, didáctica y visitas en base a la categoría de cada lugar (abierto al público, restringido a investigadores o cerrado). Otra propuesta es la posible creación de un parque cultural por provincia, como el de la Valltorta en Castellón, y la reflexión sobre "qué es oferta turística y qué no".

Contra la despoblación

En la misma línea, el plan presta atención a las zonas despobladas, con la meta de "rescatar toda una vida y costumbres" de las que cuentan con arte rupestre, como Les Coves de l'Aranya de Bicorp (Valencia), y a la educación, para que los yacimientos se conviertan en un "lugar de docencia".

En materia de sostenibilidad, apuesta por una mayor transversalidad entre las leyes medioambientales y de patrimonio, un mejor control de los usos, protocolos "rigurosos" y más medidas de investigación, conservación, puesta en valor y educación. También por programas de cooperación territorial entre comunidades autónomas.

De cara a futuros inventarios, propone elaborar unas fichas con la descripción detallada del yacimiento y cuestiones como sus factores de riesgo y el grado de afección. Las manifestaciones artísticas están clasificadas en Paleolítico, Macroesquemático, Levantino, Esquemático y Artes históricos.

Como directora general de Cultura, Carmen Amoraga ha reafirmado el compromiso del Gobierno valenciano con el Carampi, que precisamente se reúne este lunes por la tarde, ante la importancia del arte rupestre como "motor económico y referente internacional".

La Comunitat Valenciana se convierte así en la primera autonomía del Mediterráneo que responde al compromiso adquirido por la Generalitat en el Consejo de Arte Rupestre del Arco Mediterráneo de la Península Ibérica (Carampi), celebrado en València en mayo de 2018 conforme a las indicaciones del Consejo del Patrimonio Mundial. La Unesco declaró hace 21 el arte rupestre del Mediterráneo como Patrimonio Mundial.