CULLERA. Medusa, el festival de música electrónica más multitudinario de España, ya ha anunciado las fechas de su próxima edición. Se celebrará los días 7, 8, 9, 10 y 11 de agosto de 2025 — de jueves a lunes— en su localización de siempre, en la Playa de Cullera.
Las organización aún no ha desvelado ningún detalle sobre el cartel artístico que pondrá en liza en verano que viene, pero su departamento de contratación lleva varias semanas trabajando para cerrar un avance de nombres “muy, muy potente” para las próximas semanas. También hay fecha para la apertura de la venta online de abonos: será el miércoles, 6 de noviembre.
En Medusa 2025 volverán a sonar todos los subgéneros de la música electrónica. Este afán aglutinador de la cultura dance (EDM, Techno, House, Hard Techno, Hardstyle, Trance, Remember, Bass…) es uno de los secretos el éxito de Medusa desde su creación en 2014. Todas las tribus nocturnas y varias generaciones de amantes del baile de la geografía española se sienten representadas y hallan su hueco en el macroevento de Cullera.
Lo que sí ha revelado Medusa es su temática para 2025. Desde hace 10 años, el equipo creativo del festival ha sorprendido año tras año con propuestas narrativas y gráficas que ya forman parte del ADN del evento. El verano que viene la fantasía se llamará ‘Arcade Land’ y será en un retorno emotivo a la época dorada de los videojuegos y las salas recreativas de los años 80 y 90.
Precisamente, en 2025 se celebra el 40º aniversario del lanzamiento de Super Mario Bros, un juego que marcó una época para toda una generación. Las salas de máquinas arcade eran el centro de la vida social en muchos barrios, así como un espacio de fascinación tecnológica y futuro. ‘Arcade Land’ viajará a un universo que con- tendrá elementos de Mario, pero también de otros videojuegos emblemáticos como Tetris, Pac-Man, Space Invaders o Donkey Kong.
Los ecos del éxito de la reciente edición, el pasado mes de agosto, aún no se han apagado. El 10º aniversario fue una celebración colosal en términos de organización, ambiente festivo y calidad de la programación. El consenso en el seno de la comunidad musical es que Medusa ya reina en solitario como rey indiscutible de la electrónica de nuestro país. 180.000 personas asistieron la zona de conciertos durante 5 días y, además, cerca de 10.000 personas vivieron la experiencia durante esos días desde la zona de acampada.
Una década de Medusa ha servido para renovar, rejuvenecer y reforzar la estructura del tejido turístico, hostelero y comercial de la ciudad, y el festival tiene el compromiso de seguir contribuyendo en esa dirección.