VALÈNCIA. "A mi padre, Joaquín, le diagnosticaron un cáncer terminal a comienzos del año pasado. Durante cuatro semanas lo acompañé durante su viaje de retorno junto a su familia, también mía. Pocos días después de que muriera, sentí que iba a necesitar transformar mi proceso de duelo mediante la creación". Así empieza a contar el documentalista Raúl Riebenbauer su nuevo proyecto, Yo fui Anderssen. Su nuevo cortometraje ya está listo para viajar y el cineasta ha recurrido al micromecenazgo para financiar los costes que supone las selecciones en festivales internacionales.
La campaña estará abierta durante los próximos 40 días y espera acumular un total de 2.500 euros.