VALÈNCIA (EP). El Teatre El Musical de València acogerá este sábado Erritu, un espectáculo que nace de la colaboración entre la compañía vasca Kukai Dantza y el coreógrafo israelí Sharon Fridman y que propone un "viaje vital" para atrevar "mediante ritos de paso individuales y colectivos los distintos estados de la vida en relación con la naturaleza y con la comunidad". La pieza forma parte de la programación del Festival Dansa València que comienza este martes. El público de El Musical podrá ver a las 22 horas una pieza "nominada como mejor coreografía en los premios Max 2019", ha destacado el teatro en un comunicado.
Erritu propone un recorrido por los "estados vitales que van desde el nacimiento al caos, pasando por el desierto de la soledad, hasta llegar al encuentro, el amor y, finalmente, la muerte". Los ritos ejercen en este caso de puentes para intentar descubrir el "sentido de las conexiones entre la existencia individual, cargada de pasado, presente, promesas de futuro y opciones, y la experiencia colectiva ritualizada, siempre referencial pero también en movimiento y cambio".
El coreógrafo Sharon Fridman ha destacado que, "hoy como ayer, los ritos proponen un acercamiento a lo puro, a la escucha, a los espacios que nos pueden acercar a las respuestas, al amor, a las raíces", explica Sharon Fridman. "Espiritualidad, ternura y decisión personal se dan la mano en este viaje que, al final, resulta colectivo pero influido por las trayectorias de los más conscientes", ha avanzado.
Por su parte, el director del proyecto, Joan Maya Sein, ha expresado: "Siempre pienso en esas danzas, cantos, espacios que te emocionan al ver, oír o respirar. Rituales, de siempre, y casi no sabemos de cuando, pero que prevalecen en nosotros aquí y ahora. Y que siempre nos hacen sentir".
Bajo esta premisa, Erritu "nace de las ganas de profundizar y reflexionar en estas danzas, melodías, espacio y de querer unirlas en un espacio-tiempo donde el público también sea cómplice de ese sentir y donde el espacio de representación sea tan único como el momento creado y vivido", ha indicado, antes de resaltar la "armonía entre danza, música coral y arquitectura".
El trabajo de Fridman ofrece a los bailarines de Kukai una nueva fisicalidad y calidad de movimiento basada en el 'contact', que "contrasta y complementa ricamente con la pureza y vitalidad de sus movimientos habituales". La pieza cuenta con seis bailarines sobre el escenario con Eneko Gil, nominado por este trabajo al premio Max como mejor intérprete masculino de danza, Nerea Vesga, Urko Mitxelena, Izar Aizpuru, Alain Maya e Ibon Huarte. El responsable de la música es Luis Miguel Cobo. El diseño de vestuario es obra de Ikerne Jiménez y la iluminación de David Bernués.
Kukai Dantza nació en 2001 por iniciativa del bailarín y coreógrafo Jon Maya. La compañía que recibió el Premio Nacional de Danza en 2017, desarrolla su trabajo a partir de la danza tradicional vasca; proponiendo encuentros con otros estilos de danza y formas de entender el arte. Por su parte, Sharon Fridman, israelí afincado en Madrid, comenzó su trayectoria como bailarín en 1999 cuando ingresó en la prestigiosa compañía Ido Tadmor Dance Company. Formaciones internacionales como el Ballet Nacional de Paraguay, LaMov Compañía de Danza (España), Vertigo Dance Company (Israel), Compagnie Jus de la Vie (Suecia), Theater Bielefeld (Alemania) o la Compañía Nacional de Danza (España) tienen en su repertorio creaciones suyas. La pieza forma parte del programa oficial del Festival Dansa València que comienza este martes y que prolongará hasta el domingo 14 de abril.