VALÈNCIA. La Dana del 29 de octubre arrasó buena parte del tejido industrial de la provincia de Valencia, pero también evidenció algo menos visible: la falta de preparación ante una emergencia de este calibre. Sin protocolos claros, sin coordinación entre empresas y administraciones y con muchas decisiones improvisadas.
Esa es la principal advertencia que lanza el informe "Dana: Lecciones aprendidas", presentado este jueves por la Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (Femeval) y el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales (Cogiti) a la Conselleria de Industria. Un documento que recoge trece propuestas concretas para evitar que el caos vuelva a repetirse.
El acto, celebrado en la sede de Femeval y con la asistencia de la propia consellera, Marian Cano, como receptora del informe, ha servido para lanzar un mensaje claro: no se puede volver a improvisar. "Tenemos que ir un paso por delante. Las actuaciones deben estar claras, definidas y coordinadas entre todos los niveles de la sociedad. No podemos permitirnos más dudas cuando se produce una emergencia", ha afirmado el presidente de la federación, Vicente Lafuente.
De hecho, una de las principales conclusiones del informe es la urgente necesidad de redefinir los planes de emergencia que manejan actualmente las empresas, muchas veces en solitario, sin conexión entre ellas ni con los ayuntamientos o las entidades gestoras de los polígonos industriales.

- Femeval y Cogiti Valencia entregan a la Conselleria de Industria un informe con 13 propuestas tras la Dana de octubre. -
- Foto: FEMEVAL
Durante la presentación, Lafuente ha relatado cómo, pocos días después de la catástrofe, la llegada de una nueva alerta roja volvió a sembrar la confusión. "Recibíamos llamadas de empresarios que no sabían si debían abrir, si sus trabajadores podían acudir, si lo más seguro era quedarse en la nave o volver a casa. Esa incertidumbre no puede repetirse. Seguimos sin saber cómo actuar cuando suena una alerta", ha explicado el presidente de Femeval.
Para Lafuente, la solución no pasa únicamente por reforzar los protocolos existentes, sino por repensar el modelo completo de actuación ante emergencias. "Esto no es solo una cuestión de industria. Es una cuestión de sociedad y, por tanto, requiere un enfoque transversal. Hay que hacer pedagogía en los colegios, en las empresas, en los municipios y coordinar todo en red", ha añadido.
Una cultura preventiva que no existe
En la misma línea se ha expresado el decano de Cogiti Valencia, Tomás Játiva, quien ha insistido en que la clave no es solo técnica, sino también cultural y formativa. "A los niños se les enseña qué hacer en un simulacro de incendio. Pero cuando crecemos, se nos olvida. En las áreas industriales muchas veces se redacta un plan de emergencia y se archiva. No se practica, no se coordina. Eso no sirve de nada", ha lamentado Játiva.
Por ese motivo, el informe presentado reclama que los planes de emergencia se elaboren de forma coordinada, que incluyan simulacros periódicos y que se integren en una estructura supramunicipal, con participación activa de las Entidades de Gestión y Modernización (EGM), los ayuntamientos y la Generalitat Valenciana. "Si cada empresa tiene su plan pero nadie conoce el del otro, acabamos todos yendo en direcciones opuestas. Eso es un riesgo grave", ha alertado el decano.
Así, la propuesta de Femeval y Cogiti Valencia se articula en torno a un principio de corresponsabilidad social en la toma de decisiones, que implica también a los trabajadores, a la ciudadanía y a las administraciones locales. "Tenemos que dejar de pensar que esto es solo responsabilidad del Estado o de la Generalitat. Es de todos. Y todos debemos saber qué hacer", ha apuntado Játiva.
Compromiso institucional, pero sin un marco normativo claro
Por su parte, la consellera de Industria, Marian Cano, ha agradecido la elaboración del documento y ha asegurado que será una base de trabajo importante para su departamento, en colaboración con otras consellerias implicadas, como la de Recuperación o Emergencias. Cano ha reconocido que muchas de las recomendaciones del informe coinciden con las líneas de actuación que ya está siguiendo el Consell, pero ha admitido que falta desarrollo normativo.
"La simplificación administrativa y la colaboración público-privada son ejes fundamentales para nosotros", ha señalado la consellera, quien también ha recordado la complejidad que supuso recuperar la movilidad en las fincas con ascensores averiados o reestablecer el suministro eléctrico. "Esta experiencia nos ha demostrado que debemos formar a más profesionales, mejorar los protocolos y acercar los suministros básicos a los municipios. Hay mucho margen de mejora", ha añadido.
La consellera ha asegurado que parte de las propuestas del informe se integrarán en el Plan ARA Empreses, que busca acelerar la recuperación y modernización de las áreas empresariales afectadas por la Dana. "Vamos a seguir trabajando con el tejido productivo para garantizar que estas situaciones se gestionan mejor en el futuro", ha concluido.

- Informe con las 13 propuestas de Femeval y Cogiti Valencia tras la Dana. -
- Foto: FEMEVAL
"No queremos que esto acabe en un cajón"
Femeval y Cogiti Valencia han insistido en que el informe no puede quedarse en una declaración de intenciones. "Hemos recogido experiencias reales, propuestas viables y un trabajo técnico riguroso. No queremos que esto acabe en un cajón. La próxima vez no podemos volver a improvisar", ha advertido Lafuente.
El informe subraya la necesidad de crear una cultura preventiva que no existe todavía, de dotarse de herramientas normativas adecuadas y de actuar con rapidez y realismo. Porque, como ha señalado el presidente de Femeval, "hay mucho en juego y no podemos permitirnos más errores. La próxima vez, tenemos que estar preparados".