VALÈNCIA. El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha conseguido atraer a un nuevo aliado en su lucha por recuperar el crédito perdido por la gestión de la Dana acaecida el 29 de octubre del año pasado, que causó 229 víctimas mortales y terribles daños en la provincia de Valencia.

A lo largo de estos meses, uno de los problemas del jefe del Consell ha sido la nula sintonía con tres de las principales asociaciones de víctimas: la Associació de Víctimes Mortals de la DANA 29-O, la Associació de Víctimes de la DANA 29 d’octubre de 2024 y la Asociación Damnificados DANA Horta Sud Valencia. Una serie de entidades que han exigido su dimisión en repetidas ocasiones, además de negarse a una reunión con el presidente salvo que cumpliera con condiciones como la presencia de los medios de comunicación en la cita.

Prueba de esta distancia con estas organizaciones, que congregan a cientos de asociados y que han tenido mayor presencia mediática, la Associació de Víctimes Mortals de la DANA 29-O y la Associació de Víctimes de la DANA 29 d’octubre de 2024, decidieron no acudir este martes a la presentación del proyecto de parques inundables liderada por el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus.

No obstante, esto no ha frenado la iniciativa de Mazón para buscar conexiones con otras asociaciones, que incluso pasen a ser aliadas, como ocurrió este miércoles con el encuentro celebrado con el presidente de la organización murciana SOS Desaparecidos, Joaquín Amills.

Cabe recordar que esta fue la primera asociación que se reunió con el jefe del Consell, concretamente en el mes de marzo. En aquel momento, representaba a 80 víctimas mortales, pero el encuentro celebrado con Mazón provocó una importante disensión dentro de sus miembros, lo que concluyó en la escisión de decenas de familiares de casi 40 víctimas mortales que terminaron por impulsar la Associació de Víctimes Mortals de la DANA 29-O, presidida por Rosa Álvarez.

Curiosamente, en aquella primera cita, Amills aseguró haberle pedido a Mazón su dimisión y que declarara en el juzgado de la Dana, un discurso diametralmente opuesto al que esgrimió este miércoles tras la reunión con el jefe del Consell, al señalar que sería "contraproducente para Valencia" que el presidente renunciara. "Lo más cómodo para Mazón sería marcharse, pero entiendo que debe asumir su compromiso y estar al frente y defender aquello en lo que cree", explicó el presidente de SOS Desaparecidos, organización que, tras la marcha de algunos de sus representados, defiende ahora los intereses de en torno a 86 familiares de 35 víctimas mortales de la Dana.

Un cambio de posición que permite al jefe del Consell una mejora discursiva en tanto en cuanto lejos de pedir su dimisión, la citada organización se muestra comprensiva e incluso defiende su continuidad al frente de la Generalitat. Más aún cuando Amills, en sus declaraciones posteriores al encuentro, donde recalcó que su organización "no acepta dinero de nadie", acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de haber "vetado" a SOS Desaparecidos. "Fue doloroso que se reuniera con todas las asociaciones y que a nosotros nadie nos llamara", señaló, para calificarlo de "una ofensa tremenda", si bien comentó que tras expresar su malestar recibió una llamada de la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, para reunirse este mismo jueves por la tarde.