VALÈNCIA. Sagunto, la ciudad que un día fue disputada entre romanos y cartagineses, es hoy uno de los enclaves del sector del automóvil en la Comunitat Valenciana. En esta entrevista con Valencia Plaza, el alcalde de la localidad, Darío Moreno (Alcoi, 1988), repasa los principales asuntos que preocupan al consistorio en materia industrial, social y medioambiental.
La capital de Camp de Morvedre, bajo las siglas del Partido Socialista del País Valencià (PSPV-PSOE) por segunda legislatura consecutiva, cuenta con un perfil internacional a su cabeza. Licenciado en Derecho y especializado en Comercio Internacional, Moreno formó parte de Naciones Unidas en Nueva York entre 2015 y 2018, año en que decide volver a la Comunitat Valenciana y comenzar su trayectoria política. En la actualidad, además de alcalde, Darío Moreno es presidente del Consejo de la Sociedad Anónima de Gestión (SAG) y presidente de la Fundación para la protección del Patrimonio Histórico Industrial de Sagunto, entre otros cargos locales.
– ¿Cuál cree que es el atractivo de sus políticas en el municipio para que la gente lo haya reelegido?
Diría que tenemos esa doble perspectiva de querer un crecimiento, querer que esta ciudad sea un referente, ser ambiciosos, pero, al mismo tiempo, que nadie se quede atrás de esta nueva perspectiva de ciudad. Queremos tener políticas sociales que aseguren la igualdad de oportunidades y que todas las familias tengan las condiciones dignas para poder desarrollar sus proyectos de vida. Es, precisamente, con esta doble perspectiva con la que nos hemos ganado la confianza de los vecinos y vecinas de Sagunto.
– ¿Cómo valora este primer año de la legislatura 2023-2027?
Lo valoro positivamente. Hemos continuado creciendo con el proyecto de la gigafactoría, pero también hemos implementado algunas medidas sociales que considerábamos imprescindibles. Algunas son, por ejemplo, en el ámbito de la vivienda, con tal de asegurarnos que todo este crecimiento no solo repercute a las multinacionales o a aquellas empresas que puedan sacar provecho, sino que, realmente, es un crecimiento que circula y que beneficia a toda la ciudadanía.
– ¿Cómo valora las relaciones con el Consell? Después de haber tenido una primera legislatura con el Botànic y esta segunda con un cambio de signo político.
Diría que depende del ámbito. Estamos muy alineados en determinados aspectos, como son las infraestructuras o la atracción de inversiones en relación con la gigafactoría, por ejemplo. Pero hay otros en los que estamos notando una carencia de preocupación o de voluntad política a la hora de avanzar al ritmo que necesita esta ciudad. En esta línea, podemos hablar de Educación o de Sanidad. Son cuestiones que nos preocupan y sobre las que no estamos viendo la respuesta suficiente. Por eso, exigimos que haya un mayor interés para que todo este crecimiento económico, que también conlleva un crecimiento demográfico, vaya acompañado de un dimensionado de los servicios públicos adecuado. El objetivo es que ese crecimiento no implique un empeoramiento de las condiciones de los servicios públicos en Sagunto.