Por un año bien hermoso

Pulsando el botón de on vinoso

Hoy es viernes de ir cogiendo el pulso a este 2024 para darle y que nos dé todo. Junto a vuestras mercedes y bebiendo vino del rico, por supuesto.

| 19/01/2024 | 4 min, 40 seg

Con algunos de los que probamos el pasado año y que se nos habían quedado en el tintero. Justo donde no deben estar, porque no hay que dejarlos pasar. Hablamos de etiquetas para disfrutar, sin sorpresas en la cuenta y que merecen ser tenidos muy en cuenta. Españoles con algún infiltrado que vale su puesto. Del generoso a la tranquilidad pasando por las gubujis. De colores y sabores variados entre blancos y tintos. Cada uno distinto, singular y, por lo tanto, sin par. Unos pocos y sus pinceladas de brocha fina como lo es el Fino en rama Lagar de los Frailes (Lagar de los Frailes). Moriles en altura y con bravura. La potencia de ese interior que llevamos muy adentro. Atención con la enseñanza de que aquí se escribe con trazo firme manteniendo la gentileza. Con la justa distancia de sus colegas gaditanos, porque cada uno tiene su identidad, tan necesaria, y ahora en consonancia con unas alcachofas confitadas con un poquito de papada.

Ahora sí, vamos a Jerez y a lo grande, que nos espera el Amontillado Williams & Humbert saca de julio 2022 (Williams & Humbert). Elegancia que impone por su prestancia. Con la frescura de las ideas nuevas que se asientan en lo de siempre. Belleza de sonreír desde los ojos hasta los labios. Con seguridad basada en la certeza de estar haciéndolo bonito, día a día y, en la ocasión que nos contempla, con un atún encebollado. 

Pasamos a los espumosos y cambiando de país con el Crémant D’Alsace Kientz Brut (Rene Kientz). Curvas chisporroteantes y sensuales que se van perfilando en perfiles afinados. Lo atractivo de un vestido de verbena y brilli brilli del que no desentona. Porque resulta apropiado en fiesta de guardar en la memoria con el mayor del desenfado. Alegría que desemboca en algarabía porque no hay tu tía si pides unas ostras.

Volvemos a cruzar la frontera para ir a tierras catalanas de la mano del Terrer de la Creu Brut Nature (Terrer de la Creu). Conjunción de macabeo, parellada y xarel·lo de fruta salerosa y revoltosa. Con la sencillez del que sólo quiere dar compañía y que es de la buena. Con austeridad y sinceridad. Hablando de forma directa, con claridad y dejando de lado cualquier tipo de ambigüedad. Porque es tal cual e ideal con unas sepietas a la plancha.

La tranquilidad en días de tormenta

Pasamos al reposito de los tranquilos con el Tormenta 2021 (Verónica Ortega). Godello berciano y un poco marciano. Afilado como navaja dispuesta a darlo todo. En línea recta y con autoridad de sobra. Personalidad seria y uniforme con la vista puesta muy por encima de lo normal para acabar dejando huella. Imperecedero y certero. Admiración que hiela lo que toca y ahora le toca con unos berberechos regordetes. 

Toca seguir de recreo y relax con el Pepe Luis 2021 (Albamar). Galicia querida y requerida cuando está presente la mejor de la gente. Sueño de bodega que es y será realidad muy prontísimo. En copa deliciosa de salivar, ahumados que a saber, pero que saben de lujo, y una persistencia para perderse en ella. Entrar y no querer salir por la evidencia de que aquí reside la felicidad, la humildad y el cariño del hogar y su tortilla de patatas. 

El Ariyanas Seco sobre Lías 2022 (Bodegas Bentomiz) es cara preciosa de pupilas brillantes y gesto perfecto. Moscatel de Alejandría con su aromático que corresponde a tal varietal, pero libre de cansancio. Moderación modelada entre azulejos y pizarras en las que es un placer escribir. Con caligrafía florida y hermosa. Llenito de firmeza y confianza en que lo que vendrá será bonanza y con unas bolitas de esas con salmorejo que son la bomba.

Con el Viña Zorzal Golerga 2021 (Viña Zorzal) más que volar flotamos, porque es pajarito aventurero que sorprende con novedades como esta. Garnacha de monte mirando al norte. Liviano de frescura máxima y cariño del top. Familia, verdad y la realidad de conseguir hacer de proyecto de pueblo la opción más enorme. La luz servida con la certeza de que estará bordado de nobleza con una menestra de verdura.  

El Belfo 2021 (Arribes Wine Company) crece entre granito y calcáreos con variedad de variedades. Guardados en barricas durante diez meses con resultado cremoso y un pelín rasposín. Quedándose un rato largo, en conversación amena y con la formalidad justa. Sensaciones de diferencia en una zona capaz de ofrecer más que mucho. Cerquita de los que guardan y hallan ante un plato de patatas meneás.

Terminamos en la Ribeira Sacra con el Sílice Xabrega 2021 (Sílice Viticultores). Mencía y garnacha tintorera en alianza y con sus historias de cómo de un momento de ocio pueden salir proyectos con recorrido. Haciendo camino a pesar de lo escarpado que resulte en ocasiones. Ocasionando brindis en continuidad con finura, mesura y tersura. Atesorando tesoros, los de las personas, sólo por estar, y con un rodaballo regordete. Final ideal para irnos a meditar y pensar que lo mejor está por llegar. 

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