MADRID. "Con muchas ganas e ilusión" llega Dani Tatay a su papel protagonista en El Guardaespaldas. El musical. El intérprete valenciano asume su gran reto tras interpretar en este mismo montaje al acosador que perseguía al personaje de Rachel Marron. Ahora, "pasa de un papel muy pequeño" a uno de gran alcance, y lo hace para sustituir a Maxi Iglesias, lesionado de una rodilla.
Tatay, nacido en 1982, reconoce sentir un "poco de miedo y respeto" por el salto profesional que da. A él ya le correspondía asumir ser el cover, el actor que realiza las suplencias para Iglesias e Iván Sánchez. Ahora se coordinará con este último en la alternancia de protagonistas que ha marcado este musical.
De hacer la función en ese papel "una vez al mes o cada dos", señala, pasa a entrar en el ritmo de seis días a la semana que tiene la obra. Si antes "subías al escenario preparado pero con menos bagaje, ahora paso a hacer funciones alternándome con Iván". El cambio, que le pilla a mitad de temporada, seguramente se mantendrá hasta julio, cuando esta termine definitivamente.
Con este protagonista, Tatay siente que es el momento para el que está preparado. "Tengo que aprovechar al máximo la oportunidad que me da Stage -la productora-, la verdad, a ver qué pasa", dice. Han sido muchas horas en el escenario y detrás de él desde que empezó este montaje el pasado septiembre en el teatro Coliseum de Madrid.
En ese tiempo ha podido observar, y mucho, tanto a Iglesias como Sánchez. Esta vez le toca seducir al público después de asustarlo en su papel criminal. Las influencias de los demás, las tiene. "¿Es difícil no copiarles? Es difícil porque les escucho todos los días y quieras que no algún deje se me queda", explica, "pero aporto mi manera de enamorarme, de enfadarme, de encarar los problemas que le aparecen a Rachel en cada momento".
Como diferentes han sido las versiones de Frank Farmer que se han dado, desde el Kevin Costner de la gran pantalla hasta Iglesias, "cada uno somos de una manera y al personaje le aportamos lo que tenemos y nuestra forma de hacerlo, no se tiene que copiar ni de Iván ni de Maxi". "Son muy diferentes", apostilla.
En común tienen la base sobre la que trabajar: un hombre duro que no muestra las emociones y que acaba enamorándose de quien debe proteger. "Mi función es ser el guardaespaldas de una artista muy famosa que es Rachel Marron y tiene que contenerse todo el rato las emociones", describe. El guion original de Lawrence Kasdan creó el conflicto que entre ambos, "pero es un ser humano y se enamora perdidamente de ella pero tiene que controlar porque el trabajo es lo más importante de su vida y en él el amor no es posible."
Sánchez e Iglesias, que se pasaron mes y medio ensayando intensivamente para este papel el verano pasado, representaban las dos caras de Farmer. La alternancia de actores para Sánchez la ve como una fórmula muy buena, "para la productora porque abarcan públicos distintos y para nosotros es fantástico porque tienes tiempo para preparar y rodar otras cosas".
El primero aprovechó este personaje para volver a los escenarios madrileños tras unos años trabajando en mercado latinoamericano. Por eso también valora la oportunidad que se le da a Tatay. "Dani ha hecho muchas cosas y está empapado de eso", comenta. "Hace poco hablaba con uno de los productores y le decía que el mensaje que enviáis apostando por alguien que está en la compañía es de quitarse el sombrero", añade.
La mexicana Fela Domínguez recupera el legado de Whitney Houston en la función. Ella da la cara en las funciones y vivía el desdoblamiento que le tocaba a sus compañeros masculinos. Tras la marcha forzada de Iglesias reconoce que le extraña "porque nos llevábamos increíble y había una química actoral en escena brutal".
A pesar de eso, Domínguez también se deshace en elogios con el nuevo papel de su compañero, "feliz porque le hemos visto trabajar desde el día uno". Rápida hablando, la actriz revela que "la primera vez que Dani subió estaba muy nervioso porque Maxi se acababa de lesionar y toda la gente estaba esperando verle, y le vimos sacar la casta y trabajar. Se lo ganó y estamos orgullosos de él. Ver que como va subiendo y le va tan bien es un gusto".
Domínguez alaba la actitud que mantiene Tatay, "es una delicia porque está todo el tiempo pendiente del actor que tiene enfrente". "Y como está aprendiendo", añade, "está como esponjita preguntando y con una humildad dentro y fuera del escenario que se agradece". A ella la variación que tienen ellos la ayuda a ser más honesta en su papel, "pongo siempre cien por cien atención al actor e Iván me da unas cosas que Maxi o Dani no me dan y eso me da la oportunidad de reaccionar como yo reaccionaría en la vida real y esos puntos de honestidad me ayudan porque yo no tengo tanta experiencia actoral y me mantiene fresca todo el tiempo". "El estar cambiando constantemente de Frank Farmer me ayuda a crecer en la parte interpretativa, a no casarme con cierto tipo de movimientos y de entonación. En la honestidad, es fantástico", añade finalmente.
Volviendo a Tatay, aparecer en los carteles de uno de los exitosos montajes de la Gran Vía madrileña es un punto de inflexión clave. "En Valencia te formas pero si quieres conseguir triunfar fuera de tu ámbito el mejor sitio es Madrid", destaca. "Hay mucho trabajo y cuesta mucho más pero también hay más formación y escuelas".
La obvia diferencia de tamaño entre ambas ciudades es capital en lo que se trata de la cultura: "Madrid tiene de todo y en Valencia hay mucha pero es más reducida". Además, indica, "lo que he aprendido en Madrid en ocho años en Valencia no lo he conseguido". Por eso, tiene claro que "mientras tenga trabajo aquí, me quedo porque lo que me ha dado una no me lo ha dado la otra. Tengo que aprovechar al máximo mi vida laboral aquí".
Implantado en la capital, gestiona en el barrio de La Latina el Teatro de las Aguas una "sala alternativa con compañías pequeñas". "Madrid me lo ha dado todo", concluye. "Es un salto y venir a perseguir un sueño que es lo que hice cuando vine a vivir, y aquí estoy. Mi sueño era trabajar y crecer como artista. Empecé como bailarín, ahora estoy como actor en mi tercer musical. Mañana no sé lo que haré".