VALÈNCIA (EP). 'Abraçades en el port', una muestra que plasma despedidas y reencuentros en tres momentos históricos del siglo XX que marcaron un antes y un después para cientos de familias valencianas, llega al puerto de València para ponerlo en valor como escenario protagonista de fechas marcadas en el calendario. Esta exposición al aire libre está ubicada entre el Edificio del Reloj y el Tinglado número 2 y se compone de siete tótems vestidos de cerca de 40 fotografías protagonizadas por los abrazos de vecinos valencianas en momentos cargados de sentimiento, detalla Valenciaport.
La muestra, organizada por la Autoridad Portuaria de València (APV) y comisariada por la historiadora del Arte Ester Medán, estará abierta hasta el 24 de marzo. Las imágenes están cedidas por la familia de Luis Vidal Ayala, fotógrafo valenciano que ha colaborado en la elección de los momentos históricos y en las instantáneas expuestas. "Es una oportunidad única para que las personas que pasean por el puerto de València conozcan estos eventos históricos que han ocurrido aquí y que han sido momentos muy importantes para los valencianos y además significativos colectiva e individualmente", ha manifestado la comisaria del proyecto en la presentación.
El hilo conductor de la exposición son los abrazos cargados de emoción en un momento histórico en el que la comunicación de las personas no era como ahora: "Antes, cuando se despedían, no sabían cuando podrían volver a verse o hablar y esto se ve reflejado en las fotografías. Ahora es mucho más sencillo". Para el fotógrafo Luis Vidal, esta muestra tiene gran importancia histórica porque inmortaliza la experiencia vivida por miles de familias enteras desde el punto de vista humano: "En el caso de los agricultores valencianos que partieron a República Dominicana, se ve en sus caras la ilusión y la felicidad, a pesar de que no saben cuándo volverán. Es increíble como se ve reflejado el espíritu emprendedor valenciano en las instantáneas seleccionadas".
Durante la exposición se dan a conocer historias personales a través de fotografías históricas de tres momentos singulares. El primero, titulado 'De València a la República Dominicana', muestra instantáneas de una historia de despedida, la de más de 5.000 agricultores valencianos --en ocasiones familias completas-- que el 15 de mayo de 1955 migraron a República Dominicana con la esperanza de iniciar una vida más próspera. Una vez allí, la realidad se impuso con unas condiciones que nada tenían que ver con las prometidas, con lo que en poco tiempo emprendieron el regreso.
El segundo momento histórico es el 'Regreso de los Niños de Rusia', cuando en 1956 el buque Crimea llegó al Puerto con más de 500 españoles repatriados a bordo. Eran niños y niñas exiliados en Rusia durante la Guerra Civil de España, un regreso que se produjo tras casi veinte años desde su partida. Y el tercero, 'Los barcos Falleros', muestra cómo entre 1961 y 1972 miles de emigrantes valencianos en Hispanoamérica viajaron a València para disfrutar de las Fallas. En este periodo, hasta doce "barcos falleros" llegaron al Puerto con valencianos emigrados a Chile, Argentina, Uruguay y Brasil.