VALÈNCIA. Los celos que emponzoñan el espíritu y destruyen la existencia, la disyuntiva entre el deber y el deseo, la inútil lucha contra los acontecimientos que escapan a nuestro control, la férrea defensa de los principios éticos…Todas esos grandes temas que moldean y perturban la vida en la sociedad contemporánea ya aparecían fielmente retratados en los mitos de la Antigüedad. Ahora, el festival Sagunt a Escena rinde homenaje a los legendarios relatos que han marcado a Occidente revisitando a personajes como Antígona, Fedra, Edipo o Filoctetes. No en vano, la 35ª edición del festival, que se celebrará desde finales de julio y hasta principios de septiembre, lleva por lema Amb nom propi. Porque, como decía Georges Dumézil, "un pueblo sin mitos está muerto".
Durante la presentación del evento, que tuvo lugar ayer en el Teatre Principal de València, participaron el conseller d'Educació, Investigació, Cultura i Esport, Vicent Marzà; el director del festival, Juanvi Luciano; el alcalde de Sagunt, Quico Fernández; y la diputada d'Inclusió Social, Teatres i Memòria Històrica de la Diputació de València, Rosa Pérez. La iniciativa incluirá 26 espectáculos: 11 que se representarán en el teatro romano y 15 en los diferentes espacios del Off. Además, contará con un presupuesto de más de 300.000 euros, de los que la Conselleria destinará 225.000, el ayuntamiento de Sagunt 80.000 y la Diputació 40.000, cifras a las que se suman colaboraciones privadas. De esta forma, la aportación por parte de las instituciones públicas se incrementa entre un 10 y un 12 % respecto al año anterior.
Según el conseller, Sagunt a Escena está logrando ocupar “el lugar que le corresponde en el panorama escénico estival” y convertir a la localidad que lo acoge “en el epicentro de la cultura” durante los meses de verano. En cualquier caso, como afirma Marzà, “se busca atraer nuevos públicos”, pues la consolidación su número de espectadores es uno de los objetivos a los que se enfrenta esta edición del festival.
Para el director de Sagunt a Escena, las figuras míticas que protagonizan esta edición “representan una forma de ser, una postura frente a la vida que resulta muy reconocible para el espectador”. Así, en su opinión, se trata de “volver a las esencias del festival” al mismo tiempo que se refuerza “la conexión entre la creación grecolatina y el teatro romano de Sagunt, un espacio que constituye la mejor escenografía posible para este tipo de piezas”. De igual modo, Luciano considera que “esos textos clásicos siempre están ahí porque son las raíces del teatro”.
En cuanto a la disminución de representaciones programadas, que en años previos superaron la treintena, señala que se producía "un cierto agotamiento”. Por ello, en la presente edición se ha optado por “concentrar las espectáculos”, y, al mismo tiempo, facilitar "que las compañías tengan más tiempo para montar, porque son de mayor volumen" que en ediciones anteriores.
Por su parte, el alcalde de la localidad que ejerce de anfitriona del certamen, Quico Fernández, defiende que representa “el buque insignia del sector cultural de Sagunt”. “Algunos la recordaban sólo como una ciudad industrial, pero no se puede dejar de lado el alma cultural de la ciudad, que desde hace 2000 años produce teatro y lo ofrece a la humanidad”. De igual manera, la diputada Rosa Pérez reivindica la importancia de “llevar el teatro a las distintas comarcas valencianas y dar apoyo a un espacio tan emblemático para nuestro patrimonio como el teatro romano”.
De entre la programación, destaca Antígona, la pieza que inaugurará la programación del teatro romano el 1 de agosto. Se trata de una coproducción del Institut Valencià de Cultura (IVC) y la compañía ilicitana La Ferroviaria, que cuenta con Enric Juezas y Eloísa Azorín entre el elenco y a la que pone música el popular Niño de Elche.
Otras de las grandes producciones de este encuentro dramatúrgico son Filotectes, con Pedro Casablanc, Pepe Viyuela y Félix Gómez; Las Amazonas, interpretada por Silvia Abascal, Loles León y Olivia Molina; y Fedra, representada por Lolita Flores, Juan Fernández y Tina Sáiz. Estas tres piezas también se verán en otros dos importantes festivales escénicos de ámbito estatal: el Festival Griego de Barcelona y el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, “se trata de cooperar entre los distintos festivales, no de competir”, comenta Marzà al respecto. El cierre de la programación llegará el de septiembre con Èdip, de Teatro Romea, la versión en valenciano de la tragedia griega por antonomasia.
Respecto a las novedades de esta edición, cabe destacar la ampliación del Off Romano, que pasa de cinco ubicaciones a ocho. Así, a los enclaves tradicionales, como el Centro Cultural Mario Monreal, la Glorieta, la subida al castillo de Sagunto, el Casino Viejo del Puerto de Sagunto y el Centro Cívico del Puerto de Sagunto, se suman el Museo Arqueológico, la Casa de Cultura del Puerto de Sagunto y la plaza de los Pescadores de Canet d’en Berenguer. También arranca este año el servicio Sagunt Menut, una iniciativa que ofrece actividades didácticas infantiles para facilitar que madres y padres puedan asistir que los padres y madres asistan a las representaciones teatrales.