De Kurdistán a Macedonia: La Mostra completa su programación con diez largometrajes más

VALÈNCIA. (EP) Mostra de València-Cinema del Mediterrani reunirá en su Sección Informativa un total de diez películas que reflejan la pluralidad y diversidad de la creación cinematográfica mediterránea.

El festival, que se celebrará del 15 al 24 de octubre, incorpora en este apartado una decena de largometrajes de estreno en España que optan al Premi del Públic À Punt Média, que adquirirá los derechos de la ganadora para su posterior emisión en el canal autonómico.

Filmes llegados de Líbano, Turquía, Egipto, Marruecos, Kurdistán así como de Eslovenia, Serbia, Kosovo, Macedonia o Francia, se disputarán el galardón.

Mediante esta sección, el certamen quiere "acercar al público una cuidada selección de películas que supone una clara apuesta por la diversidad de procedencias y temáticas". "El público valenciano va a poder ver el más reciente panorama de las creaciones audiovisuales mediterráneas", señala la presidenta de Mostra de València i Iniciatives Audiovisuals, Gloria Tello.

En la selección figura Alephia 2053, que se presenta como la primera película de animación para adultos en árabe. Un film dirigido por Jorj Abou Mhaya y con coproducción francesa, que se anticipa al año 2053 en un país imaginario, Alephia, sometido bajo el yugo de un tirano mientras una resistencia clandestina lidera un movimiento para derrocar al dictador.

También de Líbano procede Broken Keys, una coproducción con Francia, Chipre y EEUU en la que un pianista trata de escapar de la persecución a la que es sometido por los fundamentalistas en una ciudad siria. El director, Jimmy Keirouz, fija su mirada en un lugar destrozado por la guerra donde la música y las modernas maneras de vivir han sido prohibidas por los líderes extremistas.

Desde Turquía, y también sobre música, versa When I'm done dying, segundo largometraje de la guionista y directora Nisan Dag, premiada en Tallinn por un trabajo ambientado en la subcultura del hip-hop de Estambul; la historia de un joven que se convierte en adicto al "bonzai", una droga barata que amenaza sus ambiciones artísticas y su relación con un DJ de clase alta.

Egipto está representado por Trapped. Se trata de la primera película egipcia seleccionada en el Festival South By Southwest de EEUU en diez años, y el único film árabe en el citado festival. Producida gracias al apoyo de una campaña de financiación popular, está basada en historias reales. La cineasta Manal Khaled sitúa su punto de atención en El Cairo de 2011, mientras las calles estallan en revueltas y varias mujeres unen sus destinos al quedar atrapadas en un edificio, metáfora de ese otro asedio al que les somete la sociedad patriarcal y en la que cada una, pese a su diferente origen social, libra su propia batalla.

Desde Marruecos llega Zanka Contact, la ópera prima de Ismael El Iraki. La película le valió a Khansa Batma el premio a la mejor actriz en la sección Orizzonti del Festival de Cine de Venecia. Se trata de una trepidante road movie protagonizada por dos amantes en turbulenta huida, que retrata el submundo lleno de peligros de una infernal Casablanca, recorrida por un rockero adicto a las drogas y una exprostituta.

Por su parte, Blackberry season es la nueva película producida por la Comuna Fílmica de Rojava, en Kurdistán. Bajo la dirección de Hasim Aydemir, adapta una novela autobiográfica de Murat Turk y relata sus experiencias como guerrillero antes de convertirse en cautivo, en un conflicto en el que decenas de miles de personas han perdido la vida y millones se han visto obligados a emigrar durante las guerras que han durado más de 40 años en el rompecabezas geopolítico de la región.

La aportación francesa a esta Sección Informativa viene dada por Just Like a Woman, dirigida por Amro Hamzawi, que ha filmado una comedia sociológica protagonizada por su hermana, una Nora Hamzawi sin empleo, sin pareja estable y con sus sueños de convertirse en escritora pulverizados. Una película agridulce y alocada sobre la normalidad, la racionalidad, la compleja búsqueda de la felicidad, el peso de la familia y de las convenciones, la soledad y la aceptación de uno mismo.

Si le vent tombe es otra de las aportaciones francesas a la Mostra, esta vez, en coproducción con Armenia y Bélgica. En ella, un ingeniero francés, que ejerce como auditor internacional, viaja hasta el aeropuerto de la autoproclamada República Caucásica de Nagorno Karabaj con la misión de evaluar su reapertura. Se trata del primer largo de Nora Martirosyan y llega a València precedida por su selección en Acid Cannes y tras ganar una mención especial en Tallinn.

Bitch, a derogatory term for a woman es una comedia eslovena hilarante y obscena dirigida por Tijana Zinajic sobre la vida en la depresión; la que experimenta Eva, una pintora formada en la academia pero sin inspiración, a punto de cumplir 27 años, y que se da cuenta de que aún no ha logrado nada en toda su vida.

Completa la sección la película macedonia Only human, de Igor Ivanov, premiado como mejor director en la Mostra de 2007. El film ofrece el retrato coral de seis personajes desesperados en busca de supervivencia, amor o redención. La galería de protagonistas es notable: un licenciado desempleado que se convierte en sepulturero, una viuda afligida en monja, sacerdotes que se dedican al juego y gánsteres que gobiernan los tribunales.