De la plaza del Ayuntamiento a Guillem de Castro: el 'consejo de sabios' de Catalá reevalúa grandes proyectos

VALÈNCIA. El gobierno municipal de València que lidera María José Catalá reevaluará grandes proyectos impulsados por el anterior ejecutivo de Joan Ribó. La primera edil convocará este mismo mes al consejo asesor de Urbanismo, recién creado por el Ayuntamiento, para estudiar de nuevo iniciativas de gran envergadura como el proyecto de reforma de la Plaza del Ayuntamiento o el bulevar cultural de Guillem de Castro, entre otros.

Este 'consejo de sabios', presidido por la primera edil y cuyo vicepresidente será el concejal de Urbanismo, Juan Giner, estará formado por arquitectos de reconocido prestigio como Carlos Lamela, José María Ezquiaga, Marina Sender, Alejandro Escribano o Fran Silvestre. Y como se anunció, el gobierno local pretende contar con su criterio para proyectos de especial importancia tanto en ordenación urbanística como en diseño urbano y arquitectónico. Ejemplo de ello son no sólo la principal plaza del Cap i Casal o el mencionado bulevar, sino también el bulevar para sustituir la playa de vías que se está soterrando -el bulevar Federico García Lorca- o el plan de reforma de la Avenida del Puerto.

"Nosotros tenemos varios proyectos sobre la mesa que forman parte de esa reflexión que quiero que aporte el consejo asesor de Urbanismo", explicó este jueves la alcaldesa, María José Catalá, en atención a los medios de comunicación tras la a Comisión de la Capitalidad Verde Europea con el resto de partidos. En ese sentido, Catalá pretende que "de aquí a verano" dicho consejo pueda "hacer esa reflexión" para "desbloquear y dar salida", modificar o frenar grandes iniciativas como estas.

A su juicio, "es importante que estos proyectos, que son grandes proyectos, porque son grandes vías e intervenciones que no son menores, vengan acompañados de una opinión técnica fundada de este consejo". Cabe recordar, pues, que la función de este consejo asesor es precisamente analizar las acciones que revisten "una especial importancia y trascendencia por la significación urbana, la afectación social, la incidencia ambiental o la relevancia cultural, emblemática y patrimonial del entorno".

Por ello, la idea con la que trabaja Catalá es convocar la primera reunión de este organismo antes de que acabe este mes para abordar cada uno de los proyectos que, por ahora, están en el aire, y cuya aclaración han exigido en reiteradas ocasiones los partidos de la oposición, Compromís y PSPV.

El más emblemático es el de la Plaza del Ayuntamiento. Durante el pasado mandato, la concejalía de Urbanismo, que dirigía Sandra Gómez, hizo un concurso de ideas cuyo jurado alumbró el anteproyecto que pretendía reformar este espacio, después de la peatonalización blanda hecha en 2020. El proyecto ganador, bajo el nombre 'Renatura' y diseñado por el equipo del arquitecto Miguel del Rey, generaba a la nueva alcaldesa muchas "dudas" y quería mejorarlo con "cambios" para buscar "otro modelo" de plaza.

Por ello, al poco tiempo de acceder al ejecutivo local, el 20 de julio, decidió dejar en stand by el proyecto al considerar "conveniente" el edil de Urbanismo "suspender" la tramitación para disponer "de tiempo suficiente para analizar con la necesaria profundidad la propuesta ganadora". La idea de la alcaldesa era anunciar las "nuevas líneas" que quieren aplicar al nuevo diseño a principios de este año. Sin embargo, ha anunciado que esperará al criterio del consejo asesor recién creado.

Guillem de Castro y Federico García Lorca

Catalá también se refirió a planes como los de Guillem de Castro o Federico García Lorca para esbozar el orden del día de la reunión del consejo asesor. En el primer caso, el anterior gobierno había proyectado una suerte de bulevar cultural en la calle de Xàtiva y la calle Guillem de Castro y que, al ampliar las zonas peatonales, dejaría la planta viaria con un carril para el tráfico privado y otro para el público, además de prever la eliminación del túnel que conecta Guillem de Castro con Ángel Guimerà.

En el segundo caso, se trata de un bulevar nonato y cuya construcción se prevé para al menos dentro de cuatro años, con el nombre de Federico García Lorca. Es la vía que sustituirá a las vías ferroviarias que llegan hasta la Estación del Norte desde el sur de la ciudad, toda vez estas queden soterradas gracias a las obras que ya está ejecutando Adif y que se alargarán hasta 2028 si todo sale como se espera. Para ello, el anterior gobierno había anunciado un concurso de ideas, que debería regirse por líneas maestras como el mantenimiento de las actuales calles -sin cruzar de un lado a otro-, la ubicación de un gran jardín que ocuparía la gran parte del espacio disponible central, además de dos carriles bici.

Otro plan del que tampoco se conoce el futuro es el de la remodelación de la avenida del Puerto, anunciado por el anterior ejecutivo, que buscaba ampliar las aceras, mejorar el carril bici y suprimir aparcamientos, todo a costa de eliminar dos carriles del tráfico rodado para dejar tres carriles -dos para el vehículo privado y uno para transporte público-. Un "paseo al mar" -así se vendió entonces por el gobierno anterior- para el que también habrá que tomar una decisión.

No hay que olvidar que tanto en el caso de Guillem de Castro como el de la avenida del Puerto, el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales (TARC), dependiente del Ministerio de Hacienda, anuló los procedimientos de contratación a raíz de un recurso del Partido Popular y otro del Colegio de Ingenieros. Con la llegada del nuevo ejecutivo, se decidió frenar ambas licitaciones.