VALÈNCIA. La Conselleria de Economía y la asociación que representa a los supermercados están más cerca de llegar a un acuerdo sobre el Plan de Acción Territorial Sectorial del Comercio de la Comunitat Valenciana (Patsecova) tras meses de bloqueo. Aunque aún no hay un acuerdo cerrado, las negociaciones avanzan y se ha conseguido limar asperezas entre ambas partes en aras de permitir dar luz verde a esta norma que es uno de los 'planes estrella' del departamento que dirige Rafa Climent.
Era este verano cuando Economía quería sacar adelante al texto en el pleno del Consell, pero la presión de los supermercados y las reticencias de la Conselleria de Política Territorial lo impidieron. Desde el departamento que dirige Arcadi España se emplazó a Economía a aunar más consensos en torno a la norma antes de sacarla adelante dada su importancia. Incluso llegó a intervenir Presidencia ante la presión del sector de los supermercados. Hasta en seis ocasiones se vetó que la norma fuera aprobada por el Gobierno autonómico. Una parálisis que desde Economía quieren ponerle fin y ya negocian a contrarreloj con los supermercados para llegar a un entendimiento.
La oposición al texto la encabeza Asucova -a la que pertenecen grandes cadenas de distribución como Mercadona, Consum o Masymas- que rechaza una parte del articulado. En concreto, el punto de fricción se centra en la exigencia de una licencia autonómica para la apertura en zonas sensibles de locales a partir de 1.000 metros –algo que afecta especialmente a los supermercados–. Hasta ahora la norma fijaba en 2.500 metros cuadrados la superficie para exigir ese trámite. Una burocracia que no gustan a la patronal de los supermercados que está presionando para que esa parte sea modificada.
Desde Economía, han defendido este criterio amparándose en criterios medioambientales, pero ahora están dispuestos a ceder para facilitar un entendimiento entre las partes. Así lo aseguraba Climent en una entrevista con Plaza Radio. "En verano la norma estaba a punto de caramelo, pero hubo ciertas discrepancias de los supermercados que ahora estamos negociando. Espero que en el transcurso de las próximas semanas sea una realidad su aprobación", señaló el conseller quien incidió en la importancia de una norma cuyo espíritu es definir el comercio del futuro en la Comunitat Valenciana.
En este sentido, subrayó que el Patsecova "no prohibe nada", sino que se pide una licencia autonómica por una cuestión medioambiental en un momento de urgencia por el cambio Climático. Pese a ello, avanzó que la Conselleria ha presentado una nueva oferta para salvar la situación. "Estamos negociando y la última oferta es la de ampliar esos metros entre más de 1.000 y menos de 2.000", avanzó. Una propuesta que, según deslizó, ha sido bien acogida por los supermercados y Territorio.
De hecho, desde Asucova aseguran a este periódico que la intención es llegar a un entendimiento y ahora las posturas están más cerca del entendimiento. "Las conversaciones están abiertas porque hay voluntad de solucionar esta cuestión", asegura Pedro Reig, director de la patronal de los supermercados, quien, no obstante, puntualiza que "todo lo que sea por debajo de los 2.000 metros cuadrados perjudica al sector porque la mayoría de establecimientos tienen este tamaño. Y es que, según señala, esta licencia autonómica supone aumentar la burocracia en un momento como el actual en el que lo que se necesita es agilización en la administración para no lastrar la recuperación.
"Todo lo que sea por debajo de los 2.000 metros cuadrados ralentiza proyectos. No creemos que este aspecto afecte desde el punto de vista del modelo de comercio de proximidad que se propone. En cualquier caso, las posturas están más cerca de lo que estaban y se está haciendo un esfuerzo por acercar posiciones", recalca para incidir en que han rebajado su exigencia que partía de los 2.500 metros cuadrados, como ya estaba establecido y fija la directiva europea, a 2.000 metros cuadrados.
"Hasta ahora teníamos el listón en los 2.500 metros cuadrados. Así lo establecía una directiva europea y, hasta el momento, no había generado problema a nadie. Partimos de algo donde antes de esto no ha habido controversia ni debate", indica Reig. En cualquier caso, la nueva propuesta de Economía gusta más en el sector.
Eso sí, pese a esta nueva oferta, Climent dejó claro que la propuesta de Economía es "muy aceptable y factible" para conseguir, por fin, zanjar el debate y en ningún caso supondrá que sea "un Patsecova descafeinado, sino que atenderá la transición ecológica que necesitamos en este momento", reivindicó.
Y es que se trata de una norma muy demandada por una parte del sector del comercio. Tanto Confecomerç o Unión Gremial han reivindicado en reiteradas ocasiones su necesidad. "El Patsecova es una prioridad, antes y tras el impacto del Covid-19, imprescindible para poder disponer de un marco de actuación que garantice y dote de seguridad jurídica a la ordenación y planificación comercial", subrayaba el presidente de la patronal del pequeño comercio en la Comunitat, Rafa Torres, hace unas semanas, que exigía la aprobación definitiva de una medida reclamada por el sector desde hace más de 10 años.
También Unión Gremial ha salido en defensa del plan de Climent. "Pedimos al conseller de Territorio que defienda esta norma como proyecto colectivo del Consell para ordenar un sector que se ha visto sometido a maniobras especulativas que han llevado a una saturación de superficies comerciales, que han hecho peligrar la estructura del comercio local de proximidad", reclamaba en un comunicado. Su presidente, Juan Motilla, reconocía que la covid-19 "ha sido y continuará siendo una contingencia", pero subrayaba que "una norma de tanta trascendencia no puede esperar más".
Incluso, el propio presidente del Consejo de Cámaras de la Comunitat, José Vicente Morata, se posicionó del lado de la Conselleria al rechazar cualquier retraso al Patsecova.