El diseño en las elecciones para el 26M

El viernes pasado arrancó en la Comunitat Valenciana la campaña electoral para las elecciones municipales y europeas, con la famosa y simbólica pegada de carteles que como decíamos repasando las elecciones autonómicas y generales se ha convertido ya en un acto de postureo donde las imágenes de campaña habían sido desveladas días antes para utilizar en la trinchera online que son las redes sociales.

Es interesante repasar, desde el punto de vista del diseño, cómo en las campañas para estas municipales de València han vuelto algunas tendencias de hace años como el uso general de la caligrafía, lettering y letras dibujadas, así como haberse distanciado de las propuestas de sus respectivos partidos para el 28A.

Como otro punto en común, la fotografía de las candidatas y los candidatos a la alcaldía de València es más casual que nunca, con retratos en la mayoría de los casos alejados de los fondos neutros e iluminaciones de estudio a los que estamos acostumbrados, recurriendo al retoque sólo por lo justo (siempre se hace) y con mucha más naturalidad que en elecciones anteriores. Ahora abusan de hashtags más que de Photoshop, y la cartelería y gráfica de las campañas es más dinámica que nunca ya que en tiempos de lo digital van evolucionando y planificando los tiempos para no cansar ni quemar con sólo una propuesta, lo que da vidilla y algo que comentar a diseñadores y expertos en comunicación.

Pero otra diferencia significativa respecto a las campañas de hace 4 años ha sido la irrupción del diseño no en el planteamiento de sus cartelerías o gráficas sino en forma de propuestas en los programas electorales. Si en 2015 había que rebuscar para encontrar algunas medidas o intenciones en cuanto a políticas de diseño, sin estar aún publicados todos los programas de los grupos que buscan gobernar en València encontramos ya compromisos por el diseño aterrizados en acciones mucho más concretas de lo que estamos acostumbrados a ver en la política española y esto es, sin duda, un triunfo del diseño.

Veamos pues, de cara a los comicios municipales del día 26 de mayo, cómo se ha enfrentado al diseño cada una de las campañas.

El actual Alcalde de València, Joan Ribó, se ha desvinculado de la campaña “Imparables” de las autonómicas pero sin embargo el diseño sigue teniendo que ver con la cartelería utilizada por Oltra y Baldoví el 28A, ya que el tipo de letra, aunque no es el mismo, recuerda a esa gráfica de texto condensado en mayúsculas y de fondos naranjas corporativos. Ese aroma que relaciona ambas campañas le da corporatividad a Compromís, lo cual está bien para fidelizar a los tuyos, pero con un toque muy diferenciador que es el slogan, ese “Jo amb Ribó” que juega con el nombre de pila del candidato a la vez que te invita a ser parte de la campaña en sí.

El hashtag #JoAmbRibó comparte espacio con #laCiutatqueVolem, dando ambos cercanía a la campaña aunque es de imaginar que vayan mutando o alternándose con otras propuestas de aquí al día 26.

Pero como decíamos, el diseño ha trascendido hasta convertirse en propuestas políticas y es algo novedoso prácticamente a nivel estatal. El sector vive un momento dulce con iniciativas como la candidatura de València a ser Capital Mundial del Diseño en 2022 que se han dado precisamente por el respaldo político, y ahora es precisamente la administración la que pone en valor el diseño para incorporarlo en sus estrategias, como por ejemplo ha manifestado ya Compromís adelantando la intención de crear de la figura de la dirección creativa para coordinar y supervisar la imagen corporativa municipal y reforzando el servicio de identidad corporativa con tres nuevos puestos para especialistas.

El movimiento se demuestra andando, y en su última legislatura se implantó hasta consolidarse la contratación de profesionales para campañas y marcas de índole municipal, convirtiéndose València en referente en todo el estado español por las buenas prácticas en la contratación pública obteniendo además múltiples premios en festivales y galardones de diseño para campañas de Fallas o Gran Fira.

En el programa de Compromís para las elecciones municipales de València de este año, una de las propuestas establece beneficios fiscales municipales para empresas de diseño que se establezcan en València, un plan de atracción de talento que busca hacer que la ciudad se convierta en referente del sector creativo, algo apoyado también a nivel autonómico ya que en su último programa de abril apostaban por los incentivos para que empresas valencianas contratasen servicios de diseño.

Siguiendo con las propuestas de gobierno para estas municipales, Compromís dedica uno de los veinticinco apartados del programa de su web al diseño, algo inédito probablemente a nivel nacional en toda la historia de la democracia española, con el objetivo de potenciar el uso del diseño de manera transversal promoviendo la actividad del sector para contribuir así a la transformación del tejido económico, difundiendo también la cultura del diseño, un discurso que muchos diseñadores llevamos tiempo difundiendo y parece que no ha caído en saco roto. De entre los trece puntos de este apartado (¡trece puntos sobre diseño en un programa electoral!) destacamos el apoyo a la candidatura para que València sea Capital Mundial del Diseño en 2022

En la campaña de Sandra Gómez nos encontramos con la vuelta de la caligrafía, usada en este tipo de campañas para dar un toque más cercano a la candidata junto a una tipografía de palo seco, una Avant Garde, que le da el toque más sobrio y a la vez recuerda en algunas composiciones en blanco sobre fondo rojo a las campañas más corporativas del PSPV, pero cuando “habla” la candidata de València se recurre a los fondos blancos y a unas fotografías mucho más frescas y con fondos urbanos para alejarse a su vez de lo hecho en las autonómicas.

El programa de la candidatura de Gómez estaba ya publicado la semana pasada, y llama la atención la importancia dada al sector creativo con la recuperación de espacios culturales de la ciudad junto al desarrollo de nuevos espacios para que sean motores creativos y de desarrollo de los barrios. De hecho hay un apartado de su programa denominado “València Capital de la Libertad y la Cultura” con todo un subapartado dedicado al diseño y donde encontramos algo por lo que en estas páginas de Cultur Plaza ya hemos apostado alguna vez, y es la creación de un Consell de Disseny. También leemos propuestas y menciones al diseño en la señalización del turismo sostenible y mejoras en el diseño del mobiliario urbano. Echando la vista atrás a las autonómicas, una de las grandes apuestas en diseño del PSPV era la creación de un Museo Valenciano del Diseño.

El equipo de campaña de Sandra Gómez, extremadamente joven, ha apostado por generar muchas líneas diferentes ya desde la presentación de la candidata, y ahora mismo se basan en el hashtag #VLCsenseLímits y en el slogan del “Aire Fresco para València” con un programa electoral lanzado desde Google maps con puntos de acción repartidos por toda la ciudad, incluso con marcadores de geolocalización instalados físicamente por las calles. Coherentemente con su slogan, y con la juventud tras la candidatura, se han desmontado algunos parámetros políticos de toda la vida para apostar (arriesgando mucho, a veces) por nuevas vías de comunicación.

Precisamente PSPV, desde el gobierno de la Generalitat Valenciana, es por su parte el partido que autonómicamente se convirtió en referente también por la implementación de buenas prácticas en la contratación de diseño para la comunicación de sus campañas erradicando los concursos especulativos que tan mal hacían a la imagen de la institución y al gremio del diseño. Organizaron también debate en torno al diseño en Les Corts, y a nivel nacional fue el grupo encargado de ir adelante con la Proposición No de Ley por una Estrategia Nacional de Diseño, es decir, que saben escuchar al sector del diseño y llevan años apoyándolo, a causa de lo cuál son hoy uno de los partidos que más siguen apostando por el diseño.

La candidata a la alcaldía de València por el Partido Popular, María José Catalá, también apuesta en su imagen de campaña por utilizar una caligrafía para su nombre combinada con una fuente geométrica, Avenir, para el apellido, en minúsculas para su slogan, muy legible, más conservadora, y con un espaciado entre letras que recuerda a la composición de la campaña de las autonómicas de Bonig y su “Correctamente política” con fondos más urbanos y aparentemente improvisados, con muchos elementos el común con la fotografía de la candidata socialista, pero con una combinación de azules que nos traslada de inmediato al universo corporativo del PP.

Mantiene una gráfica más conservadora, coherente con la línea del partido, poco desarrollada.

En el programa de Catalá, publicado también la semana pasada, no encontramos referencias al diseño, aunque en sus medidas resumidas vemos la apuesta por una Estrategia de Innovación Transversal para atraer talento e inversión, donde esperamos tuviese cabida el diseño.

Siguiendo con esta corporatividad de los Populares, llama la atención que el azul destaca mucho entre el resto de propaganda electoral que tira más a tonos cálidos predominando rojos y naranjas, lo que de alguna manera les hace destacar.

Por Ciudadanos, Fernando Giner, es el único candidato a estas elecciones municipales que en su perfil de Twitter (foco principal de este análisis de las campañas para poder recurrir a las primeras fuentes) no se hace eco de ningún elemento de su candidatura o de su campaña, con un Albert Rivera casi más protagonista que él desde el primer tweet fijado o la foto de cabecera. De hecho, el enlace del perfil de Ginerl es el único que no lleva a una web de campaña sino a la de su asesoría que dejó de publicar contenidos en 2015.

Tampoco encontramos hashtags o enlaces al grupo municipal. Son detalles de comunicación que se ven reflejados también en la ausencia de una campaña diseñada para estas elecciones, y toda la cartelería para estas municipales hereda los formatos de las elecciones generales y autonómicas del 28A, bien sea por estrategia o por dejadez, pero no vemos una intención de apostar por nuevas líneas de diseño para diferenciarse. Eso sí, la apuesta va por la publicidad online, y desde que empezó la campaña el viernes los banners, ads y tweets promocionados de Ciudadanos inundan las redes.

El programa aún no ha sido publicado así que no podemos encontrar cuál es el peso del diseño en sus propuestas de gobierno municipal.

“La València que cuida” es el slogan de Unides Podem, com María Oliver como candidata, que lanzó su campaña con un gran photocall en forma de ilustración de una València interpretada por la ilustradora Virginia Lorente, quien estuvo presente en el acto de presentación.

Encontramos poco más a nivel diseño o desarrollo de cartelería, y el programa tampoco ha sido publicado aún, pero esta gran ilustración se ha convertido en un reclamo para fieles al partido que reclaman copias de este mapa ilustrado que refleja la apuesta por una ciudad verde, sostenible y amable. Un mapa de pequeñas historias que hacen ciudad.

El perfil de Twitter de la candidata hasta hace apenas una semana no mostraba referencias a su candidatura al igual que el caso de Ciudadanos, y su link llevaba a su proyecto personal relacionado con la arquitectura y también sin actualizar desde hacía años, pero en los últimos días ha ido adaptándose e incluyendo temas de la campaña.

Como apuesta novedosa encontramos una app, MariaRun4Future, en la que hay que ayudar a la candidata a rescatar València luchando contra el mal para que el Invierno no vuelva y condenar a los corruptos al fondo de las tinieblas (esto es literal de la descripción de la app).