El Museo de Etnología presenta 'La Caixa dels records. Memories de una vida' para abrir el museo a personas de avanzada edad y con demencia
VALÈNCIA. Todo el mundo tiene derecho a disfrutar del arte. A través de este, las personas son capaces de descubrir sentimientos y evadirse de su entorno, siendo una parte fundamental para la vida de cualquier individuo. No obstante, en la actualidad existen personas con una gran diversidad funcional que no siempre pueden percibir esa experiencia. ¿Cómo adaptar el arte a todo el mundo? Con este principio como base, se ha extendido el movimiento por diferentes museos valencianos que lucha por el arte inclusivo. Este proyecto, enmarcado dentro del Área de Cultura llamado Friendly Museums, trabaja con museos y diferentes servicios de la Diputació. En línea con este proyecto, el Museu d'Etnologia de Valencia (MUVAET) ha puesto en marcha el proyecto La Caixa del Records. Memòries d’una vida.
Friendly Museums pretende avanzar en la inclusión de las personas con necesidades físicas, psíquicas y sensoriales especiales, pero también tiene en cuenta la perspectiva de género y la atención a colectivos de personas en riesgo de exclusión social, víctimas de la violencia de género o del acoso escolar. Cada uno de los museos que participa en este proyecto, lleva una línea diferente. El Museu d'Etnologia ha apostado por la abertura del museo a personas de edad avanzada y también a aquellas que presentan rasgos demencia, como el alzhéimer.
Esta apertura genera nuevas perspectivas respecto de la función de los museos en la sociedad, convirtiéndolos en instituciones que, además de sus funciones habituales -conservación y divulgación patrimonial-, pueden contribuir a mejorar los aspectos emocionales y relacionales de múltiples colectivos de los ciudadanos.
¿Cómo atraer a este público? Apostando por la reminiscencia. El Museu d'Etnologia ha diseñado un proyecto nuevo basado en una terapia de reminiscencia que pretende estimular a través del arte, los sentimientos positivos que los objetos pueden provocar en una persona recordando el pasado. Para realizar esta terapia, el museo ha contado con la Dra. Rita Redondo, experta en técnicas de envejecimiento que ha diseñado las sesiones lo los visitantes van a experimentar; y por Maria Raga. El proyecto basado en la terapia de reminiscencia pretende mejorar el estado de ánimo de las personas con demencia a través del recuerdo, propiciado por objetos cotidianos de su pasado.
De esta forma el museo amplía su función social en la medida que propone actuaciones a colectivos no habituales y se presenta como un espacio que puede propiciar bienestar saludable entre sus visitantes. Para implantar la terapia como expresión de arte, no ha sido fácil, puesto que el personal -el equipo de Didáctica- del museo ha necesitado formación para aprender a tratar los participantes además de realizar una exhausta documentación de los objetos que serán necesarios en los pases.
Francesc Cabañés, jefe del área de difusión cultural, didáctica y comunicación ha declarado que “ya hemos hecho seis pruebas piloto y los resultados han sido muy satisfactorios. Al principio, estábamos un poco cortados, ya que nos costaba acercarnos a los grupos, pero, después de ver lo positivas que son las sesiones en las personas que han venido, estamos deseando que vengan más”.
El objetivo principal de esta exposición es “evocar” recuerdos positivos en los asistentes. Para ello, la actividad se centrará en la experimentación con diferentes objetos. Estos se pueden escuchar, tocar, oler… Y emanan una serie de sensaciones que se asemejan a momentos pasados. Para desarrollar esta actividad, el museo dispone de una sala especial en la que se atenderá a los grupos.
Dado la gran capacidad de objetos de la que dispone El Museu d'Etnologia, se han dividido en seis temáticas diferentes, entre ellas: la cocina - comida, la vivienda, el trabajo agrícola, los comercios, los ritos de paso, los juegos o las aficiones. El modus operandi es sencillo, consiste en evocar recuerdos a través de los objetos. La unidad temática es una propuesta de trabajo de las sesiones generada alrededor de un tema concreto. En ella se seleccionan los objetos, fotografías y recursos más adecuados para el desarrollo del tema. También se indican los posibles recorridos temáticos y las cuestiones relacionadas, con el fin de suscitar interés y emociones positivas entre los participantes
Por ejemplo, el museo tiene diferentes televisiones de la época de los 60. Una de las opciones es tocar la rueda característica de cambiar los canales, o el botón de encendido – apagado. Ese click les puede transportar a otra época, a cuando los asistentes eran más pequeños, y con ello, despertar la memoria remota que les lleve a una emoción agradable.
Otro ejemplo sería con la comida. Hay utensilios que ya no se utilizan en la actualidad pero que sí tiene el museo y que pueden recordar a momentos familiares de antaño. El director recuerda como una mujer de las que asistió a la prueba piloto que muy emocionada tocó una vajilla y dijo que le recordaba al “guiso de su madre”. “Es positivo hacer este tipo de sesiones porque estas evocaciones hace formar parte de ‘algo’ a los asistentes. Es decir, fomenta la pertenencia a una familia, a un pasado, y después se sienten mejor”: dice Francesc Cabanes.
La actividad se desarrolla en tres fases. En primer lugar, es necesario el contacto previo con el centro de referencia, o residencia, para concertar una cita y prepararlo todo. En este momento, el equipo de expertos solicitarán la información autobiográfica general de grupo, para conocer sus oficios, edades, procedencias, formación, aficiones, etc.
La segunda fase corresponde al desarrollo de la sesión en el que se realiza el trabajo de reminiscencia con objetos de vida cotidiana, relacionados con la unidad temática acordada con el centro. En este caso se elegirá aquella unidad que mejor se ajuste al equipo.
La tercera fase culmina con el contacto posterior en el que se realiza una valoración-informe de la actividad realizado en conjunto con el centro de referencia para establecer las actuaciones de mejora.
En cada sesión, las personas mayores o con demencia irán acompañadas en todo momento por un terapeuta. No obstante, jamás podrán ir solos. Es decir, tienen que ir acompañados siempre por los cuidadores o por sus familiares.
Las sesiones se pueden realizar de dos formas diferentes. Como hemos dicho anteriormente, el museo ha dispuesto una sala para disfrutar de La Caixa dels Records, pero en el caso de contactar con el museo, se puede hacer en el centro o la residencia que lo solicite. Para tal caso, han diseñado un cajón en el que se pueden transportar los objetos que necesiten para hacerlo a distancia.
El programa es totalmente gratuito y comenzará a lo largo de mes de mayo. Va dirigido a las asociaciones y centros de personas mayores y de personas con demencia.