La ópera se estrena el 25 de febrero avalada por el 'sold out' de entradas, pues sólo queda el 5% de tickets reservados
VALENCIA. El montaje que diseñó David McVicar para recuperar el mensaje "provocativo" que buscaba el compositor Giuseppe Verdi con la ópera 'Aida' regresa al Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia en su versión íntegra con la escena del triunfo original, y no recortada como en 2010, bajo la batuta, esta vez, del maestro Ramón Tebar, que debuta de forma oficial como principal director invitado.
El intendente-director artístico del coliseo, Davide Livermore, acompañado de Tebar y de los principales intérpretes, ha presentado este martes en rueda de prensa esta coproducción con el Covent Garden de Londres y la Ópera de Oslo, que se estrena el 25 de febrero repitiendo éxito ya que desde hace dos semanas no quedan entradas más allá del 5% reservadas para cada día por imperativo legal.
Livermore ha elogiado el montaje del director de escena escocés por recuperar "la verdadera provocación" que el compositor italiano quiso trasmitir con 'Aida', recreando la historia de la nación grande que oprime al pequeño en un exótico Egipto de pirámides, elefantes y camellos, pero que para los espectadores del siglo XXI "no tiene nada de insólito" por "la televisión y los viajes low cost".
Por ello, se recurre a "una mezcolanza de culturas lejanas", desde la japonesa, maya, celta, india o siria, para plasmar "la belleza de la partitura y la brutalidad de la historia" que debe "hacer reflexionar a los espectadores" gracias a "esa imprescindible función social que tiene la ópera". Además, el público tiene el aliciente de poder ver "la extraordinaria" escena completa, tal como McVicar la ideó como una parada militar entre samuráis.
El intendente ha desgranado que este recurso de civilizaciones antiguas facilita al espectador el distanciamiento necesario para poder comprender el "mensaje de pasión amorosa mezclada con la brutalidad del imperio para destruir al individuo y el abrumador poder de la Iglesia que Verdi, el gran padre ético y moral de la defensa de la libertad del XIX, jamás habría podido ambientar en Europa".
Al respecto, Tebar ha destacado que 'Aida' es la "ópera ideal" con la que regresar a su tierra valenciana por su mensaje simbólico. Se trata así de "un sueño" poder debutar en Valencia con esta obra "magistral" en la que "el conflicto de las pasiones humanas, celos amor y odio" , surgen en una historia de pueblos "oprimidos y que termina con una palabra: 'pace'".
"Me gusta pensar en ella ante los conflictos que pasan hoy en día, la opresión de cientos de pueblos y no sólo por guerras, sino también para los refugiados en Europa", ha constatado. Además, ha destacado el gran reparto de esta reposición, todos ellos reconocidos en el panorama lírico por estos papeles en 'Aida': la uruguaya María José Sirin y la venezolana Lucrecia García, en el rol protagonista, el portorriqueño Rafael Dávila, que interpreta a Radamès, capitán de la guardia egipcia, y Marina Prudenskaya, que cierra el triángulo amorosa en su papel de Amneris.
Livermore ha destacado que la temporada está siendo "increíble" con una ocupación superior al 90% de media que en el caso de producciones de obras conocidas, como 'Aida', un "superhit" de la ópera, llevan a agotarse las entradas semanas antes del estreno.
Sin embargo, ha recalcado que un intendente de un teatro público debe tener "la responsabilidad de descubrir al público" las óperas a lo largo de sus más de 400 años y que son "patrimonio de la gente". "Se trata de ayudar a la gente a conocer lo que es suyo, porque la ópera es patrimonio de la humanidad, hay que divulgar no hacer taquilla", ha aseverado. Por ello, ha insistido en que, a diferencia de los teatros privados regidos por el marquéting, el teatro público de mantener "su papel de educador de la belleza del arte".