VALÈNCIA. El bochorno del verano permite marcar distancias con el sofoco que generaron las elecciones locales, las que concitan el interés del mayor número de partidos, aunque no sean los principales en representación en votos. Algunos, conscientes de sus escasas posibilidades de competir en el mercado electoral si concurrían individualmente, configuraron coaliciones.
En el ámbito del valencianismo regionalista no de izquierdas (Més Compromís e Iniciativa –Compromís se definen de izquierdas y son considerados antagonistas por los partidos de este espectro, que contemplan con recelo y preocupación las concesiones del gobierno a Cataluña) surgieron principalmente tres de cara a los pasados comicios del 28 de mayo. Superados estos, ahora les toca decidir su futuro.
Precisamente un posible pacto de gobierno del PSOE que lleve a la práctica las reivindicaciones catalanas y no las de otras autonomías como la valenciana los mantiene más que activos. En ocasiones precedentes se han diluido tras un mal resultado electoral; en cambio, ahora se encuentran alerta.
“El concepto de candidatura valencianista unitaria sigue vivo y más necesario que nunca, vistas las intenciones manifiestas de PSOE y PP de pactar con Junts. Los valencianos tienen que entender que votando partidos nacionales quien siempre gana es el nacionalismo catalán, con lo que ello conlleva en agravios y perjuicios para los valencianos. Esos pactos nos han costado en otras ocasiones el agua, la financiación, inversiones y hasta nuestra lengua cooficial”, lamenta Ferran Chiva, secretario de organización de Valéncia Unida.
Units, denominación que agrupaba a Valencia Unida, Lo Nostre, Contigo y Unión Europea de Pensionistas, sumó 4.175 votos en los comicios autonómicos. No obstante, sus grandes retos eran locales. Y a escala municipal cada partido optaba donde mejores perspectivas consideraba que tenía.
El anteriormente citado Valéncia Unida compitió en la capital con el reclamo de los evocadores apellidos de su líder, Vicente González Lizondo, hijo del histórico diputado nacional de Unión Valenciana. Obtuvo 1.755 apoyos en Valencia y quedó en octavo lugar. También lo hizo en la localidad de Paterna, donde cosechó 308 votos. Insuficientes en ambos casos para conquistar acta de concejal. En cambio, sorprendió con sus dos ediles en la población alicantina de Callosa d´En Sarrià.
Contigo ha logrado representación en dos municipios pequeños de la comarca de Camp de Turia. Consiguió un concejal en Casinos, población que bordea los 3.000 habitantes, y tres en Gátova, que supera por poco los 400. En este último término municipal ganó las elecciones; no obstante no repite alcaldía porque la única edil del PSPV optó por votar al candidato del PP y permitirle sumar cuatro votos sobre siete.
Tras esa experiencia común, la tarima pública de Units, que los aglutinaba con el objetivo autonómico, queda aparcada. “No tiene sentido hasta las próximas elecciones. Ahora cada partido va haciendo marca con su nombre”, señala José Enrique Aguar, presidente nacional de Contigo. No obstante, Chiva insiste en que “queremos y debemos hablar de nuevo con Contigo y queremos seguir hablando con Decidix”.
La aludida Decidix emergió como una plataforma de concejales de partidos locales con sustrato valencianista que decidió dar el salto a la metrópoli y hacerlo también a escala autonómica. En el primero de los casos consiguió 497 votos en los comicios locales; mientras que en su apuesta por la Generalitat recopiló 2.315 y quedó, de entre el conjunto de partido, en el puesto decimotercero.
Como le ocurre a Units, su apuesta tenía las posibles cartas ganadoras en el ámbito municipal. De hecho, ha revalidado sus dos concejales en Albal con la marca Avant Decidix, lo que le ha permitido pasar de una oposición crítica con el anterior alcalde socialista, Ramón Marí, a desbancarlo y formar parte de un gobierno en el que tiene un peso decisivo con bastiones como la primera tenencia de alcaldía con María José Hernández (nombre y primer apellido que coinciden con los de una edil socialista de su misma localidad) o el férreo control de la comunicación del ayuntamiento.
El único edil que ha logrado bajo el paragüas Independents per Montroi-Decidix en esta población de la Ribera Alta, el exalcalde Emilio Espert, ha decantado la alcaldía local para el PSPV y también tendrá un peso decisivo en el gobierno autóctono. El cuarto representante institucional en la provincia lo ha logrado en Palmera (con la denominado Poble-Decidix), en la comarca de la Safor, en un consistorio dominado por Compromís con mayoría absoluta. En Alicante ha entrado en Alcalalí.
La ejecutiva de Decidix, que se reunió recientemente en la sede de uno de sus asociados, Sumant per Torrent, quiere seguir adelante con su proyecto autonómico. “Se trata de reforzar la estructura del partido para ser más competitivos”, señalan desde esta federación que, a la par, busca ampliar su abanico de formaciones.
La tercera y más abigarrada coalición, Unió-n, la constituyeron dos partidos autóctonos, Renovacio Politica y AunaCV, y dos nacionales que han crecido desde el ámbito valenciano: Unión de Ciudadanos Independientes (Ucin) y Partido de Autónomos. No optaron a escala autonómica finalmente y se centraron en València ciudad con un acuerdo de fusión con el candidato de Ciudadanos, Fernando Giner. Este último logró 9.588 votos. Resulta imposible saber cuál hubiera sido el resultado exacto (quizás podría estimarse el aproximado) de Unió-n si hubiera concurrido por su cuenta.
Se tomaron esa cita electoral como un primer paso. “Seguimos adelante con Giner y tratando de aglutinar a otros referentes del valencianismo como Fermín Artagoitia (de nuevo un histórico ex de UV, que la presidenta autonómica de Ciudadanos, Mamen Peris, reclutó para su candidatura de Ciudadanos a Les Corts) o Vicente González Lizondo. Esperamos sumar a más gente para un proyecto que podría estar listo a finales de año”, indican desde la coalición.
En el resto de municipios donde alguno de sus componentes pudo presentar lista compitieron por separado. Quien con mayor intensidad y éxito lo hizo fue Ucin, que ha recolectado 11 concejales, entre los que se hallan dos alcaldesas: la de San Antonio de Benagéber (Eva Tejedor) y la de Loriguilla (Montse Cervera).
Con esos mimbres locales, las formaciones regionalistas con corazón, trasfondo o, en el caso de algunos partidos con los que se alían, ribetes valencianistas, empiezan a preparar ya sus proyectos futuros para intentar resurgir 24 años después de que su gran referente, Unión Valenciana, se quedara fuera de Les Corts.
Pasadas las elecciones de 2023 posan la mirada en la lontananza de las de 2027. No obstante, y mientras tanto, la incertidumbre nacional y la posibilidad de reedición de los comicios generales mantienen su ánimo, ya de por sí inasequible al desaliento, más vivo.